Читать книгу Planificación regional: paisaje y patrimonio - José Castro Serrano - Страница 33

La forma se define como una masa delimitada por contornos de objetos, que se percibe como una entidad en sí misma debido al conocimiento y la experiencia. Hay dos tipos de formas (Español, 1995):

a. Bidimensionales: áreas con alto contraste de color o textura en comparación con otras zonas contiguas. Estas formas crean contornos bidimensionales en el paisaje. Las formas bidimensionales lineales se consideran un tipo de líneas (bandas, por ejemplo, fachadas en la Figura 2).

b. Tridimensionales: volúmenes resultantes de la topografía del terreno, o debido a la existencia de objetos aislados o agrupados (por ejemplo, construcción global en la Figura 2).

La forma tiene tres características básicas (Neufert, 1982 y Español, 1995):

• Geometría: composición de la forma, que varía desde formas regulares (cuadrado, esfera, prisma) hasta irregulares o amorfas. Las regulares, con patrones puros y simples, son dominantes en una escena.

• Complejidad: grado de simplicidad. La percepción visual está dominada por elementos simples que son fácilmente comprensibles.

• Dirección: relación con el paisaje horizontal. La atención del observador es atraída por las formas verticales, especialmente cuando alcanzan y superan el horizonte.