Читать книгу Tendencias actuales en economía circular: instrumentos financieros y tributarios - Rodolfo Salassa Boix - Страница 47

IV. Principios que equilibran la innovación en el ámbito ambiental

Оглавление

Como se ha señalado en párrafos anteriores, los ODS 8, 9 y 12 de Naciones Unidas, establecen parámetros claros para apoyar la innovación en el marco de un desarrollo sostenible. En cualquier caso, parece evidente que –por un lado– no puede existir una innovación sin límites, y –por otro– será necesario prevenir las externalidades negativas en origen, esto es, antes de que éstas desplieguen sus efectos adversos en forma de residuos y otros.

Por este motivo, en este apartado trataremos dos principios medioambientales de la Unión Europea en relación con la innovación. Se trata de los principios de precaución y prevención. El Art 191 TFUE, señala que la política ambiental de la UE “tendrá como objetivo alcanzar un nivel de protección elevado, y se basará en los principios de cautela y de acción preventiva”.

Según la Comisión Europea, puede invocarse el principio de precaución “cuando un fenómeno, un producto o un proceso puede tener efectos potencialmente peligrosos identificados por una evaluación científica y objetiva, si dicha evaluación no permite determinar el riesgo con suficiente certeza”. La propia Comisión señala, que el principio en estudio solo es aplicable ante la perspectiva de existencia de un riesgo de carácter potencial40.

Según señalábamos al principio de este apartado, la innovación habrá de tener límites cuando sus potenciales consecuencias negativas sobre el medioambiente puedan darse y ofrezcan dudas desde un punto de vista científico. Como señala CIERCO SEIRA, para que pueda invocarse este principio es preciso –en primer lugar– que exista una incertidumbre objetiva, es decir, un efecto indeseado sobre el medioambiente que no sea meramente ilusorio. En segundo lugar, será necesaria una evaluación científica que ofrezca una duda razonable, fundada en criterios y procedimientos de análisis lógicos41.

Por último, esa incertidumbre a la que aludimos en el párrafo anterior “debe gestarse en un contexto de transparencia que permita a la comunidad científica, a los sectores sociales más afectados y, en general, a la colectividad en su conjunto tener conocimiento de la evaluación”. En síntesis, el principio de precaución puede ayudar a desvincular el crecimiento económico de la degradación ambiental42.

En base a lo anterior, la incertidumbre científica es la condición que abre la puerta a la aplicación del principio de precaución, y se da cuando el riesgo posee un carácter desconocido. La pregunta que se suscita es qué ocurre si un producto o proceso posee un riesgo probado. La respuesta la encontramos en el principio de prevención.

Según se señala en el Primer Programa de Acción de las Comunidades Europeas en materia de medioambiente, en su Título II: “la mejor política óptima de medio ambiente ha de evitar, desde un principio, la creación de contaminación o de perturbaciones en vez de combatir sus efectos ulteriormente. A este fin, es conveniente que el progreso técnico se conciba y se oriente de forma que responda a la preocupación de proteger el medio ambiente y de mejorar la calidad de vida, asegurándose de que su coste sea el más reducido posible para la colectividad. Esta política de medio ambiente puede y debe correr pareja con el desarrollo económico y social. Lo mismo puede decirse del progreso técnico”.

A nuestro modo de ver, el principio de prevención actúa como mecanismo de seguridad en el ámbito de la innovación. No puede fabricarse o inventarse cualquier cosa y ponerse en el mercado. Todo producto que esté demostrado que cuente con externalidades negativas desde la perspectiva ambiental, deberá ser modificado o eliminado de la cadena de consumo en base este principio. En otras palabras, como indica PERNAS GARCÍA, “es más adecuado, económica y ecológicamente, evitar la contaminación adoptando las medidas provisorias necesarias, que desarrollar medidas correctivas a posteriori”43.

En base a la orientación ofrecida hasta ahora, el ecodiseño actúa como elemento preventivo de la economía circular, porque permite desarrollar procesos innovadores, que permiten fabricar productos minimizando los residuos y reduciendo o eliminando completamente las correspondientes las externalidades negativas que los mismos conllevan. En otras palabras, el ecodiseño es la piedra angular; el elemento preventivo que permite desplegar una economía circular en su verdadera dimensión de sostenibilidad ambiental.

En realidad, el ecodiseño es la muestra de que es posible evitar las externalidades negativas de un producto o proceso si se actúa en su estadio preliminar. Además, desde el punto de vista económico, el ecodiseño ahorra costes a las empresas y administraciones. El motivo es que resulta más costoso reparar el daño ambiental una vez producido, si es que es posible repararlo, que aplicar medidas preventivas44.

El principio de prevención no encuentra un desarrollo claro dentro de los actos de la Unión Europea. En cualquier caso, existen algunas medidas comunitarias en relación con dicho principio45. Entre ellas, destacan las evaluaciones de impacto ambiental, la prevención de accidentes en materia de sustancias peligrosas y la obligación de notificar a los responsables públicos la introducción al mercado de determinados artículos y la exportación de los mismos46.

Ambos principios, precaución y prevención, no deben confundirse, y dependerá del grado de certidumbre del riesgo en base a su valoración científica, lo que hará que se aplique uno u otro. Como señala CARRETERO GARCÍA, “si el riesgo es desconocido habrá que aplicar el principio de exoneración; si es incierto el principio de precaución; si es probado el principio de prevención; y si finalmente el riesgo se produce habrá que acudir al principio de reparación”47. Para JIMÉNEZ DE PARGA, el principio de precaución es complementario al principio de prevención, en el sentido de que regula riesgos significativos o irreversibles, sobre los que no existe una verdadera certidumbre científica48.

Tendencias actuales en economía circular: instrumentos financieros y tributarios

Подняться наверх