Читать книгу El IUSAM de APdeBA - Héctor A. Ferrari - Страница 9
Referencias
ОглавлениеFerrari, H. (2013). Los orígenes de la formación analítica y las razones de una omisión. En Las realidades del psicoanálisis: teoría, clínica y transmisión (pp. 307-313). Buenos Aires: APdeBA.
Freud, S. & Jung, C. (1978). Correspondencia. Madrid: Taurus.
Makaris, J. (2008). Revolution in mind. The creation of psychoanalysis. New York: Harper.
Schröter, M. (2002). Max Eitingon and the Struggle to Establish an International Standard for Psychoanalytic Training (1925-1929). Int. J. Psych, 83: 875-893.
Tögel, C. (2006). Freud und Berlin. Berlin: Ausbau Verlag.
Wallerstein, R. (1998). Lay Analysis: life inside the controversy. New Jersey: A. Press.
Zaretsky, E. (2005). Secrets of the soul. A social and cultural history of psychoanalysis. New York: Alfred A. Knopf.
1 En 1902, probablemente por iniciativa de Stekel, que había sido su paciente, Freud invitó a cuatro colegas (Stekel, Adler, Kahane y Reitler) a reunirse con él para discutir su trabajo. Formaron lo que llamaron la Psychological Wednesday Society, (Sociedad Psicológica del Miércoles) ya que se reunían todas las semanas en ese día.
2 Max Eitingon era médico psiquiatra en Zúrich y fue quien promovió el acercamiento de Carl Jung con Freud. Fue analizado brevemente por Freud, antes de establecerse en Berlín en 1910. En 1923 impulsó el “novedoso” trípode de formación en psicoanálisis.
3 Hacía pocos años que se había autorizado el ingreso de mujeres a la Facultad de Medicina de Berlín.
4 Freud, S. (1910). Las perspectivas futuras de la terapia analítica, AE XI, p. 136.
5 Freud, S. (1912). Consejos al médico sobre el tratamiento psicoanalítico, AE XII, pág. 107.
6 Freud, S. (1910). Sobre el psicoanálisis ‘silvestre´, AE XI, pág. 226: “Ni a mí mismo, ni a mis amigos y colaboradores, nos resulta grato monopolizar de ese modo el título para ejercer una técnica médica. Pero no nos queda otro camino en vista de los peligros que para los enfermos y para la causa del psicoanálisis conlleva el previsible ejercicio de un psicoanálisis «silvestre”. En la primavera de 1910 fundamos una Asociación Psicoanalítica Internacional, cuyos miembros se dan a conocer mediante la publicación de sus nombres a fin de poder declinar toda responsabilidad por los actos de quienes no pertenecen a ella y llaman «psicoanálisis» a su proceder médico. En verdad, tales analistas silvestres dañan más a la causa que a los enfermos mismos”.
7 En el Congreso de Núremberg, el trabajo de Ferenzci (1909) “Introyección y transferencia”, ofrecía lo más avanzado en técnica analítica para esa época.
8 Pacientes activos quiere decir mentalmente enfermos.
9 Freud, S. (1915/16). Conferencias de Introducción al Psicoanálisis, AE XV y XVI.
10 Freud, Prólogo a un trabajo de Max Eitingon, AE XIX, p. 290.
11 La condición de ser médico para ingresar a la formación analítica se modificó en la IPA en los años ochenta, como resultado de un juicio que le entablaron los psicólogos en Estados Unidos.
12 Freud, “¿Debe enseñarse el psicoanálisis en la universidad?”, AE XVII, (1919 [1918]).
13 Roudinesco E. (2014). Freud en su tiempo y en el nuestro, Randon House, p. 206.
14 Freud S. (1926) ¿Pueden los legos ejercer el análisis? Diálogos con un juez imparcial, AE XX.
15 Freud, Presentación autobiográfica, (1925 [1924]), AE XX.
16 Wallerstein R. Psychoanalysis: A Full Time Visión. Participación en Panel Psicoanalysis and the University, the Clinical Dimention, Emory University, Atlanta, Ga. USA Nov. 12 y 13, 2007. Publicado en International Journal Psychoanalysis, 2009, 90(5).