Читать книгу Manual práctico de criminología aplicada - Beatriz de Vicente de Castro - Страница 60
3. APROXIMACIÓN INDIRECTA
ОглавлениеEl método de perfilado indirecto se diseñó en el seno de la SACD de la Guardia Civil como respuesta a la necesidad de elaborar una estrategia de intervención adaptada a un sujeto concreto en el marco de una investigación criminal. Imaginemos diferentes escenarios como el manejo de fuentes humanas, un atrincheramiento con rehenes en el que haya que negociar, la práctica de una autopsia psicológica o la elaboración de una estrategia de la entrevista cuando nuestro sospechoso ya ha sido detenido. En todos estos casos interesa poder conocer características de la personalidad y otros componentes personales del individuo (inteligencia, actitudes, creencia, afectos, emociones y motivación) con la finalidad de interactuar con el sujeto (SOTOCA, GONZÁLEZ y HALTY, 2019)30. Pero, ¿cómo saber cuáles son los rasgos de personalidad predominantes en un individuo? ¿Cómo medir su inteligencia? ¿De qué manera predecir sus motivaciones o sus actitudes? No cabría esperar que en una situación de toma de rehenes, por ejemplo, el equipo policial encargado de la negociación propusiera a los atrincherados cumplimentar una batería de test que midieran todas estas características para poder adaptar la estrategia de negociación, ¿verdad? Pues bien, de ahí el término indirecto para definir esta aproximación al perfilado criminal. Precisamente de la necesidad de conocer al sujeto objeto de la intervención policial sin contar con su colaboración directa.
La teorías interaccionistas de la personalidad (BUSS, 1987)31 sugieren que los individuos seleccionamos y creamos nuestro ambiente social (amigos, actividades, sociales, etc.) para reforzar nuestras disposiciones, preferencias y actitudes. De la misma manera que escogemos o creamos nuestro ambiente social, decoramos o disponemos, nuestro ambiente físico, es decir, la manera que tenemos de decorar u organizar nuestros espacios privativos refleja, en cierto modo, como somos. En definitiva, nuestra personalidad va dejando una huella tanto en la manera de afrontar nuestras relaciones personales (indicadores de personalidad) como en la manera que tenemos de organizar nuestros espacios físicos (indicadores observables externos). En base a estas teorías interaccionistas y adaptando el modelo de la lente (BRUNSWIK, 1956)32, Sam Gosling, profesor de la Universidad de Texas, desarrolló la denominada Science of Snooping o ciencia del rastreo que propone que a través de la observación de los indicadores propuestos se pueden llegar a identificar una serie de características distintivas de la personalidad de un individuo (GOSLING, 2002 y 2008, entre otros estudios)33.
Tras replicar varios de los estudios de Gosling, se pudo observar que existía cierta consistencia estadística en las inferencias de los componentes personales de una muestra de sujetos a través de la observación de su comportamiento (canales de comunicación no verbal, especialmente) y de sus espacios privativos. Partiendo de esta idea, posteriormente se diseñó el modelo ENCUIST de perfilado indirecto (HALTY, GONZÁLEZ y SOTOCA, 2017; REVUELTA, HALTY y XIMÉNEZ, 2018)34 atendiendo a variables observables relativas a la expresión emocional del sujeto y relacionándolas con los sistemas de activación o inhibición conductual propuestos por Jeffrey GRAY (GRAY, 1967 y 1970; GRAY et al., 1983)35.
Más allá de la aplicación operativa que diera sentido al modelo de perfilado indirecto en sus inicios, esta técnica también se ha revelado útil en el contexto de la investigación de delitos violentos. Si bien las técnicas deductiva e inductiva tienen su fuente de información en la escena del crimen y su objetivo es ofrecer deducciones que permitan al investigador acotar la búsqueda del posible autor del crimen, la técnica de perfilado indirecto viene a cerrar el círculo aportando un análisis de compatibilidad, una vez el supuesto autor de los hechos ha sido identificado. Partiendo del análisis por medios indirectos del propio investigado, esta técnica tiene como objetivo concluir si las características personales de dicho individuo coinciden o no, y en qué grado, con el perfil original obtenido del análisis de la escena y de las circunstancias originales del hecho, en lo que se ha dado en llamar contraperfil.