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¿SE PUEDE CONTAGIAR

EL CÁNCER?

La respuesta sencilla y clara es que el cáncer NO es una enfermedad contagiosa.

Por esto, no solo podemos estar tranquilamente al lado de los pacientes e interactuar libremente con ellos, sino que debemos hacerlo: representa una ayuda psicológica importante para aquellas personas que lo padecen. Hubo un tiempo en que se creyó que podía haber riesgo de contagio y se discriminó a los pacientes con cáncer, y nada más lejos de la realidad.

Si vemos que en una determinada familia hay tres casos de cáncer, podemos teóricamente pensar que existe un microorganismo que se va transmitiendo de unos a otros, pero lo que verdaderamente ocurre suele ser, o bien un cuadro genético de herencia del cáncer (los estudiaremos más adelante en este libro) o que todos ellos compartan un hábito tóxico, como por ejemplo cuando abuelo, padre e hijo tienen o han tenido cáncer de pulmón: no es que se lo hayan contagiado, es que los tres eran fumadores diarios de un paquete de cigarrillos (y uno para cada uno).

En conclusión, acompañemos y ayudemos sin temor a los pacientes con cáncer, que no se nos «pegará» la enfermedad.

TUMORES ASOCIADOS A LA INFECCIÓN POR

MICROORGANISMOS

Una cosa muy distinta es el hecho de que existan determinados tipos de tumores, a los cuales ya me he referido páginas atrás al hablar de las infecciones, que están asociados a la infección por microorganismos como los virus. Sería, por ejemplo, el caso del virus del papiloma humano y el cáncer de cuello del útero, cabeza y cuello, vulva, pene y ano; o el cáncer también ya citado de hígado asociado a los virus de la hepatitis C y B.

En estos supuestos la transmisión no se produce por un contacto habitual, sino por interacción entre mucosas y a nivel sanguíneo, en el caso de los virus del papiloma durante los actos sexuales (coito vaginal, sexo oral y penetración anal) y, en caso del cáncer de hígado, a las anteriores circunstancias sumamos el compartir jeringuillas y las transfusiones sin las condiciones biosanitarias adecuadas.

Remarquemos, por otro lado, un concepto muy importante respecto a estos tipos de cáncer: la transmisión ocurre de una persona que no tiene el cáncer a otra que tampoco lo tiene, y el cáncer es una consecuencia posterior.

Aunque es difícil dar porcentajes, estos casos quizá representan el 10 % del cáncer a nivel mundial y, como ya he comentado, las políticas de vacunación contra estos virus y otros acabarán erradicando estos tipos tumorales. O esa es, al menos, la esperanza que tenemos muchos doctores e investigadores en la comunidad médica.

Hablemos de cáncer

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