Читать книгу Cubanos en México - Liliana Martínez Pérez - Страница 7
Introducción
ОглавлениеDesde los inicios de la Revolución cubana, específicamente a partir de 1961, el gobierno insular puso en marcha un conjunto de regulaciones y mecanismos limitadores de la libre movilidad de las personas fuera de las fronteras nacionales, tanto para viajes temporales como definitivos. Estas restricciones han marcado de manera significativa el proceso migratorio cubano por más de medio siglo: el perfil migratorio insular, las modalidades y condiciones de salida, los tiempos migratorios, así como las prácticas sociales de los cubanos para concretar el acto de migrar. Y aunque esta política se ha flexibilizado considerablemente en fechas recientes, persisten ciertas restricciones que los cubanos necesitan sortear para conseguir la salida al exterior o la migración, según el caso del que se trate, además de los controles inmigratorios de los países de destino.
En ese contexto, este capítulo analiza la política emigratoria cubana[1] y sus efectos en el proceso migratorio insular en la última década del siglo xx y la primera del xxi. Tomando en cuenta, desde un punto de vista conceptual, los aportes de las perspectivas neoinstitucionalistas[2] y algunas nociones relevantes de los estudios migratorios y de la teoría social, se examina el origen y evolución histórica de la política emigratoria, sus características en la etapa mencionada, así como sus efectos en el proceso migratorio cubano entre 1990 y 2013.
En específico, el análisis del origen y las características de la política migratoria se ha realizado a partir de la reconstrucción de los intereses e imperativos gubernamentales que la definieron, las soluciones que terminaron siendo aprobadas y el significado simbólico sobre la migración y el migrante que entrañó esta política. El estudio de los efectos de la política emigratoria, por su parte, se ha concentrado en el impacto que tiene en el patrón migratorio y en las prácticas sociales que suscita en los individuos que buscan concretar el acto de migrar. Se ha pretendido reconstruir así la lógica que impulsó a la autoridad estatal cubana a aprobar y sostener por más de cincuenta años un marco regulatorio con tales características, delinear sus rasgos más distintivos y adelantar algunas de sus consecuencias en el proceso migratorio insular.
Desde un punto de vista metodológico, la evolución institucional de la política migratoria cubana y sus características para el periodo 1990-2013 se realizó a partir del análisis de textos jurídicos y administrativos del gobierno de Cuba y de discursos de sus líderes políticos —especialmente de Fidel Castro— sobre dicho tema. Por otra parte, la indagación sobre el patrón migratorio y las prácticas sociales migratorias incluyó el estudio de fuentes estadísticas, la aplicación de entrevistas y la observación participante en el marco de una investigación de más largo aliento.[3]
El cuadro 1 presenta algunos rasgos sociodemográficos, socioeconómicos y migratorios de la población entrevistada.