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Оглавление5. LACONIA
ESTUDIO GEOGRÁFICO (1-3)
1 Golfo de Laconia, Taigeto, Esparta, cabo Ténaro, Citera
Después del golfo de Mesenia se encuentra el golfo de Laconia entre el cabo Ténaro y el cabo Malea; se desvía ligeramente del sur hacia el este. Las Tírides, un promontorio escarpado batido por las corrientes que está en el golfo de Mesenia, distan ciento treinta estadios del cabo Ténaro 347 .
El Taigeto domina esta parte de la costa; situado a escasa distancia del mar, es un macizo alto y abrupto que, en su parte septentrional, se une a las laderas de los montes de Arcadia de tal modo que sólo deja en medio un profundo valle, por donde Mesenia confina con Laconia 348 .
Al pie del Taigeto, en el interior, están Esparta y Amiclas, donde se encuentra el templo de Apolo, y también Faris 349 . El sitio donde se levanta la ciudad de Esparta se encuentra en un terreno más bajo 350 , aunque tenga montañas en medio; no hay, sin embargo, ninguna parte pantanosa, aun cuando antiguamente era pantanosa la zona suburbana, y por eso la llamaban Limnas 351 ; el santuario de Dioniso de Limnas 352 también se encontraba en un suelo húmedo, pero ahora sus fundamentos se levantan en un terreno seco.
En el golfo hay un promontorio que penetra en el mar, el Ténaro, donde se encuentra el santuario de Posidón 353 , construido en un recinto sagrado; al lado se encuentra una caverna 354 , por la cual, según la leyenda, Cerbero fue sacado del Hades por Heracles.
Desde allí al cabo Ficunte 355 de Cirenaica, en dirección sur, hay una travesía de tres mil estadios 356 ; hacia el oeste, hasta el cabo Paquino, la punta de Sicilia, hay cuatro mil seiscientos estadios, aunque algunos dicen que son cuatro mil 357 ; hacia el este, hasta el cabo Malea, contando las sinuosidades de la costa, son seiscientos setenta estadios; y hasta Onúgnato, una península baja situada aquende el cabo Malea, quinientos veinte 358 .
Enfrente de Onúgnato, a una distancia de cuarenta estadios 359 , se encuentra Citera, una isla de buenos puertos con una ciudad del mismo nombre; la ocupa como propiedad privada Euricles 360 , en nuestros días jefe de los lacedemonios; a su alrededor hay numerosos islotes, algunos al lado y otros un poco más lejos.
Hasta Córico, el promontorio de Creta, la derrota más corta es de setecientos estadios 361 .
2 Descripción de la costa del golfo de Laconia
Después del cabo Ténaro, costeando hacia Onúgnato y el cabo Malea, se encuentra la ciudad de Psamatunte 362 ; a continuación Ásine y Gitio, la base naval de Esparta, de la que está a una distancia de doscientos cuarenta estadios; se trata, según se dice, de un puerto artificial. Después viene la desembocadura del Eurotas, entre Gitio y Acreas 363 ; hasta este punto la travesía a lo largo de la costa es de unos doscientos cuarenta estadios. A continuación, hacia el interior, se encuentra una zona pantanosa y el pueblo de Helo 364 ; antiguamente era una ciudad, como afirma Homero:
Los que ocupaban Amidas y Helo, ciudad al borde delmar 365 .
Se dice que es una fundación de Heleo, hijo de Perseo 366 .
Hay asimismo una llanura llamada Leuce; después una ciudad, Ciparisia 367 , que se levanta en una península y tiene un puerto. A continuación viene Onúgnato con su puerto, después la ciudad de Bea 368 , y después Malea. De Onúgnato a Malea hay ciento cincuenta estadios 369 . También se encuentra en Laconia la ciudad de Asopo 370 .
3 Las ciudades del «Catálogo» homérico. Mese y los ejemplos de apócope .
Dicen que de las ciudades citadas en el Catálogo de Homero Mese no se encuentra en ninguna parte, y que Mesoa no es una parte del territorio, sino un barrio de Esparta, como el Limneo, que está junto al monte Tórnax 371 .
Algunos consideran Mese como una forma apocopada de Mesene; ésta, en efecto, como se ha dicho 372 , formaba parte de Laconia.
