Читать книгу Cómo leer y escribir en la universidad - Mauricio Aguirre - Страница 23
4.1 Subrayado
ОглавлениеEs una técnica de análisis que servirá de base a otras técnicas y a través de la cual se destacan las ideas o datos fundamentales de un tema que merecen ser tenidos en cuenta para ser asimilados. En el fragmento que se ofrece en el siguiente recuadro, la idea principal se puede identificar con facilidad en la primera línea (aunque no siempre sucede así). Sin embargo, esta no es la única idea que debe destacarse. La técnica del subrayado debe ser útil para resaltar las ideas que juzgamos relevantes para el contexto en el que vamos a emplearlas. Así, en el fragmento en cuestión, se destaca, además de la idea principal (la «“buena presencia” es un requisito casi indispensable para conseguir un empleo en Lima»), que la idea de buena presencia es racista y que afecta más a las mujeres.
El género y la buena presencia
Juan Carlos Callirgos
La «buena presencia» es un requisito casi indispensable para conseguir un empleo en Lima. Revisando los avisos de empleos en un periódico un día al azar, notaremos que, para casi todo empleo diferente al de obrero, se necesita una «buena presencia». Indudablemente, esta es una categoría racista. Notaremos, además, que, en el caso de los empleos, el factor estético —que incluye lo racial— se une con el factor de género. Las mujeres necesitan mejor «presencia» para ser contratadas. Veamos un ejemplo: «EJECUTIVO solicita secretaria privada joven. Excelente presencia, aptitud para el modelaje» (El Comercio, sección D., p. 13, 08/08/91).
Adaptado de CALLIRGOS, Juan Carlos (1993) El racismo peruano, pp. 40-42 (consulta: 1 de junio de 2011) (http://www.cholonautas.edu.pe/modulo/upload/Callirgos%20IV.pdf).
Actividad 7
Subraya las ideas principales en el siguiente fragmento del mismo texto.
El género y la buena presencia
Juan Carlos Callirgos
[…] A los hombres, mientras tanto, no se les requiere con tanta frecuencia tener «buena presencia». El problema racial, pues, se une con otros. El de los empleos no es el único caso en que se une con otra problemática irresuelta: la de la desigualdad entre los géneros. Sucede con mayor claridad en el caso del servicio doméstico. La unión de los factores raciales, económicos, culturales y de género, en la explotación sufrida por las empleadas del hogar —las «cholas»—, es llamada puntualmente por Portocarrero (1984) «la dominación total». Debido a tales factores, muchas personas que emplean a las trabajadoras domésticas no las consideran como sus semejantes. Suprimiéndoseles elementales derechos humanos y laborales —jornada de ocho horas, seguridad social, derecho a la educación, salarios dignos, derecho de habitar fuera del centro de trabajo (sin el cual no pueden vivir lejos del control de sus patrones), etc.—, y abusándose de ellas —en algunos casos llegando a la tortura y la violación—, las empleadas domésticas no son vistas como portadoras de derechos. […]
Adaptado de CALLIRGOS, Juan Carlos (1993) El racismo peruano, pp. 40-42 (consulta: 1 de junio de 2011) (http://www.cholonautas.edu.pe/modulo/upload/Callirgos%20IV.pdf).