Читать книгу La radio en el Perú - Emilio Bustamante - Страница 21

1.7.2 Las emisiones de prueba de OAX

Оглавление

Los días 16, 17, 18 y 19 de junio de 1925, El Comercio informó sobre las emisiones de prueba de OAX. El martes 16 destacó que el programa musical emitido la noche anterior fue muy interesante, y que se escuchó con “bastante nitidez y relativo volumen”, pero lamentó que se malograra por la interferencia de la chispa radiotelegráfica del cerro San Cristóbal. Convendría, decía el autor de la nota, que la Marconi “impidiera la función de esa ametralladora en la hora de la trasmisión de conciertos”. En cuanto al programa en sí, se detallaba que había comenzado con una pieza bailable tocada por la orquesta de la estación integrada por los artistas González, Francini y Bascuñan, y conducida por el maestro Amílcar Mateucci. La misma orquesta interpretó a continuación el vals Primavera, la habanera Ahorita y la fantasía Pagliacci. Las señoritas Pepita Gómez Sánchez y Jelice Sathern cantaron, “habiendo bisado la primera su Canción Mexicana, por haberlo pedido telefónicamente los aficionados”. La transmisión se escuchó, según el diario, no solo en Lima sino también en el Callao y balnearios (El Comercio, 16 de junio de 1925).

El miércoles 17, El Comercio comentaba la segunda prueba de la estación. Observaba que si bien la música de orquesta se escuchaba “con volumen y pastosidad muy agradables”, no ocurría lo mismo con los solos. Agregaba que el anunciador había prometido para la tercera prueba una sorpresa, y adelantaba que tomaría parte de la emisión una jazz band compuesta por “jóvenes dilettanti” (El Comercio, 17 de junio de 1924).

El mismo diario informó, el jueves 18, sobre la tercera prueba, en la que volvió a participar la orquesta del maestro Mateucci, además de un cantante que interpretó un tema argentino y un conferencista que expuso sobre la radio. La sorpresa anunciada consistió en la presentación del afamado dúo criollo Montes y Manrique, quienes entonaron “cantos nacionales”. El autor de la nota de El Comercio relataba que la música de la emisión entró al receptor de la imprenta con “volumen ensordecedor”, y que perfeccionada luego la amplificación, pudieron ofrecer el programa “al numeroso público que invadió, con agrado para nosotros, el hall de la casa”; añadía que “[…] por vía de ensayo, también, hicimos sonar el altoparlante en las ventanas exteriores del edificio, para conocer el alcance del sonido, sorprendiendo con los agradables acordes de la música perifónica a los vecinos de dos cuadras a la redonda”. Reconocía que, aunque Montes y Manrique quizá se acercaron demasiado al micrófono, fueron coreados y aplaudidos por los oyentes con entusiasmo. Al final de la nota, el diario insistía “en nombre de los aficionados que no poseen sets de ajuste fijo” que se suspendiera el trabajo de radiotelegrafía del cerro San Cristóbal durante las horas de audición, pues se seguía escuchando el chispeo (El Comercio, 18 de junio de 1925).

Una cuarta prueba se realizó la noche del 18 de junio. El Comercio destacaba la interpretación de Madame Butterfly por un solo femenino, y la Mignon, cantada por Carlos Pardo Figueroa. Aseguraba haber recibido llamadas telefónicas de oyentes de Miraflores, Barranco, Callao y La Punta, que decían haber escuchado “admirablemente” la transmisión. Hacía, por último, una mención elogiosa del speaker Antonio Garland, “[…] claro como una campana, con vago acento que delata larga permanencia en Nueva York y Pittsburg, sedes de grandes trasmisiones” (El Comercio, 19 de junio de 1925). Hubo una quinta y última emisión de prueba el viernes 19 de junio.

La radio en el Perú

Подняться наверх