Como ejemplos de apócope del mismo poeta se citan krî, dô y máps , y en la expresión:
el héroe Automedonte y Álcimo 373
el segundo nombre estaría en lugar de Alcimedonte. Respecto a Hesíodo se observa que dice brî por brithý («pesado») y briarón («fuerte»); Sófocles e Ión dicen rh i en vez de rh idion («fácil») 374 , y Epicarmo lî en lugar de lían («demasiado») y Syrakṓ en lugar de Syrákousai («Siracusa») 375 . En Empédocles se encuentra:
la «óps» de ambos se convierte en una 376 ,
donde óps está en lugar de ópsis («vista»), igual que en Antímaco:
la sagrada «óps» de Deméter eleusinia 377 ,
y en el mismo autor encontramos álphi en lugar de álphiton («harina»). Euforión usa hêl en lugar de hêlos («clavo») 378 . En Filetas leemos:
las siervas ponen en las cestas la blanca «éri» 379
donde éri está por érion («lana»).
Los «pēdá» cara al viento 380
dice Arato entendiendo pēdália («timones»); y Simias dice Dōdṓ por Dodṓnē («Dodona») 381 . De las otras ciudades mencionadas por el poeta, algunas han sido destruidas, de otras quedan vestigios, y otras han cambiado de nombre, como es el caso de Augeas 382 , que ha pasado a Egeas; Augeas de Lócride, en cambio, ha desaparecido del todo 383 . Respecto a Las, se cuenta que una vez los Dioscuros la tomaron por asedio, lo que les valió el sobrenombre de «Lapérsai» 384 . Sófocles dice en un pasaje:
Juro por los dos «Lapérsai», por el Eurotas en tercer lugar, por los dioses de Argos y por los de Esparta 385 .
HISTORIA DE LACONIA (4-5)
4 Los Heraclidas Eurístenes y Procles y la división de Laconia. Espartiatas, periecos e hilotas
Éforo 386 cuenta que Eurístenes y Procles, los Heraclidas que se apoderaron de Laconia, dividieron el país en seis partes y fundaron ciudades; uno de estos distritos, Amiclas 387 , fue reservado para adjudicarlo al traidor que les había entregado Laconia 388 y había persuadido al señor aqueo que la ocupaba a aceptar un acuerdo y retirarse a Jonia con su pueblo. Designaron Esparta como residencia real para ellos mismos, y enviaron reyes a los otros distritos, autorizándoles, en vista de la escasez de población, a aceptar como convecinos a los extranjeros que lo desearan. Utilizaron Las como base naval debido a la excelencia de su puerto, y Egis 389 , cuyo territorio confinaba con todos los pueblos de alrededor, como plaza fuerte frente al enemigo; y se sirvieron de Faris como depósito del tesoro público a causa de la seguridad que ofrecía ante peligros internos y externos 390 .
Todos los periecos 391 , si bien sometidos a los espartiatas, disfrutaban de igualdad de derechos, participando en lavida política y en el ejercicio del poder. Pero Agis, el hijo de Eurístenes, les privó de la igualdad de derechos y les ordenó pagar un tributo a Esparta; todos se sometieron a esta imposición, salvo los heleos, que habitaban Helo y recibían el nombre de hilotas 392 ; éstos se sublevaron, pero en una guerra fueron doblegados por la fuerza y condenados a la esclavitud con la condición de que a su dueño no le estaba permitido ni darles la libertad ni venderlos fuera de las fronteras del país. Esta guerra fue conocida como la guerra contra los hilotas.
Puede decirse que la institución de los hilotas, mantenida hasta la ocupación romana 393 , fue instaurada por Agis y su gobierno; en cierta manera los lacedemonios los tenían como esclavos públicos, imponiéndoles una determinada residencia y la realización de servicios especiales.
5 Los aqueos en Laconia y Acaya. Constitución y evolución del Estado espartano .
En lo que respecta al Estado de los laconios y a las transformaciones que ha sufrido, podemos pasar por alto la mayor parte de los hechos, dado que son bien conocidos, pero hay algunos detalles que tal vez merezca la pena recordar. Se dice, por ejemplo, que los aqueos de Ftiótide acompañaron a Pélope en su descenso al Peloponeso y que se establecieron en Laconia, y que se distinguieron por su valor de tal modo que el Peloponeso, llamado desde hacía muchos años Argos, recibió entonces el nombre de Argos Aquea, denominación que no sólo se dio al Peloponeso, sino que también se aplicó de modo particular a Laconia; y así el pasaje de Homero:
¿Dónde estaba Menelao?... ¿no estaba en Argos Aquea? 394
algunos lo interpretan como si dijera:
¿no estaba en Laconia?
