Читать книгу Debates presidenciales televisados en el Perú (1990-2011) - Lilian Kanashiro - Страница 11
En campaña electoral
ОглавлениеLa práctica que convoca este estudio no es un debate en el sentido general del término. El adjetivo electoral entra en escena. Un debate electoral requiere como segunda condición mínima desarrollarse en el contexto de una campaña electoral. Esto significa que en la vida social existen infinidad de debates, pero no necesariamente son debates electorales. Se puede citar como ejemplo el debate sobre la reforma universitaria o el debate sobre la eutanasia; ambos se dan fuera del contexto electoral, aunque eventualmente podrían ser considerados dentro de los temas de un debate electoral. Son debates, mas no electorales. Ahora bien, siempre existen puntos ciegos o excepciones: si en la comunidad política se está discutiendo una reforma del sistema electoral, a ello podría llamarse debate electoral, pero en un sentido diferente.
El hecho de que un debate electoral deba estar inserto en una campaña electoral trae ciertos conflictos: ¿cuándo empieza la campaña electoral? En el caso peruano, el proceso electoral se inicia oficialmente con la convocatoria a elecciones por parte del presidente de la República con una anticipación de 120 a 150 días (Ley Orgánica de Elecciones, 1997). No obstante, las campañas electorales impulsadas por los partidos políticos en competencia empiezan con mucha más antelación que el proceso electoral. Otros podrían postular que las campañas tienen como punto de partida la publicación de los primeros sondeos con casi un año de anticipación. ¿O las campañas electorales comienzan con las primarias o la puesta en ejecución de los mecanismos de selección y nominación de candidatos al interior de los partidos? Incluso algunos investigadores sostienen que la campaña electoral ya no responde a procesos con inicio y fin, sino que vivimos permanentemente en una campaña electoral.
En el caso de lo que se ha denominado debates electorales, la institucionalización del acontecimiento permite eliminar las ambigüedades anteriormente citadas. Estos debates se efectúan no solo en el marco de las campañas electorales, sino en fechas muy cercanas a las elecciones. También cabe señalar que en la mayoría de las experiencias se realizan varios debates electorales, aunque uno adquiere mayor visibilidad.
Dicho esto, los debates electorales pueden clasificarse en nacionales y subnacionales, según el tipo de representación que se somete a elección. Los debates electorales nacionales son aquellos en los cuales los participantes compiten para ser representantes de nivel nacional: presidente, primer ministro (en sistemas parlamentaristas) y congresistas. Los debates electorales son subnacionales cuando se busca elegir representantes de nivel subnacional, como presidentes regionales, alcaldes provinciales y distritales. De vuelta al punto inicial, un segundo requisito mínimo para que un acontecimiento pueda ser calificado como debate electoral es que se desarrolle dentro del contexto de una campaña electoral.