Читать книгу La herida de la literatura - Miriam Beizana Vigo - Страница 8
ОглавлениеEl mundo no le decía a ella como les decía a ellos:
«Escribe si quieres; a mí no me importa nada».
El mundo le decía con una risotada:
«¿Escribir? ¿Para qué quieres tú escribir?».
Una habitación propia, de Virginia Woolf