En el tiempo del retomo de los Heraclidas, cuando Filónomo entregó el país a los dorios, los aqueos emigraron de Laconia y se instalaron en el territorio de los jonios que hoy sigue llamándose Acaya. Pero hablaremos de todo ello en los capítulos dedicados a Acaya 395 .
Los nuevos dueños de Laconia, ya desde el principio 396 , dieron pruebas de moderación, pero, una vez que confiaron la organización del Estado a Licurgo 397 , superaron de tal forma a los otros pueblos que fueron los únicos entre los griegos en ejercer su dominio tanto por tierra como por mar, y mantuvieron su dominio sobre los pueblos de Grecia hasta que primero los tebanos, e inmediatamente después los macedonios, les arrebataron su hegemonía 398 . Pero ni siquiera ante estos últimos se doblegaron completamente, sino que preservaron su autonomía y no dejaron de disputar por la supremacía tanto con los otros pueblos griegos como con los reyes de los macedonios. Y cuando éstos fueron derrotados por los romanos 399 , los lacedemonios tuvieron algunos roces de escasa importancia con los pretores enviados por Roma debido a la desastrosa política de los tiranos que entonces los gobernaban 400 . Pero luego que se recuperaron de aquella situación, fueron honrados con un trato especial y conservaron su libertad sin estar obligados a más contribución que a la de los servicios de amistad 401 .
Recientemente, sin embargo, Euricles ha provocado desórdenes entre ellos, dando la impresión de haber abusado de la amistad de César por encima de toda medida en su afán por mantener la autoridad sobre su pueblo 402 ; pero el desorden ha tocado pronto a su fin al encontrarse Euricles con su inevitable destino 403 y ser su hijo totalmente ajeno a una ambición tan desmesurada. Y el caso es que los eleuterolaconios 404 obtuvieron un estatuto político especial, después que los periecos, y también los hilotas, tomaron la iniciativa de adherirse a la causa de los romanos en los momentos en que Esparta estaba gobernada por los tiranos.
Helánico afirma que fueron Eurístenes y Procles quienes establecieron la constitución 405 , pero Éforo rechaza esta opinión y critica a Helánico por no mencionar en ninguna parte a Licurgo y por atribuir la obra de éste a personas que no tienen nada que ver con él; sólo a Licurgo, dice Éforo, se ha honrado con la erección de un templo y con la celebración de sacrificios anuales, mientras que a Eurístenes y Procles, pese a su condición de fundadores, ni siquiera se les ha concedido el honor de transmitir a sus descendientes los nombres de Euristénidas y Proclidas, sino que los primeros se llaman Agíadas, derivado de Agis, hijo de Eurístenes, y los segundos Euripóntidas, del nombre de Euriponte, el hijo de Procles, porque los hijos ejercieron su autoridad con justicia, mientras que los padres impusieron la suya por medio de forasteros a quienes habían acogido; y por ello no se les concedió el título de arquegetas 406 que se suele dar a todos los fundadores de un Estado. Por otra parte, Pausanias 407 , desterrado por la otra casa, la de los Euripóntidas, durante su exilio compuso un tratado contra las leyes de Licurgo —miembro de la casa que lo había expulsado— en el que cita los oráculos dados a Licurgo 408 , los más de ellos en su elogio.
COMENTARIOS GEOGRÁFICOS Y CURIOSIDADES (6-8)
6 Recursos naturales de Laconia y Mesenia. De Laconia a Élide: el Pamiso y las fronteras
En cuanto a la naturaleza de estas regiones, incluida Mesenia, se puede aceptar lo que dice Eurípides 409 cuando respecto a Laconia afirma que tiene
mucho labrantío, aunque no fácil de cultivar,
puesto que es un hondón circundado de montañas 410 ,
abrupto y difícil de invadir para el enemigo .
Y que Mesenia es
una tierra de hermosos frutos,
bañada por corrientes sin número,
de buenos pastos para bueyes y corderos,
ni demasiado rigurosa en los vientos del invierno,
ni tampoco calentada en exceso por las cuádrigas del sol .
Y un poco más abajo, al hablar de los sorteos que hicieron los Heraclidas para el reparto de las tierras, dice que el primero se realizó para convertirse en
señor de la tierra de Laconia, de suelo mediocre ,
y el segundo para obtener Mesenia,
cuya fertilidad no se puede expresar con palabras .
Y Tirteo 411 también habla en los mismos términos.
