Читать книгу Hechos y dichos memorables. Libros VII-IX. Epítomes. - Valerio Máximo - Страница 15
Ejemplos extranjeros
ОглавлениеNo pudieron los cretenses disfrutar de una ayuda semejante: [6 , 1] abocados a la más absoluta penuria por culpa del asedio de Metelo, más que apagar su sed, diría yo que la atormentaron bebiendo su propia orina y la de sus bestias. Sin duda el temor a ser vencidos les empujó a padecer algo a lo que sus vencedores ni siquiera les habrían obligado 89 .
[2] Los numantinos, por su parte, sitiados por Escipión 90 por medio de una empalizada y un terraplén, cuando se había agotado todo aquello que podía saciar su hambre, acabaron recurriendo a la carne humana como alimento. Por ello, después que su ciudad fue tomada, se encontraron muchos que llevaban bajo sus vestiduras restos y miembros de cadáveres. Y no puede alegarse como excusa para tal comportamiento la necesidad, pues quienes tenían libertad para morir no tenían necesidad de seguir viviendo de aquella manera.
[3] La macabra contumacia de los numantinos fue superada, en una situación similar, por la abominable impiedad de los calagurritanos. Éstos, para seguir demostrando su lealtad a las cenizas del difunto Sertorio, frustrando así el asedio de Gneo Pompeyo 91 , y puesto que ya no quedaban animales en la ciudad, convirtieron a sus mujeres e hijos en un infame alimento. Y para alimentar por más tiempo sus propias vísceras con las de los suyos, aquellos jóvenes armados no dudaron en salar los pobres restos de sus muertos. ¡A ellos podría alguien exhortarles a luchar con coraje en el frente por la vida de sus esposas e hijos! Lo cierto es que, de un enemigo como aquél, un general tan ilustre como Pompeyo debió reclamar antes un castigo que la victoria: era mayor la gloria que podía reportarle su venganza que no la victoria sobre un adversario que, con su ferocidad, había superado a todo tipo de serpientes y fieras. En efecto, lo que para éstas constituye las dulces prendas de su existir, más queridas que su propia vida, para los calagurritanos fue su almuerzo y su cena 92 .