Читать книгу Revelaciones del Popol Vuh - José Napoleón Mariona - Страница 23
ОглавлениеCAPÍTULO 8
Todo fue hecho, su cuerpo, y no pareció bien, sino que se desbarataba y estaba blanco y apelmazado, y desmadejado, y se desmoronaba y se humedecía, no se movía su cabeza, sino que en una parte se estaba su cara, era ciego, y no miraba para atrás, aunque hablaba, no tenía entendimiento sino que se revenía en el agua, no era fuerte.
Y dijeron otra vez los hacedores y formadores, será peor después, y no andará y no se multiplicará, que fuere hecho solo de su entendimiento, lo dijeron, y entonces lo desbarataron y lo volvieron a amasar, su formadura y fábrica, y dijeron:
¿cómo lo haremos otra vez que pueda alabarnos e invocarnos? Dijeron que consultaron otra vez, lo diremos a la XPIYACOC y XMUCANÉ, y a HUNAHPUVUCH, y a HUNAHPUUHÚ, probemos otra vez nuestro día.
Su ser formado dijeron unos a otros, los formadores y fabricadores, y entonces lo dijeron a la XPIYACON, y a XMUCANÉ, y después su ser dicho aquello a los adivinos, abuela del día o sol, y de la luna, que así eran llamados los Nombres de XPIYACOC y XMUCANÉ.
Y dijeron aquel HURACÁN con TEPEU y CUCUMATZ que le dijeron al del sol o adivino, al formador adivino alcanzó, y se unió de ello otra vez se haga nuestro hombre formado, y nuestro hombre edificado, otra vez sustentado y alimentado que nos invoque y que se acuerde de nosotros;
entrad en la consulta abuela y abuelo nuestro, XPIYACOC y XMUCANÉ, como se podrá sembrar y aclarar, nuestro ser invocado, nuestro ser adorado, nuestro ser acordado por el hombre formado y edificado, y por el hombre nuestro pobre, y así se diga,
mostrad vuestro nombre HUN-AHPU-VUCH, HUN-AHPU-UHÚ, dos veces madre, dos veces padre, grande pizote, el de los chalchigüites, el del toriron, el de la tabla, otro no, el del toltecat, abuela del sol, abuela de la luna, así seáis dichos por nuestros formados y criaturas; echad suertes con maises y con tyités y sea solo hecho, si saldrá, si labraremos y lo tallaremos, su boca y su cara de palo, se les fue dicho a los adivinos.