Читать книгу Réplicas - Luz Larenn - Страница 9
ОглавлениеAquel era el único sitio en el que el olor a pasto se percibía distinto.
No había manera de que alguien allí pudiera disfrutar de la frondosa y prometedora naturaleza que asomaba tímidamente para dar inicio a la incipiente temporada estival.
Los pasados meses habían resultado devastadores y, a pesar de todo, allí parecía comenzar a renacer la vida.
Menuda ironía, aunque tendría sus motivos para ser considerado suelo sagrado.
Cada noche el guardia hacía sus rondas poco antes de la hora de cierre y no había vez en que no se topara con aquella silueta debajo del roble europeo, inmóvil, observando un punto fijo en la insípida lápida de suelo.
La intriga finalmente llegó a su clímax entrada la madrugada. Con una pequeña linterna reflejó el cemento gris. Era de las comunes y corrientes, sin bordes esculpidos ni flores talladas. Como cada vez que deducía que se había tratado de una muerte joven, con un gran pesar, se hizo la señal de la cruz.
Siempre había sido creyente, pero mucho más desde que trabajaba allí.
Giró, decidido a regresar a su puesto, imaginando qué sería de la vida de aquella jovencita cuya vida le había sido arrebatada. Pocos segundos lo separaron de recordar su caso. Después de todo, no había canal de noticias o periódico en el que no hubiera aparecido.
Juliet Atwood, a quien cada noche la visitaba una sombra.