Читать книгу En palabras del Buddha - Бхиккху Бодхи - Страница 35

(3) La ciudad antigua

Оглавление

«Monjes, antes de mi iluminación, cuando era un Bodhisatta sin iluminar completamente, pensé: “Ciertamente este mundo está sumido en la miseria, pues uno nace, envejece y muere, cae de un estado, renace en otro, pero no conoce la salida de este sufrimiento, a saber, del envejecer y del morir. Sin duda debería yo conocer la salida de este sufrimiento, del envejecer y del morir”.

»Entonces, monjes, pensé: “¿Qué es aquello que, cuando existe, existen también el envejecimiento y la muerte? ¿Qué condiciona la existencia del envejecimiento y la muerte?”. Entonces, monjes, mediante la atención cuidadosa, descubrí a través de la sabiduría que: “Cuando existe el nacimiento, existen el envejecimiento y la muerte. El envejecimiento y la muerte condicionan la existencia del nacimiento”.

»Entonces, monjes, pensé: “¿Qué es aquello que existe cuando existe el nacimiento? Existe el devenir. Existe el asimiento. Existe el deseo. Existen las sensaciones. Existe el contacto sensorial. Existen las seis bases de los sentidos. Existe el organismo psicofísico. ¿Y qué condiciona la existencia del organismo psicofísico?”. Entonces, monjes, mediante la atención cuidadosa, descubrí a través de la sabiduría que “Cuando existe la consciencia, existe el organismo psicofísico. La consciencia condiciona la existencia del organismo psicofísico”.

»Entonces, monjes, pensé: “¿Qué es aquello que, al existir, también existe la consciencia? ¿Qué condiciona la existencia de la consciencia?”. Entonces, monjes, mediante la atención cuidadosa, descubrí a través de la sabiduría que “Cuando existe el organismo psicofísico, existe la consciencia. El organismo psicofísico condiciona la existencia de la consciencia”.20

»Entonces, monjes, pensé: “Ciertamente, esta consciencia se remonta hasta el organismo psicofísico y no sigue más allá. En tanto esto es así, uno vive, envejece y muere, cae de un estado y renace en otro, es decir, la consciencia condiciona la existencia del organismo psicofísico y el organismo psicofísico condiciona la existencia de la consciencia.21 El organismo psicofísico condiciona la existencia de las seis bases de los sentidos. Las seis bases de los sentidos condicionan la existencia del contacto sensorial, etc. Éste es el origen de todo este montón de sufrimiento”.

»“Origen, origen”. Así, monjes, surgió en mí la visión de una realidad nunca antes oída, surgió el conocimiento, surgió la sabiduría, surgió la intuición, surgió la iluminación.

»Entonces, monjes, pensé: “¿Qué es aquello que, no existiendo, tampoco existen el envejecimiento y la muerte? ¿Con la cesación de qué cesan el envejecimiento y la muerte?”. Entonces, monjes, mediante la atención cuidadosa, descubrí a través de la sabiduría que “Cuando no existe el nacimiento, no existen el envejecimiento y la muerte. Con la cesación del nacimiento cesan el envejecimiento y la muerte”.

»Entonces, monjes, pensé: “¿Qué es aquello que, no existiendo, el nacimiento tampoco existe? El devenir tampoco existe. El asimiento tampoco existe. El deseo tampoco existe. Las sensaciones tampoco existen. El contacto sensorial tampoco existe. Las seis bases de los sentidos tampoco existen. El organismo psicofísico tampoco existe. ¿Con la cesación de qué cesa el organismo psicofísico?”. Entonces, monjes, mediante la atención cuidadosa, descubrí a través de la sabiduría que “Cuando no existe la consciencia, el organismo psicofísico tampoco existe. Con la cesación de la consciencia cesa el organismo psicofísico”.

