Читать книгу Los fantasmas de Armero, o el quinto elemento: crónicas desde el cuerpo - Adriana Leonor López Vela - Страница 12
Armero es un mapa trazado por voces que flotan sobre el valle
ОглавлениеHay, finalmente, en este trabajo sobre los fantasmas de Armero, una cartografía de un territorio que se dibuja a partir de unas voces, entre ellas, la propia; un caleidoscopio de historias que, juntas, trazan una sola historia: la de una Armero que se ha ido reconstruyendo a partir de la memoria de los armeritas sobrevivientes, de sus afectos, pero también desde los encuentros y desencuentros de originarios y descendientes, de herederos que somos todos, armeritas y no armeritas, que peregrinamos año tras año a un espacio que se va haciendo de nuevo.
Hay, también, relatos desde distintas narrativas que surgieron inicialmente como un ejercicio periodístico que con los años se tornó estético; un hallazgo la comprobación de que toda actividad que se emprende desde la estrechez del periodismo llega a ser una experiencia estética siempre que se permita la participación del cuerpo; un cuerpo expuesto vale tanto como el dominio de una técnica: ¿qué cuerpo? El cuerpo de los protagonistas de las historias, el cuerpo de quien registra y el cuerpo del potencial receptor. Si se cumple esa transmisión se podrá pensar en un género expandido: más allá del género, más allá del texto. En tanto un ejercicio de estesis, hay un registro distinto que pudo ser texto, a veces narrativo, a veces solo descriptivo, otras, poético; pero, también, fue visual; y otras, en otros momentos, solo de escucha.
En ese coro de voces, tiene particular potencia el registro de los testimonios. Aquí no hallarán más que una muy pequeña muestra, apenas una puerta desde donde se convoca a seguir recogiendo un sinfín de historias que se siguen escribiendo, que están por escribirse, por narrarse y que todas las voces se reúnan en un solo espacio real o heterotópico, no importa, lo que importa es la perennidad de esa memoria colectiva de lo que fue Armero. El reto: menos estudios académicos, más testimonios.
El orden en que se presenta obedece al azar: no hay un trazo obligado, salvo los tres primeros títulos que le permitirán acceder a este territorio a manera de marco o contexto si lo prefiere; tampoco es condición. Cada título se presenta como una ventana desde donde podrá observar una Armero diferente cada vez: sus gentes, sus historias que hablarán de la vida y de la muerte; de los amores y desamores, de la fe y el descreimiento; de la tristeza y de la risa también; en fin. La estructura, entonces, puede leerse como ese rizoma deleuziano, si quiere verlo así, o si quiere, siga el orden en que se dejó solo porque sí, porque algún orden debía tener. Si quiere, repase el material al revés, o vaya solo a las imágenes, o cuestione o dude de los videos y de los audios. Al final, la intención final es que quiera ir usted mismo a explorar el territorio de Armero y descubrir por sí mismo los fantasmas propios, y desde ellos, los otros: el mundo de los otros. Quizá los vea. Pero recuerde que, como dice Guillermo del Toro a través de la voz de Aurora (ya sabrá cuál Aurora), para ver fantasmas se necesita primero creer para ver y no la positivista mirada de ver para creer. Si esta es su mirada, nunca los verá.