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PROPUESTA DE TALLER DE ORIENTACIÓN VOCACIONAL APOYADO EN EL TRABAJO COLABORATIVO

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Carlos Javier Cruz Franco *

Ignacio Pérez Pulido **

Oscar Ulises Reynoso González ***

En este capítulo se presenta una propuesta de taller de orientación vocacional dirigido a estudiantes de preparatoria y sustentado en la metodología “jigsaw” o “rompecabezas” (Aronson, Blaney, Stephin, Sikes y Snapp, 1978) de trabajo colaborativo. En primera instancia se reflexiona sobre la relevancia de la elección de carrera para la juventud inscrita en este nivel educativo y la importancia de que esta decisión se adopte de manera informada y consciente. Posteriormente, se analizan las características y beneficios generales del trabajo colaborativo en el aprendizaje del alumnado y, en específico, las ventajas de dicha técnica para fomentar una elección de carrera consciente y bien informada. Acto seguido se expone paso a paso la propuesta del taller de orientación vocacional, para ello se detallan las acciones a seguir por parte del personal docente y del alumnado en cada etapa del curso-taller. Por último, se concluye con una reflexión sobre las ventajas y alcances de esta técnica para el acompañamiento del estudiantado durante su proceso de elección de carrera.

LA ORIENTACIÓN VOCACIONAL EN EL ESTUDIANTADO DE BACHILLERATO

Uno de los procesos más relevantes para el estudiantado de preparatoria es la elección de carrera, ya que representa una decisión transcendental para su futuro (Di Gresia, 2009). A pesar de la importancia que implica esta decisión, es común que el estudiantado carezca de la información necesaria para una adecuada elección de carrera y universidad (Guzmán, 2013).

En este sentido, se debe considerar que la elección de carrera es un proceso multifactorial en el que intervienen diversos elementos, tales como la vocación (Castañeda y Solorio, 2014), las aspiraciones económicas del estudiante (Ramírez, 2013), su situación económica (García y Moreno, 2012), el prestigio de la universidad (Bourdieu, 2013), las oportunidades de estudio que brinda el lugar de residencia (Castañeda y Solorio, 2014), las recomendaciones de familiares y amigos (Mancera, 2013), entre otras.

Es importante reconocer que dichos componentes interactúan entre sí y que el estudiantado cuenta con características sociales, económicas y culturales diferentes, por ello, la elección de carrera termina siendo una combinación única que surge de las particularidades de cada sujeto (Pérez, 2016), situación que ha fomentado el surgimiento de investigaciones enfocadas en el estudiantado entendiéndolo como actores, lo que ha permitido una mayor comprensión del proceso de elección de carrera (Guzmán, 2013).

Lo anterior hace evidente la complejidad del proceso de elección de carrera, esto puede provocar incertidumbre en los estudiantes y que sus decisiones sean poco reflexionadas e influidas por el azar, carentes de información adecuada y asesoradas por personas poco preparadas y alejadas del medio universitario (Ramírez, 2013), lo que puede acarrear dificultades como bajo rendimiento e incluso la deserción durante sus estudios universitarios.

Por el contrario, se ha demostrado fehacientemente que el rendimiento académico en la universidad se ve favorecido cuando el estudiantado elige su carrera de manera consciente y reflexionada (González, 2009). Esto hace evidente que no es recomendable dejar al estudiantado toda la responsabilidad de la elección de carrera y que se hace necesario un proceso de acompañamiento en el que se consideren los diferentes factores que intervienen en este proceso, donde se incluyan personas con experiencia capaces de orientar y ayudar al alumnado (García y Moreno, 2012).

Una de las estrategias más utilizadas para apoyar al estudiantado durante su elección de carrera ha sido incluir en los planes de estudio de bachillerato la orientación vocacional; esto con el fin de fomentar decisiones conscientes e informadas y con ello elevar el rendimiento académico y disminuir la deserción en la universidad.

La orientación vocacional ha sido definida como un proceso enfocado en el estudiantado con el fin de ayudarlo a conocer sus intereses, actitudes y habilidades profesionales (Castañeda y Solorio, 2014). En este proceso, el orientador asume la responsabilidad de capacitar y ubicar a la juventud para que elijan una carrera universitaria, esto con el apoyo de diferentes instrumentos con el fin de facilitar su trayectoria escolar (De León y Rodríguez, 2007).

Por su parte, Leyva (2007), se enfoca en identificar las necesidades e intereses del estudiantado, esto con la intención de maximizar los beneficios de la orientación vocacional. En este mismo sentido, Corominas (2006) plantea un esquema básico de orientación vocacional que busca apoyar al estudiantado durante su elección profesional a través de cuatro etapas: a) el conocimiento de sí misma/o; b) el conocimiento de la oferta del entorno; c) la adopción de decisiones, y d) la implementación de la decisión. Uno de los principales aportes de estas visiones es el considerar las características del estudiantado y también de su entorno y con base en ello brindarle condiciones para decidir de manera consciente e informada.

