Читать книгу ¿Es estrés o tu tiroides? - Virginia Busnelli - Страница 23

Como comentamos muy sucintamente, la glándula tiroides es uno de los órganos endocrinos más grandes e importantes del organismo y, tal vez, al que menos atención le prestamos. Podemos pensarla como un reloj cuyas piezas deben funcionar en el horario exacto. Cuando la tiroides está correctamente en hora, sentimos ganas de vivir y energía necesaria para transitar una vida plena; pero cuando se atrasa, la vida se enlentece, todo cuesta el doble.

Por el contrario, cuando las agujas del reloj de la tiroides se adelantan, vivimos rapidísimo como en una carrera imposible de detener. De ahí la importancia de saber sobre esta bendita glándula y la necesidad de encontrar un buen relojero que tenga experiencia en inspeccionar, reponer o restaurarla para ponerla en hora, y llevar una vida normal.

Además de sus características tan determinantes para nuestra vida, otra de sus particularidades es la forma y ubicación en nuestro cuerpo: parece una mariposa posada en el cuello, tanto de los hombres como de las mujeres a la altura de la conocida “nuez de Adán”, por delante de la tráquea y formada por dos lóbulos unidos en el centro por una delgada banda de tejido que se llama istmo. Pesa alrededor de 20 gramos y cada uno de los lóbulos mide 4 x 2 x 2 cm en una persona adulta. Por delante, los músculos del cuello la protegen de que pueda sufrir alguna lesión.

Su localización importa ya que, si por algún motivo crece, puede presionar la región y generar localmente complicaciones para tragar, para respirar o para hablar. Por este motivo, resulta indispensable que el médico se coloque detrás para palpar la glándula, con tan solo tocarla podemos imaginarnos qué puede estar ocurriéndole al paciente.