Читать книгу Pensamientos y algunos recuerdos - Horacio García - Страница 5

Оглавление

Te quiero contar un secreto, algunas personas me han dicho poeta, pero no hago rimas, celebro quien tenga la capacidad y el gusto por hacerlas, no escribo poesía, apenas relatos o historias cortas, me gusta que las palabras cobren vida y que te sientas dentro de la historia, el desafío impuesto es que no te canses a los pocos renglones y que no resistas la necesidad de llegar hasta el fin de tu lectura; que el texto te atrape y necesites seguir. Quizás intentando que quedes con ganas de más, como estimulando el deseo y entregarte el placer de a poco, para que el momento perdure el mayor tiempo posible. Creer que por un segundo puedo entrar en tu mente, que puedo hacerte sentir o ver lo que describo, que juntos caminemos por un bosque, que los árboles nos rodeen con sus ramas y toquen nuestros rostros, el aroma inunde los sentidos, la paz nos transporte, donde escalemos una montaña y el vértigo nos llene de adrenalina y la vista se pierda en el horizonte, recorrer una playa, escuchando el grito de las gaviotas, el calor de la arena en nuestros pies, nuestros cuerpos, la algarabía de los niños jugando y el sonido hipnótico de las olas o simplemente charlemos o tomemos un café. También que me permitas un segundo ser romántico, donde podamos conocernos en un ambiente cálido, con baja luz y aromas que inviten a la confianza y enciendan los silencios, generando una intimidad y que las letras por un instante nos hagan cómplices, amigos o amantes, de acuerdo a lo que escriba. Gozar un texto y sentirlo en la mente, el cuerpo y el alma, que te provoque sentimientos y sensaciones, que active tu imaginación, que puedas sentirlo físicamente, que te provoque tristeza, alegría, ansiedad, que te emocione y rescate recuerdos, imágenes, sabores, historias personales de amores, amigos o familiares que ya no están. Escribir con el alma es hacerlo para llegar a tu alma, para construir un hilo invisible que nos ate, la palabra nos desnude, nos describa y hasta puede enamorarnos sin llegar a conocernos. Leer es volar con la mente y el corazón y escribir es acompañarte en el vuelo, remontar juntos los cielos, alimentar el espíritu, gritar con fuerza, que el viento nos acaricie y la libertad nos llene de placer. Un texto puede no ser poesía, pero sí tener la belleza del lenguaje, la cadencia y el ritmo que el relato impone. Hacerte sentir calor en el pecho, pequeños temblores y llorar o reír, sin que nadie te vea. No quiero rotular, pero es cierto, no escribo poesía, no escribo rimas, escribo palabras, pero si en determinado momento sentiste que llegué a vos, que nos conectamos, que estoy en tu mente, que compartimos sensaciones y sentimientos, puedo seguir contándote historias, relatos o vivencias y que este pequeño secreto que te conté valga la pena.

Pensamientos y algunos recuerdos

Подняться наверх