Como se aprecia en los párrafos anteriores, es evidente la necesidad de que las escuelas promuevan mecanismos innovadores de acompañamiento. Atendiendo a lo anterior, las técnicas de trabajo cooperativo fomentan en el estudiantado la adquisición de conocimientos y habilidades de reflexión que les permitan una mejor comprensión del campo universitario.

El aprendizaje cooperativo se desprende de la teoría constructivista de la educación; por lo tanto, parte de la premisa de que el individuo construye sus conocimientos conforme va avanzando su vida, de manera que los conocimientos previos sirven como base de los nuevos. En este sentido, el trabajo cooperativo fomenta el aprendizaje a partir de las experiencias de los otros miembros del grupo, lo que permite alcanzar mejores resultados en comparación con el trabajo individual (Guitert y Giménez, 2000).

Una de las técnicas para fomentar el aprendizaje cooperativo es el rompecabezas, la cual consiste en conformar equipos, determinar un objetivo a alcanzar y repartir información y responsabilidades entre las y los integrantes para lograr la meta propuesta. Esta técnica fomenta la interdependencia positiva y la interacción cara a cara; además contribuye al desarrollo de habilidades sociales al convivir con su grupo de trabajo (Jiménez, Vargas y Santamaría, 2007).

Atendiendo lo planteado líneas arriba, a continuación se presenta una propuesta de taller de orientación vocacional basado en la técnica del rompecabezas, esto con el objetivo de desarrollar estrategias innovadoras que permitan involucrar, activamente, al estudiantado en su proceso de elección de carrera y que a la vez promuevan en un periodo relativamente corto el conocimiento y la comprensión del campo universitario y sus carreras, con el fin de que las y los estudiantes cuenten con las condiciones necesarias para adoptar decisiones pertinentes respecto a su futuro profesional.

ESTRUCTURA DEL TALLER DE ORIENTACIÓN VOCACIONAL APOYADO EN LA TÉCNICA DEL ROMPECABEZAS. PREPARATIVOS PARA EL TALLER

Antes de comenzar con el taller de orientación vocacional se deben trabajar distintos aspectos importantes. Para la metodología de trabajo que se utiliza es necesario conformar equipos de cuatro personas para promover el intercambio de información de manera adecuada.

Los equipos de trabajo se realizan mediante la aplicación de la prueba de aptitud CHASIDE (RIASEC), diseñada por Holland, en 1959, la cual muestra los intereses y las aptitudes del alumnado. La prueba tiene dos matrices de resultados: la primera detecta los intereses del alumnado y la segunda identifica sus aptitudes. Esta prueba permite separar al estudiantado por áreas profesionales, a las cuales se nombraron “familias de carreras” y se organizan de la siguiente manera: administrativas/contables, humanísticas/sociales, artísticas, medicina/ciencias de la salud, ingeniería/computación, defensa/seguridad.

La prueba mencionada se aplica al iniciar el semestre, como parte de un curso propedéutico. Es pertinente concientizar al alumnado sobre la importancia de contestar el instrumento con sinceridad, ya que si sus respuestas se guían por el azar o son deshonestas los resultados no serán válidos, lo que afectaría tanto a las y los estudiantes al generar información distorsionada, como a los equipos de trabajo ya que quedarán desequilibrados.

Una vez obtenidos los resultados del test, se conforman los grupos de trabajo a partir de la matriz “intereses del alumno”. Cada estudiante se integra a la familia de carrera en la que obtuvo el puntaje más alto. Debido a que los equipos admiten un máximo de cuatro integrantes, las y los estudiantes restantes se integraran a la familia en donde obtuvieron el segundo puntaje más alto, esto con el fin de que nadie quede asilado y sin equipo de trabajo. La integración de los equipos se da a conocer durante la primera sesión del taller de orientación vocacional.

SESIÓN 1: CONFORMACIÓN DE EQUIPOS Y EXPLICACIÓN DEL ÁRBOL PROFESIONAL

La primera actividad del taller consiste en la entrega, a cada estudiante, de sus resultados de la prueba de orientación vocacional y se les hace saber el equipo al que se integrarán y la familia de carreras que trabajarán durante el taller. Es pertinente mencionar que es posible que alguien manifieste la intención de integrarse a otro equipo, ya sea por afinidad con sus compañeros/as o por su interés en otra familia de carreras; en estos casos se invita a cada alumno/a a permanecer en la familia que arrojó el instrumento, pues la intención es que conozcan de primera mano las carreras afines a su perfil profesional; además, se les hace saber que en distintos momentos del taller tendrán oportunidad interactuar con los integrantes de los otros equipos, lo que les permitirá conocer las características de las demás carreras.

