Читать книгу Anuario de Arbitraje 2021 - Mª José Menéndez Arias - Страница 27

Dentro del ámbito del arbitraje comercial, es necesario destacar “The Hague Rules on Business and Human Rights Arbitration” (Reglas de La Haya en arbitraje que involucre a empresas y Derechos Humanos). Estas reglas entraron en vigor en diciembre de 2019 y tienen como objetivo ofrecer un marco regulatorio para aquellos arbitrajes internacionales que puedan surgir en el contexto de disputas comerciales y de Derechos Humanos16.

Cabe destacar que las reglas están basadas en las Reglas de Arbitraje de la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional. Estas reglas contribuyen al desarrollo sostenible porque contribuyen a la mejora en el acceso a la justicia. Por consiguiente, son una forma de acrisolar los objetivos que marca el ODS 16, el cual tiene como finalidad precisamente ello: garantizar el acceso a la justicia17.

En relación con el arbitraje de inversión, como es bien conocido por todos, los acuerdos internacionales de inversión (IIA), tanto los tratados bilaterales de inversión (BIT, por sus siglas inglés– Bilateral Investment Treaty), como los tratados acuerdos multilaterales, englobando en ellos los diferentes tratados de libre comercio, están teniendo un papel fundamental en el desarrollo sostenible, de hecho, actualmente hay más de 2000. Cuestión que será analizada con más detalle ut infra, en el apartado de arbitraje de inversión.

En lo que respecta al ODS 16, el cual tiene como finalidad la promoción de sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, la facilitación al acceso a la justicia para todos y la creación de instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles, es necesario resaltar que el arbitraje desde hace muchos años desarrolla un papel crucial en la defensa de la Ley, el Derecho y la justicia. Desde disputas que involucran tecnologías de salud pioneras, aquellas que involucran el protocolo de Kioto, finanzas islámicas, etc Se ha utilizado para negociar la paz, para evitar conflictos; y hacer frente a las secuelas de los conflictos armados y las revoluciones. Sigue habiendo un enorme potencial para considerar cómo se puede promover mejor el uso actual del arbitraje internacional para resolver disputas relacionadas con el clima y aquellas que involucran empresas y derechos humanos18. En cuanto a la lucha contra la corrupción (ODS 16.5), cabe señalar que muchos gobiernos y organizaciones internacionales han emprendido y están emprendiendo iniciativas para combatirla. La primera iniciativa anticorrupción de la ICC se remonta a 1975, las iniciativas más recientes de la ICC incluyen el lanzamiento de la cláusula anticorrupción de la ICC en 2012 y la publicación en 2013 del Manual de Capacitación en Ética y Cumplimiento de la ICC, cuyo objetivo es ayudar a equipar a las empresas con la experiencia interna necesaria para construir sistemas de ética y cumplimiento acordes con sus necesidades.

En lo que respecta a la resolución de controversias que surjan en contextos medioambientales, en el año 2001 fue adoptado el Reglamento Facultativo para el Arbitraje de Controversias Relativas al Medio Ambiente y/o Recursos Naturales (en adelante, “Reglamento Ambiental”) por la Corte Permanente de Arbitraje. Este Reglamento Ambiental incluye un exhaustivo conjunto de reglas para regular la resolución de las controversias ambientales mediante el arbitraje. También, pone a disposición de las partes un listado de árbitros especializados en esta materia y expertos científicos y técnicos que pueden ser nombrados como peritos19.