Читать книгу La vida de los Maestros - Baird T. Spalding - Страница 5

Оглавление

II

Nuestra tercera expedición estuvo dedicada a la búsqueda metafísica. Salimos desde Potal, un lejano y pequeño pueblo hindú. Yo había escrito a Emilio que llegaríamos, pero sin informarle el objeto de nuestro viaje, ni tan siquiera el número de participantes. Para nuestra sorpresa, nos encontramos que Emilio y sus asociados habían preparado la estancia de la misión entera y conocían nuestros planes con todo detalle. Emilio nos había sido muy útil en la India meridional, pero los servicios que nos brindó a partir de ese momento superan a la narración. Todo el mérito de la expedición es suyo, como de esas almas maravillosas que encontramos en la ruta.

Llegamos a Potal, después del mediodía de 22 de diciembre de 1894. La partida de la expedición debía ser el día de Navidad por la mañana y este sería el día más inolvidable de todas nuestras vidas. No olvidaré jamás las palabras que Emilio nos dirigió aquella mañana. Se expresó correctamente en inglés, aun cuando no había tenido educación inglesa y nunca había dejado Extremo Oriente.

He aquí sus palabras: «Estamos en la mañana de Navidad. Este día os recuerda el nacimiento de Jesús de Nazaret, el Cristo. Vosotros debéis pensar que él fue enviado para redimir los pecados y que simboliza el Gran Mediador entre vosotros y vuestro Dios. Hacéis aparecer a Jesús como intercesor de un dios severo, algunas veces colérico, sentado en alguna parte de un lugar llamado cielo. Yo no sé donde se encuentra el cielo, sino es en vuestra propia conciencia. No os parece posible alcanzar a Dios más que por el intermedio de su hijo, menos austero y más amante, el Ser grande y noble que nosotros llamamos el Bendito y del cual este día conmemora su venida al mundo.

»Para nosotros este día significa mucho más. No recuerda solamente la venida al mundo de Jesús el Cristo, sino que simboliza el nacimiento del Cristo en cada conciencia humana. El día de Navidad significa el nacimiento del Gran Maestro y educador que ha liberado a la humanidad de las servidumbres y limitaciones materiales. Esta gran alma vino a la tierra para mostrarnos en su plenitud el camino hacia el verdadero Dios, omnipotente, omnipresente, omnisciente. Él nos hizo ver que Dios es todo bondad, toda la sabiduría, toda la verdad, todo en todo. El gran Maestro, del cual este día recuerda su aniversario, fue enviado para mostrarnos que Dios no mora solamente fuera sino adentro de nosotros, que no se separa nunca de nosotros ni de ninguna de sus creaciones, que es siempre justo y amante, que está en todo, sabe todo y es todo verdad. Si tuviera yo la inteligencia de todos los hombres juntos, no podría expresar más que débilmente todo el significado que tiene para nosotros este nacimiento.

»Estamos plenamente convencidos del rol de este gran Maestro y educador, y esperamos que vosotros compartáis nuestra convicción. Él ha venido a nosotros para hacernos comprender mejor la vida sobre la tierra. Nos ha mostrado que todas las limitaciones materiales vienen del hombre y que es necesario no interpretarlas nunca de otra manera. Ha venido a convencernos que su Cristo interior, por el cual él cumplía sus obras poderosas, es el mismo que vive en nosotros, en mí, y en todos los seres humanos. Aplicando su doctrina, podemos realizar las mismas obras que él y aún más grandes. Creemos que Jesús ha venido a mostrarnos, más claramente, que Dios es la gran y única causa de todas las cosas, que él es Todo.

»Quizá hayáis oído decir que Jesús recibió su primera educación entre nosotros. Puede ser que alguno de vosotros lo crea. Pero poco importa que haya salido de nosotros o que procediera de una revelación directa de Dios, fuente única de todas las cosas. Cuando un hombre ha tomado contacto con una idea del Pensamiento de Dios, y la ha expresado por la palabra, los otros ¿no pueden tomar de nuevo contacto con la misma idea en el Universal? Por el hecho de haber tomado una idea y de haberla expresado, no se convierte en propiedad privada. Si alguien toma una idea y la conserva ¿dónde encontrará lugar para recibir otra? Para recibir más, es necesario dar, lo que uno ha recibido si se lo guarda produce estancamiento. Tomemos por ejemplo una rueda que genera fuerza hidráulica y supongamos que de repente esta retenga el agua que la hacía moverse. Rápidamente se inmovilizará. Es necesario que el agua pase libremente a través de ella para ser útil y crear energía. Es lo mismo para el hombre. Al contacto de las ideas de Dios, es necesario que él las exprese para poderlas aprovechar. Él debe permitir a cada uno hacer otro tanto para crecer y desarrollarse como lo hace él mismo.

»Pienso que todo vino a Jesús como una revelación directa de Dios. En verdad, ¿no vienen todas las cosas de Dios, y lo que un ser humano ha podido hacer, no pueden hacerlo otros también? Vosotros os convenceréis de que Dios está siempre deseoso de revelarse y pronto a actuar como lo ha hecho a través de Jesús y de otros. Es suficiente que tengamos la voluntad de dejarlo actuar. Sinceramente creemos que hemos sido creados todos iguales. Todos los hombres no son más que uno. Cada uno es capaz de cumplir las mismas obras que Jesús y lo hará a su tiempo. Nada es misterioso en estas obras. El misterio no reside nada más que en la idea material que los hombres se hacen.

»Vosotros habéis venido más o menos escépticos. Tenemos realmente confianza en que os quedaréis con nosotros para vernos realmente tal y como somos. En cuanto a nuestras obras y sus resultados, os dejamos toda libertad para admitir o rechazar su autenticidad».

La vida de los Maestros

Подняться наверх