Читать книгу Juan Rulfo en el cine - José Carlos González Boixo - Страница 28

E S C E N A: 17 (REAL)

EXTERIOR-INTERIOR. PATIO MEDIA LUNA. (DÍA)

1 MEDIUM LONG SHOT DOLLY-IN: PEDROUn moño negro sobre el dintel bajo el fierro de la Media Luna. Ante la CÁMARA que AVANZA se abre el portón y aparece el rostro de PEDRO PÁRAMO, joven.PEDRO—Pasa, Fulgor Sedano.

2 FULL SHOT: FULGOR y PEDRO. CÁMARA SOBRE RUEDASEn el contracampo FULGOR, mirada ladina, bigotes de aguacero, traje campero, se pega con el chicote en el muslo, echa hacia atrás su sombrero enriscado y sin quitárselo, entra.FULGOR—Caray, Pedrito, si la última vez que te vi, eras un mocosito así de grande.PEDRO lo mira con sorna, cuando señala su estatura, y se dirige hacia una esquina del patio.

3 MEDIUM a CLOSE-UP: PEDRO y FULGOR (CRISS/CROSS)PEDRO se ha sentado en su equipal, sombreado por las arcadas del patio y señala a FULGOR una silla, donde el sol cae a plomo.PEDRO—Siéntate, Fulgor. Aquí hablaremos con más calma.FULGOR—Prefiero estar de pie, Pedro.PEDRO—Como tú quieras. Pero no se te olvide el “don”.FULGOR respinga y permanece de pie, doblando su chicote.PEDRO (continúa)—¿Y cómo andan las tierras?FULGOR—Mal. No queda nada. Hemos vendido el último ganado, “don Pedro”... Aunque llevando yo tantos años de administrador sé lo que hay que hacer.PEDRO, mirando a lo lejos, pregunta con toda naturalidad:PEDRO—¿Y los San Juan? ¿No han regresado a este pueblo?FULGOR—Qué va. Deben andar en las minas. Pero usté no se ande preocupando de los ausentes, sino de los presentes. Aquí le debemos a todo el mundo: los Arias, las Preciado, los Guzmanes...Desde la sombra el rostro y la mirada rígidos de PEDRO PÁRAMO llenos de fuerza, no se apartan ni un momento de FULGOR y lo van obligando a quitarse el sombrero y bajar la cabeza.PEDRO—¿Por qué?FULGOR—Pues no hay de dónde sacar para pagar. Su familia pedía y pedía sin devolver nada, y a la larga acabaron con todo. Pero en cambio hay quien se interese por comprar los terrenos que quedan. Aunque eso sí, a precio algo mermado.PEDRO—¿No serás tú el interesado?FULGOR, alarmado, comienza a sacar papeles, pero PEDRO lo ataja, levantándose.FULGOR—¡Cómo se pone a creer que yo!PEDRO—Yo creo hasta el bendito... Luego arreglaremos nuestros asuntos.

4 MEDIUM FULL SHOT: PEDRO y FULGOR. CÁMARA SOBRE RUEDASPEDRO se levanta del equipal y FULGOR lo sigue bajo las arcadas.PEDRO (continúa)—Entiendo que a doña Doloritas Preciado le debemos más que a nadie... ¿Qué posesiones tiene esta doña Doloritas?FULGORUsted sabe: el Rancho de Enmedio.PEDRO—Mañana vas a pedir la mano de la Lola.FULGOR se detiene, estupefacto y la CÁMARA también.FULGOR—Pero cómo quiere usted que me quiera, si ya estoy viejo, y, pues mire mi pinta.PEDRO—La pedirás para mí. Le dirás que estoy muy enamorado de ella. De pasada, dile al Padre Rentería que nos arregle el trato.La CÁMARA SE ACERCA a FULGOR subrayando su comentario.FULGOR—Palabra que me está gustando tratar con usted, don Pedro.CÁMARA y personajes continúan su movimiento hasta llegar al portón, donde nuevamente se detienen hasta que, después de iniciar el cierre de la puerta PEDRO lanza la última frase al administrador que va calle arriba, chicoteándose las piernas.PEDRO—Por lo pronto arregla lo de la Doloritas. Es importante... De cierto, Sedano, la quiero. Por sus ojos, ¿sabes?... ¡Ah, y pídele de una vez un préstamo!