»Entonces, monjes, pensé: “¿Qué es aquello, monjes, que, no existiendo, la consciencia tampoco existe? ¿Con la cesación de qué cesa la consciencia?”. Entonces, monjes, mediante la atención cuidadosa, descubrí a través de la sabiduría que “Cuando el organismo psicofísico no existe, la consciencia no existe. Con la cesación del organismo psicofísico cesa la consciencia”.

»Entonces, monjes, pensé: “He alcanzado el camino hacia la iluminación, a saber, que con la cesación del organismo psicofísico cesa la consciencia. Con la cesación de la consciencia cesa el organismo psicofísico. Con la cesación del organismo psicofísico cesan las seis bases de los sentidos. Con la cesación de las seis bases de los sentidos cesa el contacto sensorial, etc. Éste es el cese de todo este montón de sufrimiento”.22

»“Cesación, cesación”; así, monjes, surgió en mí la visión de una realidad nunca antes oída, surgió el conocimiento, surgió la sabiduría, surgió la intuición, surgió la iluminación.

»Así como, monjes, un hombre que fuera caminando por un bosque, por una selva, viera un antiguo sendero, un antiguo camino que hubiera sido recorrido por hombres en el pasado, y lo siguiera y, siguiéndolo, viera una antigua ciudad, una antigua capital, que hubiera sido habitada por hombres en el pasado, una ciudad con sus parques, sus jardines, sus estanques de lotos, sus murallas, una ciudad encantadora. Entonces imaginad, monjes, que aquel hombre informara al rey o a los ministros: “Oíd, venerable señor, tenéis que saber algo. Caminando en el bosque, en la selva, vi un antiguo sendero, un antiguo camino que fue recorrido por hombres en el pasado, y lo seguí. Y, siguiéndolo, vi una antigua ciudad, una antigua capital donde habían vivido hombres en el pasado, una ciudad con sus parques, jardines, lagos de lotos, murallas, una ciudad encantadora. ¡Reconstruid, venerable señor, esa ciudad!”. Entonces, monjes, el rey o los ministros harían reconstruir esa ciudad, y llegaría un tiempo en el que aquella ciudad sería rica, próspera, muy poblada, llena de gente, siempre creciendo y expandiéndose.

»Del mismo modo, monjes, yo vi un antiguo sendero, un antiguo camino, que había sido recorrido por los buddhas perfecta y completamente iluminados en el pasado. ¿Y cuál es, monjes, este antiguo sendero, este antiguo camino que había sido recorrido por los buddhas perfecta y completamente iluminados en el pasado? No es otro que el Noble Óctuple Sendero. A saber: recta visión, recto pensamiento, recta palabra, recta acción, rectos medios de vida, recto esfuerzo, recta atención, recta concentración. Éste es ciertamente, monjes, el antiguo sendero, el antiguo camino recorrido por los buddhas perfecta y completamente iluminados del pasado. Este [sendero] seguí y, siguiéndolo, comprendí el envejecimiento y la muerte. Comprendí el origen del envejecimiento y la muerte. Comprendí el cese del envejecimiento y la muerte. Comprendí el camino que conduce a la cesación del envejecimiento y la muerte. Lo seguí y, siguiéndolo, comprendí el nacimiento … comprendí el devenir … comprendí el asimiento … comprendí el deseo … comprendí las sensaciones …comprendí el contacto sensorial … comprendí las seis bases de los sentidos … comprendí el organismo psicofísico … comprendí la consciencia. Lo seguí y, siguiéndolo, comprendí las construcciones intencionales. Comprendí el origen de las construcciones intencionales. Comprendí la cesación de las construcciones intencionales. Comprendí el camino que conduce a la cesación de las construcciones intencionales.23 Y conociendo esto por propia experiencia, informé a los monjes y monjas, a los discípulos y las discípulas laicas. De modo que, monjes, en tanto la vida de santidad es bien difundida entre seres humanos y divinos, se expande y es próspera, famosa, muy popular, apta para todos».

(SN 12:65; II 104-107)

En palabras del Buddha

Подняться наверх