Читать книгу 1000 ejercicios de preparación física. (2 Vol.) - Alfonso Blanco Nespereira - Страница 10
ОглавлениеCAPÍTULO 4
LA PREPARACIÓN FÍSICA EN EL PROCESO DEL ENTRENAMIENTO A LARGO PLAZO
En una planificación del entrenamiento a largo plazo, todos sus componentes (preparaciones física, técnica y táctica) se desarrollarán con unas características determinadas en base a una serie de fases o etapas. Grosser et al. (1989) coincide con Meinel y Schnabel (1988) al señalar los objetivos y contenidos que debe perseguir la preparación física en cada una de estas etapas.
ENTRENAMIENTO DE LOS FUNDAMENTOS (NIVEL DE BASE, INICIACIÓN O PRINCIPIANTES)
Comenzaría a partir de la edad de los 5-8 años, dependiendo de la especialidad deportiva; para los que comenzarán más tarde abarcaría una duración mínima de 2-3 años.
En esta fase, la condición física, la técnica y la táctica buscan una formación general y polivalente del organismo.
Fundamentalmente se debe incidir en la fuerza general, la velocidad de reacción, la resistencia aeróbica básica, la flexibilidad y la agilidad.
Característica de esta fase es la elaboración de los elementos técnicos básicos y fundamentales de cada deporte practicado.
Los contenidos de la preparación física general en el entrenamiento (80%) deben prevalecer sobre los de tipo específico (20%) del futuro deporte donde se especializará el joven deportista.
ENTRENAMIENTO FORMATIVO (NIVEL DE FORMACIÓN O AVANZADOS)
Para una edad cronológica de 9 a 12/13 años y con una duración en caso de comienzo retrasado de 2-4 años.
En esta etapa, lo más importante es la elaboración de la técnica, al ser precisamente las edades o el momento más favorable para la realización de nuevos aprendizajes.
Con respecto a la preparación física, se debería incidir en la velocidad gestual, la fuerza rápida, la resistencia aeróbica y la flexibilidad, aparte de seguir entrenando los fundamentos de la educación física.
En cuanto a la preparación táctica, ésta depende mucho del dominio técnico que posea el deportista en el deporte practicado.
El porcentaje de tiempo dedicado a ambos tipos de preparación física se encuentra bastante equilibrado (entrenamiento general: 60-50%; específico: 40-50%).
ENTRENAMIENTO DE RENDIMIENTO (NIVEL DE ESPECIALIZACIÓN)
Abarca desde los 13 a los 16 años, según el deporte practicado y con una duración de 2-3 años en los sujetos que llevan un retraso en su preparación plurianual.
En esta etapa, el entrenamiento de la técnica y de la preparación física específica presentan idénticos valores en cuanto al volumen y al tiempo que ocupan. Sin embargo, en los deportes donde predomina la fuerza o la resistencia, la condición física debe prevalecer ligeramente con respecto a la técnica.
Se debe acentuar el entrenamiento táctico, dado que depende de la condición física y técnica.
La fuerza máxima, la fuerza resistencia específica y la resistencia anaeróbica láctica serían los principales aspectos a incidir dentro de la preparación física.
El trabajo de los contenidos de preparación física específica (70-80% del tiempo) predomina sobre los de tipo general (30-20%).
ENTRENAMIENTO DE ALTO RENDIMIENTO
A partir de los 16-18 años, en función del deporte practicado, después de no menos de 6-9 años de preparación previa.
Según la especialidad deportiva, predomina la técnica (ejemplo; gimnasia artística) o bien la condición física (ejemplo, esquí nórdico).
Con respecto a la táctica, puede existir un predominio de ésta según el tipo de deporte, pues la condición física y el dominio técnico poseen un alto nivel de desarrollo.
La preparación física específica abarca la mayoría del tiempo dedicado a los contenidos del entrenamiento (90%); solamente un 10% lo ocupa el trabajo de tipo genérico.
LA PREPARACIÓN FÍSICA EN LOS NIÑOS
Como en cualquier otra área de la educación del ser humano, en la actividad físico-deportiva es necesario adquirir primero los fundamentos básicos, para obtener un desarrollo posterior mediante un proceso de especialización. Por ello, en los primeros años de un plan de entrenamiento a largo plazo, es preciso realizar una fase preparatoria. Ozolin (1983) indica que los contenidos del entrenamiento en esta etapa ha de ser principalmente de carácter multilateral. Su propósito es construir y desarrollar las premisas físicas (a nivel morfológico y funcional), técnicas, tácticas y psicológicas necesarias para la siguiente fase de especialización.
Las principales tareas que se han de realizar en relación con la preparación física son;
1. Desarrollar un nivel de preparación física general.
2. Utilizar una amplia variedad de ejercicios físicos (multilaterali-dad). La posibilidad de obtener altos resultados deportivos está ligada a etapas previas donde el deportista es expuesto a un desarrollo plural a nivel morfológico y funcional, por medio de un entrenamiento sistemático; donde además del deporte elegido, se realizan aprendizajes y trabajo físico de otros deportes.