Por el contrario, en cuanto a que la frontera entre Laconia y Mesenia sea, como dice el mismo Eurípides,
el Pamiso, que se lanza en el mar ,
puede no estarse de acuerdo, puesto que este río discurre por el centro de Mesenia y no toca en ningún punto la Laconia actual 412 . Tampoco está en lo cierto cuando respecto a Mesenia, que es un país marítimo igual que Laconia, afirma que está lejos de las rutas de los navegantes 413 . Y no indica correctamente los límites de Élide cuando dice:
más allá, una vez cruzado el río, se encuentra Élide,
en la vecindad de Zeus .
Si quiere referirse a la Élide actual 414 , que limita con Mesenia, el Pamiso no tiene ningún punto de contacto con ella, como tampoco lo tiene con Laconia, puesto que, como ya se ha dicho, discurre por el centro de Mesenia; y si quiere referirse a la antigua Élide llamada Cava 415 , todavía se aparta más de la verdad, dado que, una vez atravesado el Pamiso, queda aún una gran parte de Mesenia, luego todo el territorio de los caucones y los macistios, que se llamaba Trifilia, luego Pisátide y Olimpia, y finalmente, trescientos estadios más allá 416 , se llega a Élide.
7 Algunas particularidades de Laconia
Al darse el caso de que algunos escriben Lacedemonia kētṓessa y otros kaietáessa 417 , se plantea la cuestión de cómo debe interpretarse kētṓessa . ¿Deriva de la palabra Kêtos? 418 .
¿Significa «grande»? Es lo que parece más verosímil. En cuanto al término kaietáessa , algunos lo interpretan como kalaminthṓdēs 419 , mientras que otros advierten que reciben el nombre de kaietoí las hendiduras producidas por los terremotos 420 y que kaiétas es una palabra usada entre los lacedemonios para designar su prisión, que es una especie de caverna 421 . Algunos, sin embargo, afirman que estas cavidades reciben preferentemente el nombre de kôoi , de donde vendría la expresión
con los monstruos «oreskṓioisi» 422 .
Laconia es una tierra muy expuesta a los terremotos, y se conserva el recuerdo de algunos hundimientos que han afectado a cumbres del Taigeto.
Hay canteras de una piedra muy apreciada llamada del Ténaro; son las antiguas pedreras del Ténaro. Y recientemente algunas personas han iniciado la explotación de un yacimiento muy importante en el Taigeto con el soporte financiero que les proporciona el lujo de los romanos 423 .
8 El sentido de la palabra Lacedemonia en Homero
Que el mismo nombre de Lacedemonia designa tanto el territorio como la ciudad lo deja claro Homero (y digo territorio contando con la inclusión de Mesenia). Cuando respecto a los arcos dice:
Hermosos regalos que al encontrarlo en Lacedemonia le hizo un amigo, Ífito, hijo de Éurito 424 ,
y luego añade:
los dos coincidieron en Mesenia, en la casa de Ortíloco 425 ,
Homero se refiere al territorio del que Mesenia también formaba parte. Para él no había pues diferencia entre decir:
al encontrarlo en Lacedemonia le hizo un amigo ,
y agregar:
los dos coincidieron en Mesenia .
Porque, que Feras es la casa de Ortíloco, se ve claramente en este pasaje:
y llegaron a Feras, a la mansión de Diocles,
el hijo de Ortíloco 426 ,
referido a Telémaco y Pisístrato. Y Feras forma parte de Mesenia. Pero cuando Homero dice que Telémaco y sus compañeros, tras partir de Feras, «tuvieron el yugo en movimiento durante todo el día» 427 , y luego añade:
y el sol se puso,
y llegaron a la honda hoya de Lacedemonia,
dirigiéndose en seguida al palacio de Menelao 428 ,
en este caso debe entenderse que se trata de la ciudad; si no fuera así, el poeta hablaría obviamente de una llegada a Lacedemonia tras partir de Lacedemonia. Y además no sería creíble que la residencia de Menelao no estuviera en Esparta, o que, si no estaba allá, Telémaco dijera:
Voy a ir a Esparta y a Pilos 429 .
El hecho de que Homero use los epítetos del territorio 430 parece estar en contradicción con esta interpretación si en ello no se quiere ver, ¡por Zeus!, una licencia poética; pero en todo ello estaría la explicación de que Mesene no fuera una ciudad de Laconia ni del reino de Néstor, ni considerada aparte en el Catálogo y de que no participara en la expedición.