Читать книгу Muerte en el crepúsculo - Marcos David González Fernández - Страница 22

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La tercera y, hasta entonces última víctima respondía, en vida, al nombre de Octavio Bermúdez. Se trataba de un profesor retirado de varios institutos en aquella ciudad, según rezaba en el informe dispuesto sobre su escritorio.

—Los tres eran o habían sido profesores —comentó Juan a la secretaria que en ese momento iba entrando a la oficina—. Ya tenemos la segunda relación entre las víctimas.

—¿La segunda? —preguntó Martha, la secretaria, sin estar bien segura de a lo que el detective se refería.

Muerte en el crepúsculo

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