Читать книгу El contrato de cash pooling en los grupos de sociedades. Aspectos contractuales, societarios y concursales - Silvia Valdés Pons - Страница 22

Hasta el momento, hemos señalado, por una parte, que la progresividad que opera en la cuenta centralizadora impide su calificación como una cuenta corriente mercantil. Por otra parte, también hemos indicado que pese al carácter inmediatamente líquido y exigible que tienen los barridos de tesorería en nuestro supuesto de hecho, la doctrina mayoritaria ha considerado que la entrega de saldo supone una puesta a disposición de recursos financieros y desde este punto de vista, al contrato de cash pooling le es necesariamente inherente el elemento préstamo.

Dicho esto, creemos que es interesante destacar la solución a la que ha llegado un autor, que ha calificado el mecanismo jurídico del cash pooling como un «contrato de préstamos recíprocos con pacto de cuenta corriente»58. En voz del mismo autor, pero en un trabajo distinto, «no existen contratos de cuenta corriente sino contratos en cuenta corriente», lo que significa que cualquier relación jurídica que produzca remesas recíprocas de dinero puede incorporar en su contenido un pacto de cuenta corriente, entendiéndose por éste, un acuerdo que permita a las partes la liquidación por compensación de sus saldos recíprocos en las condiciones que se decidan59. Si esto es así, ciertamente, las partes, dentro de los límites que fija la libertad contractual, podrían añadir al contrato de préstamo un pacto de cuenta corriente que acordase la liquidación por compensación progresiva o automática de los saldos reunidos en la cuenta centralizadora; estaríamos, en definitiva, ante una compensación de tipo convencional60. Nos parece ésta una solución acertada. Efectivamente, el contrato de préstamos recíprocos con pacto de cuenta corriente no solo define la naturaleza crediticia de los flujos de liquidez realizados entre las partes, sino que también diseña el instrumento o el mecanismo por el que proceder a la liquidación por compensación de los créditos y deudas existentes entre las mismas. Pese a ello, ha de tenerse en cuenta que este mecanismo jurídico no es suficiente para calificar de forma global la naturaleza jurídica del contrato de cash pooling, que además de llevar inherente una causa financiera y otra causa fundada en la simplificación de las relaciones jurídicas entre las partes, persigue un propósito más complejo que como ya hemos repetido en numerosas ocasiones, se concreta en la optimización de la tesorería del grupo.