Читать книгу Amor, puertas adentro - Claudio Aguirre - Страница 18
ОглавлениеUn STOP y piensa
¿Hubo algo nuevo desde que comenzaste a leer hasta ahora?
No importa lo que sea, una sensación, un pensamiento, una idea, una emoción, un sentimiento, una interpretación, un recuerdo que tenías olvidado, experiencias nuevas o alguna que no querías recordar, palabras o cosas que has escuchado y no te agradaron, gestos, imágenes agradables o desagradables.
ü ¿De qué te has dado cuenta?
ü ¿Qué te ha sorprendido?
ü ¿Qué sensaciones nuevas has registrado en tu cuerpo?
ü ¿Qué es lo que hoy sientes claramente que te incomoda y que quieres cambiar?
ü ¿Qué no quieres más para tu vida?
Lo que sea anótalo. Pues algo te habrá pasado hasta este momento, y si dices que no te ha pasado nada, bueno, entonces escríbelo: “Hasta ahora no me ha pasado nada”.
Y estará todo más que bien.
Con el tiempo podrás registrar con claridad todos los estados que atraviesas y los podrás observar y modificar si así lo deseas.
Como esto de…
• tener un ego que te gobierna
• que elige por ti
• y emociones y personajes que tironean y hay domesticar
• una mente muy racional y estructurada que no quiere cambios
• una mente turbulenta que te distrae y te desenfoca de tu trabajo
El trabajo de autoconocimiento le permitirá a tu conciencia convertirse en dueña de tu mente. Recuerda que la mente no tiene autonomía, sin conciencia responde a los viejos hábitos y a sus emociones. O de lo contrario, responde a tu conciencia, que sí sabe lo que tiene que hacer si te observas, registras, sientes, presientes, intuyes.
Pero todo paso a paso.
Todo esto lo irás reconociendo, comprendiendo y diferenciando con el tiempo. Pues somos un cuerpo emocional, físico, mental, sensible y espiritual. Que cuando desarmoniza colapsa, se enferma, sufre y reacciona.
El trabajo es aprender a reconocer esos estados de ánimo y a no permitir que ninguno nos domine todo el tiempo, corriendo el riesgo de quedar identificados con esa emoción que lo contiene.
El ser un observador consciente te ayudará a estar presente y a modificar lo que no te sirve a cada momento, si así lo eliges, antes de quedar atrapada en emociones de tristeza, odio o dolor. Pues recuerda que estar consciente es saber que puedes estarlo y paso siguiente elegir estarlo.
Es lo que llamaríamos “ser proactivo”, como si te dieras cuenta de que algo va a sucederte y te debes preparar para ello. Por eso también hablamos de registrarnos, sentir qué es lo que mi cuerpo me cuenta. Un ejemplo corriente es cuando comemos y nos dan una mala noticia. Sentimos enseguida en la boca del estómago una sensación de dolor, pesadez, luego un cansancio que nos saca de nuestro foco. Y cuando aprendemos a registrarnos entendemos que nuestro cuerpo nos está diciendo que hay algo que no hemos podido digerir de lo que ha sucedido, pues antes no lo habíamos podido resolver con la mente.
La palabra misma lo dice, digerir.
Pues la realidad es que no estarás atenta a todo lo que sientes, todo el tiempo. Y a medida que practicas y tu observador está cada vez más presente verás cómo tienes más oído para escuchar a tu intuición que te lo avisa todo. Cuando hablo de observador, hablo de esa capacidad que tenemos de observarnos. Muchas veces te habrás dado cuenta de que te has anticipado a evitar vivir situaciones desagradables porque estabas atenta. Sentiste en tu cuerpo una sensación que te puso sobre aviso. Este ejercicio de sentirte y de observarte también te permitirá ir armando pequeñas estrategias que vayas necesitando en tu vida, para concretar objetivos. Ya no te tirarás más al vacío como lo hacías antes cuando las emociones de desesperación te tomaban. Harás un STOP, te detendrás, reflexionarás y harás todas las acciones necesarias para poder hacer un análisis de lo que tu cuerpo te está avisando como también de tus presentimientos.
Hoy tienes algunas herramientas, sabes decir NO QUIERO, no me interesa, no puedo, no es mi momento. Sabes poner también límites a las situaciones, no permites que nadie viole tu integridad y tu dignidad. Has aprendido a respetarte y a amarte.
Como verás tal vez sean demasiadas cosas nuevas para ti. O tal vez no y ya entiendes de todo esto y tienes herramientas que hoy no estás sabiendo cómo utilizar, pues sabes poco de ti.
Pero ten paciencia, pues todos hemos pasado por lo mismo.
Y te doy un ejemplo de lo que te acabo de decir: Tú has hecho muchos cursos, pero no has hecho trabajo de autoconocimiento, no sabes de ti, pero te han dado igualmente herramientas. Y hoy sigues sufriendo y no comprendes por qué y te sientes vulnerable.