Una vez conformados los equipos, el facilitador/a del taller explica a los participantes la dinámica del “árbol genealógico profesional”, la cual tiene como finalidad que cada estudiante identifique las actividades profesionales de familiares y amigos/as cercanos/as; es importante aclarar se deben considerar las profesiones de todos, incluso aquellas que no requieren estudios universitarios. Este ejercicio permite hacer conscientes los apoyos sociales de cada estudiante.

Por último, el facilitador/a hace saber a los estudiantes que en la siguiente sesión cada quien realizará su propio árbol profesional y les solicita los materiales que deberán llevar para elaborarlo; además, se pide que investiguen las profesiones y máximo grado de estudios de las personas que colocarán en su árbol.

SESIÓN 2: ELABORACIÓN DEL ÁRBOL PROFESIONAL

La sesión inicia con la realización del árbol genealógico, para ello, con los materiales y la información solicitada previamente se indica a cada estudiante que dibuje un árbol y al centro escriban su nombre. El facilitador/a pide a los equipos que escriban en las ramas los nombres de los familiares y amigos/as, de manera que las personas que coloquen más cerca de ellos sean quienes tienen un significado más especial en su vida y quienes estén más lejos son personas menos allegadas pero siguen siendo importantes.

Además del nombre, deben escribir su parentesco y profesión, en la parte posterior de la cartulina deben responder dos preguntas sencillas, pero con mucho significado para ellos: “¿A quién colocaste más cerca de ti?” y “¿Por qué?”. Una vez terminado el árbol se deben juntar con el grupo de trabajo que se les asignó en la sesión anterior y comentar con sus compañeros cuáles son las cinco mejores y peores profesiones de su árbol. Una vez que todos hayan participado elegirán las cinco profesiones más destacadas de aquellas que fueron mencionadas en el equipo.

Posteriormente se conforman equipos secundarios, para ello se recomienda que cada integrante se numere del 1 al 4 y se incorpore al equipo que le corresponda. Una vez conformados los equipos secundarios cada participante debe mencionar las cinco profesiones o carreras que se habían elegido en su equipo original. Este trabajo concluye con la elección de las cinco carreras que crean más interesantes. Después regresan a su equipo original y comentan las carreras que eligieron y porqué, realizan una conclusión y uno de ellos pasa al frente a comentarla al grupo.

SESIÓN 3: PROFESIONES EN MI COMUNIDAD

En esta sesión se trabaja con las profesiones de la comunidad en la que vive el estudiantado. Para ello, éste debe investigar previamente las universidades que se encuentran cerca de su localidad, las carreras que ofrecen y de qué trata cada una de ellas, para elaborar un profesiograma por cada familia de carreras. La investigación de las universidades y carreras debe apegarse a la familia de carreras a la que pertenecen.

Para comenzar la sesión, cada estudiante se reúne con su equipo original para compartir y organizar la información recabada de manera individual. Posteriormente se reúnen con el equipo secundario, conformado en la sesión anterior, para comentar la información obtenida por cada familia de carreras. Una vez que cada estudiante comparte su información con el equipo secundario, cada participante debe anotar al menos diez de las carreras mencionadas por sus compañeros y después seleccionar las tres que a su criterio personal sean las más relevantes.

Una vez terminada esta actividad regresan a su grupo original, comparten las tres carreras que eligieron y explican las razones de su elección, para finalizar con una conclusión por equipos, es importante señalar que es posible que las carreras elegidas correspondan a familias distintas a las del equipo original.

SESIÓN 4: CARTEL PUBLICITARIO

Para esta sesión cada estudiante debe investigar de manera previa el perfil profesiográfico y la demanda laboral de las tres carreras que eligieron en la actividad anterior. Con estos insumos, el estudiantado se integra a su equipo original para elaborar un cartel publicitario en donde sólo coloquen tres carreras de las 12 que tienen como equipo. El cartel debe incluir la universidad donde se ofrece la carrera, costos de inscripción y colegiatura, así como un resumen del perfil de ingreso y egreso.

Posteriormente, se reúnen con el equipo secundario en donde muestran el anuncio a las y los integrantes y comparten sus opiniones y regresan a su grupo original para comentar la experiencia con los demás. Para finalizar la sesión debe pasar una o un integrante de cada equipo a mostrar su cartel a todo el salón y en sesión plenaria el alumnado elegirá el cartel con mejor información y diseño.

