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Ten esto en cuenta… siempre

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Museo de Antioquia.

Óleo

Una metáfora desde la astrofísica: si digo diseño, digo universo, galaxia, sistemas solares, nebulosas, supernovas. Si digo creatividad, digo energía, ya sea en forma de electrones, protones y neutrones, de energía o materia oscura, de fuerza de gravedad, de electromagnetismo y, por supuesto, de mecánica cuántica.

J.D.R.

Las etapas del proceso creativo que los humanos solemos vivir pueden expresarse en los siguientes términos:

1. Tener una cierta sensibilidad a las situaciones, problemas u oportunidades, como punto de partida, como fuente de inspiración.

2. Mantener en el pensamiento la inquietud acerca del punto anterior, tener persistencia y curiosidad acerca del tema, para potenciar la concepción hacia un propósito, investigando y adquiriendo datos e información relevante.

3. Nutrida la mente por la experiencia teórica y práctica, es clave hacer una pausa para pensar y meditar tranquila y naturalmente. Dejar fluir los estados de atención y de observación, hacer las intersecciones en temas diversos, tener cuidado que los “insights” puedan emerger sin presión y que el inconsciente abra sus canales emocionales, de información y conocimientos. Acá es donde suelen utilizarse técnicas de relaciones, de asociaciones de ideas, espontáneas o forzadas, para estimular el pensamiento creativo.

4. Se alcanza la generación y proliferación de ideas, la inspiración y generación de nuevas alternativas.

5. Y, finalmente, para probar la idea, es conveniente hacer un plan de trabajo, de recursos disponibles y de componentes, desarrollando a la vez los dibujos, los modelos o prototipos, para considerar ajustes y cambios. Se deben realizar todas las modificaciones necesarias para llevar la idea al contexto real a niveles de evaluación, prueba y verificación.

La evaluación del Diseño Creativo no suele ser una tarea fácil. Por un lado, nos enfrentamos a dos situaciones: evaluamos al creativo o a lo creado. Y por otro, a la habilidad humana que vive dinámicamente o al objeto estático. Yo creo que ambos deben estar en juego.

Se han planteado algunos criterios que contribuyen a someter una idea a valoración y, entre muchos más, están los siguientes:

Originalidad. Generar ideas novedosas y diferentes a las ya existentes, respecto a cualquier situación.

Iniciativa. Emprender tareas, proyectos o actividades, promover nuevas ideas y desarrollar logros concretos por autogestión.

Fluidez. Capacidad para producir ideas en la mayor cantidad y calidad posibles.

Divergencia. Analizar lo opuesto, relacionar lo inusual, visualizar lo diferente.

Flexibilidad. Capacidad de modificar y variar elementos entre diferentes sistemas.

Sensibilidad. Habilidad para percibir y expresar las ideas de una manera nueva y diferente.

Elaboración. Capacidad de representar, concretar, formalizar y ejecutar las ideas.

Autoestima. La valoración de sí mismo, la confianza, conocer las fortalezas y debilidades.

Motivación. Deseo emocional e intelectual orientado hacia el logro de resultados.

Independencia. Capacidad de autoaprendizaje y gestión, sin mediación de otros.

Pensar técnico. Resolver situaciones problemáticas a través del uso de dispositivos tecnológicos.

Innovación. Usar óptimamente los recursos y conocimientos, aplicando una nueva idea en una solución universal.

Invención. Es la capacidad de resolución eficaz, en concordancia con la disposición de recursos.

Racionalización. Es la solución correcta lograda sistemáticamente.

Proyecto: aplicar estos factores para evaluar las ideas, los conceptos, los proyectos o los productos y servicios que se generen, con el fin no tanto de obtener una matriz absoluta, sino más bien para tener un marco general de valoración de nuestros diseños creativos.

Diseño creativo: manual de ideas

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