A ver si este ejemplo te sirve:
Te han dado herramientas para cambiar las ruedas de un auto, garantizándote que con ellas tienes la situación resuelta en el caso de que se te pinche un neumático. Entonces tú sales con las herramientas en un hermoso estuche que has pagado bastante caras, un manual de instrucciones, el recibo de pago y una hoja con apuntes donde te han contado de qué material están hechas, la garantía y especificaciones para su uso. Y te quedas esperando un día poder tener un auto y que alguien te ayude a cambiar una rueda, pues tú jamás tuviste la experiencia de hacerlo. Y el auto ha quedado en la etapa de deseo, pues la visualización se ha perdido dado que te has distraído y has focalizado tu atención en la compra del hermoso estuche con herramientas para cambiar neumáticos.
Pequeño detalle, ¿no? Una nueva fantasía en tu vida. Y de eso, estoy segura, ya no quieres más.
Pues en el caso de tu vida, la única que puede experimentarla eres tú. Puedes hacer de todo, engañarte, mentirte, llenarte de acciones inútiles, convertirte en la Madre Teresa de Calcuta, pero si no te juegas por ti y no te haces cargo de tu vida emocional y económica, vivirás justificándote y victimizándote, encontrando al enemigo fuera de ti. Olvidando todo lo aprendido y volviendo a buscar entre los viejos hábitos culpables que justifiquen tus desgracias.
El único enemigo que existe está en ti y es tu manera de pensar la que hoy ya no te es útil. Debes actualizarla, como se actualiza todo hoy en la vida.
Y es sencillo.
Date una oportunidad de pensar algo, por mínimo que sea de manera diferente. Dale otra perspectiva solamente para saber qué se siente ver lo mismo de otra manera. Y observa cómo te sientes. Si te sientes cómoda allí, espera que lo bueno llame a lo bueno. Y verás cómo en este proceso consciente que has decidido transitar, nacerán en ti nuevas motivaciones y una voluntad soberana que te irá empoderando Paso a paso, para que nuevamente comiences a ser dueña de tu vida, o mejor dicho, de la vida que hay en ti.
Tú verás con el tiempo cómo utilizarás todo lo que has comprendido, lo que sabes o lo que ya sientes como propio, pues has llegado hasta aquí con la conciencia de que deseas ser feliz. Hoy escuchas tu corazón. Allí no hay dudas. Y si tuvieras que hacer cambios o armar nuevas estrategias las harías, pues de eso se trata, de estar activa.
Es importante también que fluyas y disfrutes de tus determinaciones, así obrarás con confianza y segura de lo que has decidido, de lo has elegido. Aunque mañana comprendas que te va mejor de otra manera. Lo modificas sin problema, siempre siendo honesta y fiel contigo. Así serás convincente y obtendrás tus objetivos.
Y que no te importe si te equivocas, si debes cambiar los planes, si quieres dar vuelta la historia, es tu vida, se trata de tu vida, son tus determinaciones, con tus experiencias de vida que son tu capital y con tu deseo de ser feliz en todo lo que hagas. Si así lo eliges a diario.
Esto dependerá también de ti, pues es tu vida.
Recuerda el tiempo que te ha llevado llegar hasta aquí empujada por los acontecimientos de tu vida. Hoy será diferente y te pido que te visualices de esta manera, aunque sea cinco minutos en el día autorizándote a vivir dignamente.
¿Qué significa eso?
Hoy estarás construyendo estratégicamente tu nueva percepción de los acontecimientos que podrán cambiar las veces que se te dé la gana. Disfruta de tus decisiones, apuesta a ellas y elige siempre las más saludables y genuinas para ti. Siéntete digna de ser lo que quieras ser y de lo que eres. Y no te preocupes si hoy no lo puedes registrar, pues tal vez aún no te sientas totalmente digna de ser feliz. O de tener lo que quieres en la vida. Eso se trabaja, no te preocupes.
Eso es lo que te han hecho creer todo este tiempo para poder manipularte. Pero hoy te has hecho cargo de ti, ya no crees que tengas nada que ver con ese otro que te lastima y menos aún que te le parezcas. Y tal vez hayas comenzado ya a armar ese gran rompecabezas cuyas piezas forman parte de tu vida y que antes estaban fuera de control. Donde has comenzado a darte cuenta de que la imagen que se está formando allí se parece a ti. Recuerda que son las piezas de tu vida que antes estaban todas tiradas por allí sin ser consideradas, queridas, respetadas. Como si no te importaran o no tuvieras conciencia de para qué servían, cuando allí estaban nada más ni nada menos que todas las experiencias que has tenido que vivir para llegar hasta aquí. Hasta este maravilloso reencuentro con quién eres y ya no más con quién creías ser.
Pero todo paso a paso. Recuerda que tenemos que volver sobre nuestros pasos las veces que sean necesarias para recordarnos, reencontrarnos y amarnos.