Читать книгу Amor, puertas adentro - Claudio Aguirre - Страница 8
ОглавлениеHoy estás ATENTA
Y si te detienes ya no es por miedo, es para pensar cómo será tu siguiente paso, para armar nuevas estrategias acorde a lo que estás planeando para tu vida. Recuerda que estás en construcción, aun levantando cimientos. Y de la atención que pongas en esta etapa del proceso dependerá lo que puedas construir sobre tus bases. Por eso solo por hoy siente lo que haces desde tu intuición, desde el corazón, desde esa comodidad o incomodidad que sientes en el cuerpo, cada vez que presientes que eso no es bueno para ti.
O sea que eres fiel a tu nueva manera de actuar, a tu nueva manera de sentir, que siempre irá modificándose, acrecentándose y evolucionando.
No planifiques nada en el vacío por más simple que sea. Haz una pequeña estrategia, planea, pequeños pasos, pero date el lujo de armar tus pequeñas historias a tu medida, con tu estilo.
Estás aprendiendo a fortalecerte solidificando de a poco tus nuevos deseos. Deseos despojados de apegos, de oscuridad, de miedos y de fantasías.
Hoy no tienes que hacer más esfuerzo que leer y escribir. Dejando en el papel todas tus inseguridades y pensamientos negativos, que se manifestarán incluso con mayor fuerza en un breve tiempo a medida que estés fortaleciéndote. Haciéndote dueña de tu vida, de tus deseos y de tus sueños. Recuerda que son condicionamientos y hábitos que están muy arraigados y que temen por su existencia, temen al cambio que hoy estás decidida a hacer. Y hablo de tu Ego que se resiste al cambio por haber sido durante mucho tiempo el amo de tu vida. Lo recuerdas. Allí le habías autorizado sin darte cuenta, por el caos en que vivías interiormente, a que hiciera lo que quisiera. Y así se movía, libremente en un medio donde el miedo, la desinformación y la falta de flexibilidad eran moneda corriente.
Sabías que siempre hay un solo pensamiento que te separa de lo que quieres, nada más. Reconócelo y quítalo del camino. Él vendrá disfrazado con distintas formas y artilugios para confundirte. Aparecerá con imágenes, emociones y síntomas físicos que si no comprendes para qué vinieron a tu vida, harán que te sientas más incómoda de lo que hoy tal vez te sientes. Cuando solo son una respuesta física de lo que tu psiquis aún no puede comprender ni entender.
Bueno, hoy ya sabes que es así. Préstate atención entonces, obsérvate y elige qué pasos dar. Y que sean pequeños para poder detenerte si fuera necesario y para pensar y armar una nueva estrategia.
O sea que hoy sabes que puedes elegir no estar confundida. Puedes leer, hacer crónicas, adquirir herramientas con el autoconocimiento, buscar un coaching o un guía. Es decir, hacer algún movimiento nuevo, eligiendo actuar conscientemente. Avanzando y retrocediendo para poder comprender, reflexionando, poniendo límites, diciendo SÍ y NO con convicción, pidiendo ayuda.
Eres consciente de que tienes recursos y herramientas para salir del autosabotaje y que debes aprender, reaprender y descubrirlos. Para poder usar toda tu experiencia de vida de manera correcta y coherente, entre lo que dices, piensas y haces. Para que hoy puedas accionar en vez de reaccionar, deprimirte, enfermarte o negar que te sientes mal.
La confusión es la falta de información, aprendizaje y comprensión de quién eres. Te conocen más a ti de lo que tú misma te conoces. Y eso te genera desconfianza de todo, hasta de ti misma, por no saber quién eres. Por no comprender que las herramientas y el poder los tienes tú. Por miedo a hacerte cargo de tu propia existencia. Por miedo a no ser querida, escuchada y considerada.
Pero todo paso a paso, pues todo esto también se aprende y se comprende.
Cómo se aprende a focalizar en lo que queremos para nuestra vida y ya no más en lo que no podemos hacer o en lo que no queremos para ella.
Ese es un proceso en sí mismo que se llama “autoconocimiento”, “autoconciencia”, “trabajo sobre sí”, “autoempatía”, “autosanación psicofísica” y que se transita de la mano de alguien que ya haya vivido lo mismo.
Desafía, experimenta, asómbrate, descubre, sorpréndete, sé feliz.
Y no le temas al cambio, pues no es algo que puedas forzar u obligar a que suceda. Sucede una vez que en tu proceso de crecimiento te vas dando cuenta de las cosas. Y como se trata de un proceso, al igual que tú los demás vivirán el suyo. Cada uno tendrá que ir por el camino que le corresponda, continuando su propio proyecto de vida y en eso no puedes interferir. Puedes asistir y ser un ejemplo de ti misma, pero no puedes pretender cambiar a nadie, ni interferir en la vida de nadie, ni intentar vivir la vida de nadie.
Siempre puedes elegir, no lo olvides, ser feliz o no serlo.
Y siempre estarán en tu vida quienes te amen y te respeten como tú te amas y te respetas. Y amarte y respetarte debe ser una premisa en tu nueva vida. No olvides que estás haciendo tu mejor alianza y que es “contigo misma”. Y en esa alianza no hay lugar para nadie más y menos si es una manipuladora.
O sea que lo que antes te dolía y te hacía sentir culpable, por lo que fantaseabas que le generabas al otro, hoy lo verás como un tema del otro y que no te pertenece. Ya no te permitirás involucrarte en situaciones que no tengan nada que ver contigo y para eso aprenderás aquí a reconocer dónde están tus límites y cómo los pones.
Síntesis: La vida del otro no tiene nada que ver contigo y menos aún si está en disonancia con tu moral, con tus valores y con tu ética.
Nadie te pertenece y no le perteneces a nadie. ¿Te lo has dicho alguna vez?
Pero todo paso a paso. Estamos sembrando nuevas semillas de comprensión y es necesario contemplar esta maravillosa germinación en tu interior.
Tu proceso jamás será igual al de nadie. Y los pasos que des son los tuyos en la caída, cuando te levantas, cuando retrocedes y cuando avanzas. Es tu ritmo, tu estilo, tu identidad, tu sello, tu marca, tu impronta, tu vida, tus tiempos, tus necesidades, tu amor propio, tu estima y tu dignidad.
Recuerda y repite, si fuera necesario, si ya lo has comprendido. “Aprende hoy a pensar solo en ti. Luego los demás te imitarán o te seguirán, o se irán, pero esto es algo que a ti no te concierne. Pues tú no puedes vivir la vida de los demás, ni obligar a nadie a que haga lo que tus carencias afectivas necesitan. Que ya las estamos trabajando a medida que te das cuenta de que las tienes”.
Ahora solo lee una y mil veces y escribe todo lo que sientas. Verás cómo con el tiempo tus intenciones serán cada vez más intensas, más certeras y vitales. Este proceso es y será natural y espontáneo siempre y cuando no te permitas interferencias.
El control por miedo a perder algo es el enemigo propio más deshonesto y desleal que tenemos. Desenmascararlo es parte del trabajo de autoconocimiento.