Читать книгу Estudios Interdisciplinares de género - Marta Del Pozo Pérez - Страница 83
V. CONCLUSIONES
ОглавлениеLos tributos, y en especial los impuestos, son un medio idóneo para la consecución de objetivos extrafiscales, uno de los cuales es el logro de la igualdad material de las mujeres promoviendo su acceso al mercado laboral.
El IRPF desempeña un importante papel como herramienta de los poderes públicos para reducir y, en última instancia, eliminar la brecha de género en el ámbito laboral. A estos efectos, beneficios fiscales como las deducciones en la cuota íntegra son uno de los medios empleados y, entre ellas, concretamente las deducciones por autoempleo o incorporación al mercado laboral y para la conciliación de la vida familiar.
Conviene advertir, por otro lado, que esos beneficios fiscales son de aplicación general, es decir, no están concebidos de forma específica para las mujeres, aunque pueden generar indirectamente unos efectos muy favorables para su incorporación al mercado laboral.
Las deducciones para la conciliación familiar merecen, con carácter general, un juicio favorable; así ocurre con las previstas para el cuidado de hijos pues, al condicionar su aplicación a que ambos miembros de la pareja ejerzan un trabajo remunerado, constituyen sin duda un estímulo para la incorporación de la mujer al mercado laboral.
Las deducciones para autoempleo o incorporación al mercado laboral también suscitan, en una primera aproximación, una opinión favorable. Sin embargo, debe objetarse que su escasez (sólo las prevén dos CCAA) y los requisitos para su aplicación (reducidas al ámbito rural o con limitación de edad para su aplicación) disminuyen su efectividad.
Como aspectos negativos de la política de deducciones en general cabe señalar su carácter limitado y su heterogeneidad. La creación exclusiva por las CCAA de estas deducciones implica la obvia limitación territorial de sus efectos, introduciendo una discriminación entre ciudadanos por razón de su lugar de residencia. A esto debe añadirse la heterogeneidad: no todas las deducciones son iguales y hay una diversidad de regímenes jurídicos, con requisitos y condiciones diferentes en función del territorio. Simplemente basta fijarse en un solo dato como es el requisito de la edad para la aplicación de las deducciones por cuidado de hijos (en unas CCAA se cubren situaciones hasta los 14 años y en otras sólo hasta los 3 años, con edades intermedias en otros supuestos).
En fin, impulsar el acceso de la mujer al mercado laboral requiere que sea el Estado el que introduzca unas deducciones en el IRPF con este objetivo, de aplicación en todo el territorio nacional, y que las CCAA, atendiendo a sus peculiaridades, las adecúen dentro de unos límites comunes. Sólo así será posible el logro de unos resultados tangibles y no discriminatorios en el acceso de las mujeres al mercado laboral.