Читать книгу Psicología para terapeutas - Cecilia Gallinger - Страница 11
¿Por qué los conocimientos acerca de la Psicología son tan importantes para todo tipo de terapeutas?
ОглавлениеSi bien en sus comienzos, como muchas de las terapias que se practican en la actualidad, la Psicología era enormemente cuestionada y calificada de ‘pseudociencia’, ya en el año 1879 fue reconocida como ciencia por la comunidad científica, de la mano de Wilhelm Wundt y la creación del primer laboratorio de Psicología Experimental, pues en aquel momento para ser avalada, debía adaptarse al modelo de las ciencias exactas imperantes de aquella época. Desde aquel entonces, la Psicología ha experimentado un desarrollo exponencial y no ha dejado de evolucionar, expandirse y profundizar en sus conocimientos. Es por eso que una ciencia de casi 150 años de desarrollo científico ininterrumpido, sin dudas tiene informaciones valiosas para aportar, que merecen ser conocidas…
Aunque en ciertas ocasiones sea todavía común oír frases como “no creo en la Psicología”, sabemos que estos saberes no son cuestión de fe o de creencia, son ciencia. Esto significa que se acerca a la verdad, no a la verdad absoluta pero sí a una verdad consensuada, porque ha seguido y sigue el método científico, es decir, formula hipótesis, las valida, mide las variables, somete sus estudios a reproducibilidad y refutabilidad, diseña experimentos que corroboran o niegan la hipótesis que se pone a prueba, y cualquier investigador puede reproducirlas y/o someterlas a evaluación. Estas pruebas han sido ampliamente superadas por la Psicología, pero aún no por otras terapias; esto no significa que no se acerquen a la verdad o no sean efectivas, sino que aún no han sido sometidas a las pruebas científicas que se requieren para su validación o refutación.
En la presente capacitación uno de los objetivos es compartir esta metodología adaptada al abordaje terapéutico; que estos conocimientos no queden restringidos a los psicólogos, sino que sean compartidos a los demás terapeutas, y así ayudar al avance en la construcción del conocimiento y potenciar el trabajo terapéutico.
En este sentido, de la misma manera que la Filosofía es considerada, para muchos, la madre de todas las ciencias –entre ellas, la Psicología– y la Medicina la ciencia madre de aquellas que trabajan con el aspecto somático del ser humano, la Psicología puede considerarse la ciencia madre de aquellas prácticas terapéuticas que trabajan, directa o indirectamente, con los aspectos emocionales, cognitivos, comportamentales y relacionales del ser humano. En este sentido, sus fundamentos, investigaciones, aportes y saberes establecen el soporte, la base, el punto de partida y la plataforma donde sustentar y llevar a cabo procesos terapéuticos generadores de verdadera transformación.
Todo esto será explicado en las siguientes páginas, donde el lector-terapeuta encontrará una síntesis estructurada de conocimientos, tanto de pensadores que han revolucionado y evolucionado los saberes psi, (que a su vez servirán de referencia para quien desee ahondar en ellos), como de aportes propios, desde un punto de vista integrador, surgidos de mi experiencia como psicóloga clínica, coordinadora de equipo terapéutico multidisciplinar, consultante de diversas terapias y estudiante autodidacta en permanente capacitación y evolución.
Es así que los contenidos de Psicología para Terapeutas fueron estructurados en cuatro capítulos:
Capítulo 1: Haremos un recorrido por nociones básicas acerca del proceso terapéutico, la importancia de la relación terapeuta-consultante y del establecimiento de una alianza terapéutica positiva.
Capítulo 2: Aprenderemos quién es nuestro sujeto de estudio: el consultante. Abordaremos qué tipo de situaciones y características se suelen presentar a las consultas y una breve referencia a las clasificaciones psicopatológicas más comunes que pueden presentar, para poder establecer un perfil psicológico, que nos sirva no para encasillar o catalogar, sino para orientar nuestro trabajo, nuestro abordaje terapéutico.
Capítulo 3: Descubriremos o redescubriremos un método efectivo para llevar a cabo cualquier práctica terapéutica, del principio al fin, contextualizándola, atendiendo al proceso sin perder el foco de atención en los resultados. Esta metodología de abordaje, efectiva para todos los tipos de terapias, consta de 9 etapas; es un “paso a paso” que sirve y que funciona, independientemente de las técnicas que utilicen (éstas son una parte del proceso total). Su utilidad comprobada se inspira en el modelo que ha hecho avanzar el conocimiento científico, adaptándolo al ámbito terapéutico.
Capítulo 4: Estudiaremos al terapeuta como herramienta. Este capítulo, el de mayor extensión, tiene como objetivo principal promover la autorreflexión acerca del propio actuar terapéutico, incitando a preguntarnos, entre otras cosas: ¿cómo soy como terapeuta y cómo me perciben mis consultantes? ¿qué habilidades terapéuticas tengo y cuáles necesito desarrollar para mejorar mi calidad de atención? ¿qué tipo de terapeuta deseo ser? ¿cómo proceder para potenciar al máximo mis posibilidades de ayudar a los consultantes? ¿en qué ocasiones debo reconocer la necesidad de derivar a otro profesional? ¿cómo hago para no ser ‘uno más’ y transitar el camino hacia la excelencia? ¿qué debo hacer para convertirme en un verdadero instrumento de cambio? Siendo autoconscientes acerca de cómo somos y proyectándonos como queremos ser, podremos trazar un camino, un proceso propio, siguiendo los lineamientos propuestos, que nos lleve a desarrollar al máximo nuestro potencial como terapeutas, aumentando así nuestra eficacia y generando óptimos resultados.