Читать книгу Los entes locales ante la transición y sostenibilidad energética - Isabel González Ríos - Страница 15
4. Una aproximación a la regulación interna sobre sostenibilidad energética y su incidencia en los entes locales A) Iniciativas que implican a los entes locales
ОглавлениеA nivel interno tampoco estamos huérfanos de medidas políticas orientadas a un uso más sostenible de la energía y a su conexión con la lucha frente al cambio climático. Entre ellas se encuentran la Agenda Urbana Española (AUE) o la Red Española de Ciudades por el Clima91. Pero sin duda los documentos que mejor pueden orientarnos respecto a la intervención requerida y posible de las Entidades locales en el uso sostenible de la energía son el Plan Nacional de Acción de Eficiencia Energética 2017-2020 y el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030.
Conectada con la Agenda Urbana de la ONU y de la Unión Europea se aprueba en España la Agenda Urbana Española92 que pretende implementar los compromisos asumidos con la firma de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible de Naciones Unidas de 201593, especialmente el objetivo número 11 dedicado a las ciudades. Así, la AUE realiza un diagnóstico de la realizad urbana y rural, establece un decálogo de objetivos generales y otros 30 más específicos y presenta una guía para la elaboración de los planes de acción. En el citado decálogo se incluyen varias medidas directamente relacionadas con la sostenibilidad energética (“revitalizar la ciudad existente”, “prevenir y reducir los impactos del cambio climático”94, “favorecer la proximidad y la movilidad sostenible”). La citada Agenda Urbana viene a ampliar el principio de desarrollo sostenible urbano, el cual se había plasmado en el Texto Refundido de la Ley del Suelo y Rehabilitación Urbana de 2015.
Para la implementación de la AUE se ha creado un Alto Comisionado bajo la dependencia del Presidente del Gobierno que colabora con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Además, a esta Agenda de nivel nacional se han unido otras de ámbito autonómico aprobadas por Andalucía, Cataluña, Extremadura o País Vasco, y local (A Coruña, Málaga o Murcia)95.
Por su parte, la Red Española de Ciudades por el clima96 es una sección de la FEMP que integra a ciudades comprometidas en la lucha contra el cambio climático. Se crea como una herramienta de apoyo técnico para los entes locales, facilitando el intercambio de experiencias, la colaboración en proyectos conjuntos con varios municipios, realizando acciones de sensibilización y formación, dando apoyo técnico a los gobiernos locales, etc. Integra a más de 300 gobiernos locales. Entre sus ámbitos de actuación figuran la energía, la movilidad, los residuos y la huella de carbono o la edificación.
En el ámbito de la planificación, el Plan Nacional de Acción de Eficiencia Energética 2017-2020 recoge las medidas adoptadas y previstas para un uso eficiente de la energía, entre las que figuran algunas que afectan directamente a los entes locales. Entre ellas, cabe citar: las relativas a la eficiencia energética en la edificación; a estrategias de desarrollo urbano sostenible; relacionadas con el alumbrado exterior; con la contratación eficiente; con el sector del transporte; y con las redes urbanas de calefacción y refrigeración eficientes97. Más recientemente, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030 agrupa las acciones en materia energética derivadas del fomento de las energías renovables y de la eficiencia energética. La labor que corresponde a los entes locales en la implementación de este Plan se deduce de su contribución a la eficiencia energética en el transporte (se prevé que las ciudades de más de 50.000 habitantes limiten al tráfico determinadas zonas respecto de vehículos más contaminantes, a partir de 2023); de su consideración, junto a los ciudadanos, como verdaderos protagonistas de la transición energética (facilitando el uso de las energías renovables; apostando por la movilidad sostenible, en especial en entornos urbanos), favoreciendo el vehículo eléctrico y sus sinergias con el autoconsumo y las energías renovables. En concreto se apela al trabajo conjunto de la Administración estatal, IDAE, CCAA y entes locales para el despliegue del vehículo eléctrico y a los incentivos económicos en la materia.
Sin embargo, el verdadero papel que corresponde a los entes locales en materia de sostenibilidad energética lo debemos buscar a nivel normativo, desentrañando los mecanismos, competencias y funciones que la legislación sectorial le atribuye en este ámbito. Sin embargo, el análisis de la intervención que pueden ejercer los entes locales en materia de sostenibilidad energética resulta complejo por dos motivos. En primer lugar, porque se carece de una legislación básica que regule el fomento de las energías renovables y la eficiencia energética o la movilidad sostenible, sectores que –como hemos visto– la UE considera claves para avanzar hacia la sostenibilidad energética. En segundo lugar, y consecuencia de lo anterior, porque son muchos los sectores en los que los entes locales pueden intervenir favoreciendo un uso más sostenible de la energía (rehabilitación urbana, urbanización, movilidad, iluminación exterior, edificios públicos…).