Читать книгу El misterio de los días - Gloria Liberman - Страница 21

En esos años mis padres vivían en un continente lejano y esa experiencia cercana con la muerte me transportó hacia mi propia vida, mi familia, a valorarlos. Por ello, decidí invitarlos a pasar unos días con nosotros para así poder abrazarlos y mostrarles las hermosuras que Kenia ofrece al turismo.

Fue un hermoso paseo que me alejó unos días del peligro en las calles de Nairobi y refrescó mi corazón cuando pude abrir los brazos a mi propia sangre.

La vida nos llega a través de mamá y papá, sin embargo, no tenemos consciencia de lo que eso significa en cuanto a la profundidad de los lazos de amor que muchas veces se ven interrumpidos por diferencias de opiniones o sentimientos controversiales. La mente guarda rencores, los corazones se alejan y queda un enorme vacío que se siente como un abismo difícil de cruzar.

Hay que ser valiente para tender nuevos puentes y transitar en el mundo de las emociones para sanar, renacer y darle un significado diferente a la historia personal.

Cuando uno es niño vive los acontecimientos desde la perspectiva infantil y desgraciadamente se queda con eso, con los traumas, con las expectativas imaginarias, sin volver a mirar desde los ojos de una persona adulta.

Se puede decir que la forma personal de procesar un evento determina cuánto dolor puede provocar. Para las personas muy sensibles, traumadas y con un programa ancestral de víctima y de sufrimiento, un suceso puede afectarlas más que a otras que no tienen esa personalidad. También el aprendizaje espiritual es a la medida de cada uno, como si el sastre celestial lo hubiera hecho distinto según la naturaleza de la persona y su misión en la tierra.

Mirarlo desde afuera, analizando en perspectiva, como persona adulta todo es perfecto, todo propende al aprendizaje y al cambio, y tenía que ser de esa manera.

No tenemos que tratar de entender a nuestros padres ni los sucesos inexplicables que se cruzan en nuestro camino. A los padres hay que solo quererlos y agradecerles por la vida que nos han dado. Intentar entenderlo todo racionalmente es limitarnos al ámbito de nuestras creencias y expectativas, por lo tanto, es limitar nuestras posibilidades de conectarnos con lo trascendente.

Mis padres me enseñaron valores muy importantes, como la integridad, la honestidad y el respeto.

De cualquier manera, el amor en ellos era evidente y sobresalía por los poros.

En esos días fui consciente del inmenso amor que se tenían entre los dos, como pareja, la sutil forma en la que brillaban juntos. Agradecí por esa relación entre hombre y mujer que me marcó y me hizo buscar mi propia felicidad en ese tema tan complejo y que no había sido fácil para mí, pues había vivido no sin sufrimiento un primer matrimonio y separación con el padre de mis hijos.

La luz de esa estrella que iluminaba sus ojos fue un argumento más que convincente, como una brújula guía de mi destino para buscar una pareja con la cual sentirme plena.

Según mi maestro, en todo momento que viste algo, ese algo pasa a formar parte de ti. Por eso es importante dónde pones los ojos, dónde abres tus oídos, para que dejes entrar al cerebro las cosas buenas.

Nuestra cabeza es como un computador que almacena imágenes y los asocia a sentimientos, sensaciones, con el fin de aprender y replicar.

Recordemos que los niños aprenden por imitación.

Los sabios aconsejan estar atentos y filtrar lo que incorporamos en nosotros y sobre todo ser cuidadosos en no implicar a otras personas en nuestros dramas y situaciones de violencia, con mayor razón si son niños.

Podemos estar creando una realidad que propende a la guerra más que a la paz. En esto se incluyen todos los programas y películas que transmiten los canales de televisión, los juegos electrónicos en los que sobresale la idea de matar, de competir y ganarle a un adversario imaginario como gran meta.

El vivir despierto nos ayuda a seleccionar lo que hacemos y a darnos cuenta lo que inconscientemente estamos intentando realizar. La pantalla del televisor o del computador se transforma en la proyección que nuestro cerebro querrá replicar.

Contribuye hoy con tu grano de arena, una sonrisa, un gesto amable, haz para otros lo que te gustaría que te hicieran a ti, manifiesta tu intención de amor con energía luminosa.