Читать книгу El pequeño doctor - Alfred Vogel - Страница 183
Dieta de arroz contra la hipertensión arterial
ОглавлениеDesde hace tiempo es bastante usual en América seguir una dieta de arroz para combatir la hipertensión sanguínea. Ahora, un sanatorio suizo ha adoptado este método de la dieta de arroz con la misma finalidad y con el feliz resultado de que realmente hace disminuir la tensión arterial, pero con el inconveniente añadido de que produce un cierto grado de anemia en los pacientes. ¿Cuál podría ser la causa de este fiasco? Pues sencillamente hay que atribuirlo a la poca vista de utilizar arroz blanco, ya que no resulta adecuado para hacer una dieta de este tipo. Al haber quitado su cubierta (pulido), que le confiere la cualidad integral, resulta un arroz devaluado desde el punto de vista dietético, ya que puede dar lugar a un estado deficitario, como es el conocido caso de la enfermedad carencial del beriberi. Si se desea hacer una dieta solo a base de arroz, este debe ser totalmente natural, es decir, integral. Solo así podremos aprovechar todo su valor y podremos hacer disminuir la presión sin ocasionar ningún perjuicio. Es importante también en el día a día que el arroz que comamos sea integral; su consumo resulta ventajoso frente al arroz blanco, ya que el integral contiene 9,5 veces más minerales (sales nutritivas), lo que le confiere un elevado valor alimentario. En el proceso de refinado, que convierte el arroz natural integral en arroz blanco, no solo se pierde la cubierta externa de celulosa, sino también, lamentablemente, la valiosa, sabrosa y fina cubierta plateada y el germen que contiene el grano de arroz. Con ello se consigue que el arroz adquiera un bonito aspecto blanquecino, pero resta con un valor dietético-nutritivo reducido. Es un secreto a voces que la parte del grano de arroz que se quita no se echa a la basura, sino que es aprovechada por la industria farmacéutica en la elaboración de remedios reconstituyentes o reforzadores. Así funcionan las cosas entre bastidores, pero es bueno levantar un poco el telón para ver lo que realmente sucede y poder sacar conclusiones provechosas para la salud.