Читать книгу El Alfabeto del Silencio - R. M. Carús - Страница 32
La noble y prescindible función del dolor
ОглавлениеEl sufrimiento ha sido hasta ahora el detonante más frecuente para despertar de las ilusiones. Ello no implica que sea deseable, ni necesario, ni mucho menos imprescindible, ni que se recomiende buscarlo para salir del sueño, ni que quien se lo inocula o lo espolea en otros no esté contribuyendo al caos del mundo sin pretenderlo.
El dolor no cura, solo produce más dolor y más ilusión. Hasta que se hace insoportable e impulsa al doliente a despertar. Quienes comienzan a ver, por lo general previamente pasan por un periodo oscuro. Cuando la confusión fabricada por el pensamiento circular se hace insoportable, el sufriente resuelve encontrar una vía de salida y no cesa hasta encontrarla.
Paradójicamente el sueño cuenta con un mecanismo autodestructivo instalado en su interior: cuando el dolor activa la determinación a renunciar a él, comienza el camino de vuelta, un camino diferente y adaptado a cada Ser. Por eso el sufrir cumple una noble, aunque muy prescindible función: empujar hacia la lucidez.
Cada vez que sufras, agradece tu dolor y descubre hacia dónde te guía, pero al mismo tiempo recuerda que no es necesario. Esas punzadas son evitables. No hace falta esperar a su aparición para despertar. Pueden ser utilizadas como alarmas una vez que rechinan, mas, por favor, no esperes a su aparición. Si lo haces antes, te ahorrarás a ti y a quienes te rodean una enorme cantidad de dolor innecesario.
He aquí una manera de comenzar a despertar sin dolor.