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La libertad

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Con dientes y maña

Se defiende

Nunca se ataca.


Un ejemplo

Una hazaña

Se contempla

Se ama.


Llena de virtudes

Y sacrificio

De gente valiente

Y sus principios.


No es aquel

El que domina la marea

Ni el que te lleva

De la correa.


Fueron varios

Que juntos

Se despertaron.


Un grito

Mil pisadas

Un cantico

Una marcha.


No de ignorantes

De infieles

Es mi pueblo

Mi gente.


Cuando se oye el grito

Nace el suspiro

En un cuarto

Todo es distinto.


Porque no me importa

Que será de tu vida

Y el cómo haces

Tu política.


Yo la acepto

Y tengo dudas

Pero las respeto

Con mi cordura.


Pero hay veces

Donde surge el odio

Ese discurso

Tan asqueroso.


Donde apuntan el dedo

Donde se sacan los mocos

Te doy un pañuelo

La culpa es de otro.


Mira la gente

Analiza sus rostros

Comprende su mundo

Existen muchos.


Porque no hay diferencia

Dos brazos

Y dos piernas.


Dos ojos

Dos orejas

Una mente

Y su belleza.


Explícame

Las diferencias

Que desde el grito

Llega ella.


Una dama

Que te da la bienvenida

Te recibe a este mundo

Con una sonrisa.


Es tu culpa

No del pensamiento

Sino el cómo haces

Para no ver aquello.


Varias ideas

Tantos partidos

Pero solo te importa

El efectivo.


El capital invertido

En un banco extranjero

Tus miedos se ocultan

Detrás de un pueblo.


Y no es un llanto

Ni una reverencia

Cuando el tiempo lo pida

Llegará la decencia.


Es la gente

La que flamea la bandera

La que mueve un mundo

La que sana el planeta.


Y no me vengan

Con tristes ideas

De un político

Y sus blasfemias.


Soy argentino

Nací en la tierra

Tengo mi mente

Y mis cadenas.


Pero hoy

Decidi romperlas

Ver el mundo

Y su simpleza.


Que no hay vida

En una cueva

Donde uno gobierna

Y el otro sueña.


Nunca culpes

A las personas

Ellos votaron

Llenaron tu copa.


No es por ti

Ni por la historia

Ni por tus logros

Ni tú deshonra.


Es por la gente

Que aún espera

Muchos viven

En la miseria.


Algún día

Entenderás la nueva

No es el político

Quien gobierna.


Es el poder

Que el pueblo entrega

Y algún día

Llegará la cuenta.

El laberinto de la vida

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