Читать книгу La Adoración Que Toca El Corazón De Dios - Nina Gardner - Страница 4

Prefacio

Оглавление

Desde mi juventud el Señor me ha impulsado a estudiar el Arca del Pacto. Por lo tanto, he recopilado muchos artículos referentes al tema. Por designio de Dios, llegué a ser líder de adoración en una iglesia donde aprendí varios puntos de vista sobre la adoración desde una variedad de preferencias, denominaciones, culturas y edades.

En verdad yo amaba ser líder de adoración, pero seguía sintiendo que faltaba algo, que había algo que aún no conocía. Aunque amaba los himnos, no eran suficientes para satisfacer mi anhelo de una experiencia más profunda de adoración. Mi deseo era deleitar a Dios, pero no sabía cómo hacerlo. Esto me motivó a aprender más.

Al buscar congresos de adoración, descubrí que la mayoría no enseñaba sobre este tema. Me animé mucho cuando supe de uno para formar líderes de adoración. Sin embargo, mi decepción fue grande cuando todo lo que ofrecían era “sólo déjese guiar por el Espíritu Santo.” Después de esto pude comprender que Dios era el único que tenía mis respuestas. Mi hambre de experimentar a Dios en la adoración me llenó de un gran entusiasmo para buscarlo.

En mi búsqueda, descubrí que el Arca del Pacto era solamente parte de lo que buscaba. Yo sabía que nosotros éramos el templo de Dios, como lo dice 1 Corintios 6:19, pero necesitaba más información para profundizarme en esta revelación. Años después, un jueves por la tarde, la líder de jóvenes de nuestra iglesia dio una enseñanza especial sobre los lugares del tabernáculo. Para esta ocasión, ella había colocado varios letreros en el edificio. Había un letrero en la puerta principal que decía, “Ahora estás entrando por las Puertas de Acción de Gracias.” Ingresando al vestíbulo, otro letrero, “Ahora estás en el Atrio Exterior de Alabanza.” De camino al santuario, otro letrero frente a las bancas, “Ahora estás en el Atrio Interior de Adoración.” Un letrero en el altar, “El Altar de Bronce.” Un letrero en la plataforma, “El Lugar Santo.” Y un letrero en la esquina de la plataforma, “El Lugar Santísimo.” Estos letreros ilustraban su enseñanza sobre los lugares del tabernáculo, con sus simbolismos y significados. Me sentí tan bendecida de que Dios había escuchado mis oraciones pidiéndole más información.

El Señor recompensó los años de investigación y oración acerca de los tabernáculos antiguos guiándome a El Tabernáculo de David, escrito por Kevin J. Conner (Conner, 1976). Fue entonces cuando Dios empezó a revelar los secretos de la adoración que Él deseaba. Investigué las citas bíblicas de Conner, pero también hice mi propio estudio. Leí que Dios le había dado el diseño del tabernáculo a Moisés, con ordenes explicitas de hacerlo “conforme al modelo” (Éxodo 25:40). Esto me hizo comprender que Dios tiene un patrón de adoración que debe ser seguido según Sus deseos exactos. Seguí orando, leyendo e investigando, y descubrí que David introdujo un tipo de adoración llena de júbilo que desafiaba al patrón de Moisés, ¡y a Dios le encantó! La institución de este patrón desconcertaría las mentes de los líderes tradicionales del tiempo de David. Después de este descubrimiento escribí mi primer libro, El Nuevo Orden de la Adoración Davídica, y oferecí mi primera conferencia sobre el tema. En estudios posteriores Dios me reveló las varias posiciones de Adoración Davídica, aunque en ese entonces no sabía que esto era para un otro libro. Ahora, he escrito este libro después de más de una década para exponer el patrón de adoración que fue instituido por David.

La Biblia nos muestra que muy pocos reyes y sacerdotes siguieron los caminos de David su padre; es decir, que restablecieron su patrón de adoración (2 Crónicas 34:2). Aún después de morir, sus sucesores no seguían el patrón establecido. Por lo tanto, una y otra vez ocurría una ruptura en el liderazgo, y la adoración que Dios amaba cesaba.

El profeta Amós vio claramente el deseo de Dios de una adoración verdadera y profetizó, “En aquel día yo levantaré el tabernáculo caído de David, y cerraré sus portillos y levantaré sus ruinas, y lo edificaré como en el tiempo pasado” (Amós 9:11). Amós sabía que Dios se había propuesto reconstruir el tabernáculo de David, y que nunca más habría una interrumpición de la adoración con júbilo en Su tabernáculo.

El apóstol Santiago, el hermano de Jesús, reconoció que el patrón de adoración de David estaba siendo re-instituido, y que ahora incluía a los gentiles. Después de escuchar que los gentiles estaban siendo salvos, Santiago escribió, “Y con esto concuerdan las palabras de los profetas, como está escrito: ‘Después de esto volveré y reedificaré el tabernáculo de David, que está caído; y repararé sus ruinas, y lo volveré a levantar’” (Hechos 15:15-16). Esta vez, Dios no solamente lo reedifica, sino que sella la ruptura para que no pueda caerse o ser destruido, sino que permanezca para siempre.

Al leer este libro, ten presente el diseño de los tabernáculos de Moisés y de David. Aunque no estamos bajo la ley, este patrón se basa en el diseño de aquella época porque era, y es, un ejemplo del patrón eterno de Dios. Sabemos que Jesús vino a cumplir la ley, y que nos redimió de la maldición del pecado siendo nuestro sacrifico de sangre. Por lo tanto, este libro no se trata de seguir la letra de la ley, sino de re-instituir este patrón eterno y fundamental de adoración que Dios declaró que perduraría para siempre (1 Crónicas 17:14).

David encontró la llave del corazón de Dios, pero Dios también halló a Su hombre. Dios dijo, “Hallé a David mi siervo, lo ungí con mi santa unción; Yo también le pondré por primogénito, El más excelso de los reyes de la tierra” (Salmos 89:20, 27). Estoy convencida de que Dios quiere darnos una herencia de proporciones eternas, ¡si usamos la llave de adoración así como David la usó!

Después de toda esta investigación, me bendice que Dios me haya permitido compartir el patrón contigo. Ciertamente mi búsqueda no ha sido en vano. Creo que este libro profundizará tu experiencia de adoración, cambiará tu vida, y hará que Dios se complazca en Su más grande creación – ¡Tú!

La Adoración Que Toca El Corazón De Dios

Подняться наверх