SESIÓN 5: COMPARACIÓN DE PERFILES Y PROFESIOGRAMAS

En esta sesión cada estudiante elige una carrera de las tres seleccionadas en la sesión anterior y con sus propias palabras plasma sus conocimientos sobre la misma. Se busca que escriba las actividades que se realizan en dicha carrera, los lugares de trabajo relacionados con la misma y las posibilidades de desarrollo profesional para quienes eligen esta carrera. Después comparan lo que escribieron con el profesiograma que elaboraron en la tercera sesión y realizan una conclusión personal, la cual comparten con el equipo original. En caso de que un o una estudiante elija una carrera de una familia diferente el profesiograma a utilizar será el de la familia que le corresponda.

A continuación se toman unos minutos para compartir sus conclusiones con los y las integrantes del equipo secundario. Al regresar al grupo original reflexionan lo que escucharon de los y las integrantes del otro equipo y elaboran una conclusión sobre cuáles son las licenciaturas que brindan mejores oportunidades de desarrollo.

SESIÓN 6: FERIA DE LAS PROFESIONES

Como trabajo previo a la sexta sesión, el alumnado debe preparar una feria de profesiones; para ello, cada equipo invitará a un o una profesionista de la familia que le corresponde para que comparta con el grupo su experiencia profesional. Además, todos y todas deberán coordinarse para organizar la logística del evento (pausa para el café, recepción de invitados especiales, materiales requeridos para la exposición, orden de los ponentes, etcétera). Es pertinente aclarar que el alumnado será quien se responsabilice del evento y contará con el apoyo del facilitador o facilitadora en caso de que lo requieran.

Durante la feria de profesiones cada expositor/a contará con un tiempo aproximado de 10 minutos, en los cuales participará en una entrevista semiestructurada que contemplará las siguientes preguntas: 1) ¿cómo fue su elección de carrera? y 2) ¿la carrera cumplió con sus expectativas? Esta actividad tiene el objetivo de que cada participante en el taller cuente con información relevante y de primera mano que le permita comprender mejor las diferentes familias profesionales.

SESIÓN 7: SIMULACIÓN DEL MÓDULO DE TRÁMITES

En esta sesión el estudiantado realizará un simulacro de módulo de trámites de ingreso a la universidad. Previo a ello, cada equipo deberá llevar los materiales necesarios para establecer su propio módulo, así como la información que brindarán a sus compañeros/as. Por ejemplo: costos de inscripción y matrícula, ubicación de la universidad a la que representan, requisitos de inscripción, documentación requerida, etcétera.

Para iniciar la actividad, cada equipo cuenta con 10 minutos para armar su módulo de trámites, en el que pondrán a la mano de los demás los materiales informativos que hayan elaborado. Una vez iniciada la dinámica, los y las participantes acudirán a cada módulo a solicitar información. La labor de atención del módulo será rotativa, de manera que cada 10 minutos un miembro diferente del equipo se encargue de esta función, esto con la finalidad de que cada estudiante tenga oportunidad de acudir a los diferentes módulos para recibir la información de cada equipo. El objetivo de este ejercicio es ayudar al estudiantado a disminuir la sensación de nerviosismo al momento de hacer trámites, además de fomentar la convivencia con sus compañeros/as de clase.

SESIÓN 8: EVALUACIÓN DEL TALLER

En la octava y última sesión se realiza una evaluación con la finalidad de conocer las opiniones del alumnado sobre el taller. Para ello el facilitador formula distintas preguntas encaminadas a conocer las experiencias de los y las participantes. Esta actividad busca identificar las fortalezas y las debilidades del taller con el fin de establecer estrategias de mejora en el futuro.

CONCLUSIÓN

El presente trabajo tuvo la finalidad de dar a conocer una propuesta de taller de orientación vocacional, apoyado en la técnica de trabajo colaborativo del rompecabezas, esto en atención a la imperiosa necesidad de desplegar estrategias innovadoras que a través del trabajo en equipo involucren, activamente, al estudiantado de bachillerato en su proceso de elección de estudios universitarios. Para ello se describen las actividades y materiales utilizados a lo largo del taller.

Esta propuesta pretende brindar al estudiantado las herramientas necesarias para responsabilizarse de sus propios procesos de elección, esto a través de la comprensión de sus intereses y habilidades personales y la detección de información relevante referente a los perfiles profesionales de las carreras de interés, así como de las instituciones universitarias a su alcance. Todo ello con la intención de fomentar una elección adecuada a los intereses y necesidades de cada estudiante y, así, evitar la deserción y elevar su rendimiento durante sus estudios universitarios.

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* Estudiante de la maestría en Procesos Innovadores en el Aprendizaje, Universidad de Guadalajara.

** Doctor en Educación, adscrito a la Universidad de Guadalajara, cuerpo académico “Educación y sociedad” (UGU-433).

*** Doctor en Psicología, adscrito a la Universidad de Guadalajara, SNI-Conacyt, en nivel I.

Orientación vocacional para las nuevas generaciones

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