Читать книгу Observatorio de los contratos públicos 2020 - Jose María Gimeno Feliu - Страница 25

Los servicios basados en la inteligencia artificial, así como otras tecnologías innovadoras en el tratamiento de datos, tienen un enorme potencial para promover la transparencia, la rendición de cuentas y para cerrar espacios a prácticas corruptas. La transparencia en un contexto de datos abiertos (open data) sirve al principio de buena administración, refuerza el principio de igualdad de trato y asegura con ello la eficiencia en los procedimientos de adjudicación contractual84.

El potencial de las nuevas tecnologías digitales en el ámbito de la contratación pública se revela especialmente valioso en la detección de fraudes tras el establecimiento de señales de alerta que indican riesgos de fraude, conflicto de intereses u otras irregularidades. La comprobación de la información contenida en las bases de datos de los registros mercantiles, las bases de datos para la verificación de los contratos de trabajo entre personas físicas y jurídicas, los registros públicos y cualquier otra información pertinente de la que dispongan las instituciones de la UE y las autoridades nacionales podrían ser herramientas valiosas para prevenir, por ejemplo, las situaciones de conflicto de intereses.

También podrían utilizarse herramientas de prospección de datos, como la herramienta ARACHNE desarrollada por la Comisión y que detecta, sobre la base de un conjunto de indicadores de riesgo, los proyectos, los beneficiarios, los contratos y los contratistas que podrían ser susceptibles de estar en situación de riesgo de fraude, conflictos de intereses e irregularidades85.

En clave nacional, y como destaca MIRANZO DÍAZ, en la Comunidad Valenciana encontramos la implementación de un programa por el que, a través de sus algoritmos deterministas, se analizan los datos de la actividad de compra pública de las Administraciones a los efectos de estimar o evaluar el riesgo de corrupción en cada uno de los contratos celebrados y, sobre la base de ello, dirigir la actividad de sus entes fiscalizadores86.

Estos indicadores de riesgo no implican que se haya producido o pueda producirse una situación de fraude o irregularidad, pero alertan al personal del órgano de contratación de que una determinada situación debe ser objeto de seguimiento y control con la debida diligencia. Esta “reserva de humanidad”87 me lleva nuevamente a subrayar la importancia que tiene la profesionalización de la contratación pública para garantizar el éxito de los retos presentes y futuros88.