3. Emplear ejercicios de aplicación para el deporte elegido. Éstos representan el conjunto de ejercicios que interesan los grupos musculares utilizados en los gestos específicos de la competición, sin necesidad de reclamar para ello los movimientos específicos de la disciplina (Andolfi & Parigiani, 1989). Se les denomina también ejercicios de autocargas orientados y se corresponden con el nivel de preparación dirigida de la fuerza propuesto por Wazny (1975).
Harre (1977) señala las principales características que debería tener el entrenamiento de los niños dentro de los diferentes aspectos del proceso integral de la preparación:
• Objetivo
Su objetivo principal es crear las bases para desarrollar posteriormente la capacidad de rendimiento deportivo a los niveles más elevados.
• Dinámica de la carga
Los aspectos fundamentales del entrenamiento están orientados cara un rápido incremento del volumen de las cargas.
• Contenidos de la preparación física
Las capacidades condicionales se desarrollan fundamentalmente utilizando medios generales.
• Preparación técnica
Se adquieren y consolidan las habilidades técnicas básicas y una amplia base motora.
• Preparación táctica
Se aprenden los fundamentos de la táctica y se adquiere experiencia en las competiciones.
Tschiene (1984) concreta todavía más las necesidades específicas, en función del tipo de deporte practicado (individual, colectivo o de combate), y también en referencia a una serie de aspectos a considerar dentro del proceso de entrenamiento.
A. Deportes individuales
• Importancia de la competición
En los niños es empleada ampliamente, junto a contenidos multilaterales, como un método de entrenamiento más.
En los jóvenes inicia su rol como factor de control del trabajo y del incremento del resultado, aumentando las limitaciones de su empleo y de sus contenidos.
• Planificación del entrenamiento
No es muy necesaria y está poco estructurada, con excepción de algunos deportes donde se logran altos resultados con edades tempranas.
En los jóvenes se inicia la división de la temporada en ciclos con carácter estándar.
• Proporción de los contenidos del entrenamiento
Predominio de la preparación general (50-70% del tiempo) dedicando el restante (50-30%) a la preparación especial (aprendizaje de las técnicas básicas de otros deportes).
En los jóvenes disminuye al 50-30% el trabajo general, retrasando al máximo una especialización limitada; se dedica el restante 50-70% del tiempo a la preparación especial, tanto técnica como física.
• Variación en el trabajo
Predomina el trabajo multilateral, al que se dedicará al menos el 30% del tiempo disponible de la preparación.
La multilateralidad disminuye en los adolescentes, al aumentar la especialización, pero empleando competiciones en diversas pruebas del deporte elegido.
• Parámetros dominantes del trabajo
Aumento progresivo y continuo de la carga en base al volumen, sin aumentar la intensidad.
Posteriormente en los adolescentes, aumentan carga e intensidad como consecuencia de la maduración y especialización logradas; siendo ya posible una adaptación funcional completa.
• Especificaciones de la edad y sexo
Es preciso tener en consideración las fases sensibles del desarrollo de las funciones y sistemas del organismo.
Con los adolescentes aparecen las diferencias entre ambos sexos. El desarrollo más precoz de las chicas hace preciso diferenciar el trabajo a realizar e iniciar antes la especialización.
• Medidas de recuperación
No son necesarias en los niños. En los jóvenes, la estructura cíclica del entrenamiento, con días-semanas de baja carga o recuperación, es suficiente.
B. Deportes colectivos y de combate
• Importancia de las competiciones
Para los niños constituyen, cuanto más tiempo mejor, solamente un método de entrenamiento. Las competiciones oficiales deben ser escasas. Para los adolescentes aumenta su importancia para transferir a nivel real las situaciones y ejercicios realizados en los entrenamientos.
• Planificación del entrenamiento
Para los deportes de combate vale lo señalado en los deportes individuales. En los deportes colectivos es más difícil realizar una verdadera y propia planificación, al ser sus períodos de competición más largos; se debe tender a la división del trabajo en ciclos según la clasificación del equipo y el período de la temporada competitiva.
• Proporción de los contenidos
La importancia de las competiciones y de las situaciones de juego atribuye una gran relevancia a la táctica individual y colectiva. La preparación física o multilateral disminuye a favor de la preparación técnico-táctica.
• Multilateralidad de la preparación
En estos tipos de deportes se da, preferentemente, una gran variedad de ejercicios, situaciones y de posibilidad de combinaciones. Por ello, la proporción de trabajo multilateral será como máximo del 15-20% del tiempo disponible en los niños y adolescentes.
• Parámetros dominantes del trabajo
Como en los deportes individuales.
