Читать книгу En sintonía con tu ciclo femenino - Алиса Витти - Страница 36
El secreto cíclico: utiliza tu segundo reloj
ОглавлениеDespués de casi dos décadas trabajando con mujeres que padecen crisis hormonales y que se esfuerzan por progresar en sus carreras, relaciones y maternidad, he observado que, en gran parte, su lucha se debe a que no tienen apenas en cuenta su segundo reloj. Sincronizar tu ciclo no solo te ayudará a superar tus problemas con el periodo, sino que será el pilar gracias al cual podrás medrar en todas las áreas de tu vida. Cuando cambias tu comprensión sobre tu bioquímica corporal y empiezas a incorporar tu segundo reloj, puedes dejar de esforzarte tanto para seguir creciendo o cosechando, dejar de gestionar el tiempo cronológico y empezar a perseguir tus metas, de una manera sostenible, que te ayude a sentir tu poder personal y tu confianza en ti misma. Y cuando afrontas la vida a tu propio ritmo, encuentras espontáneamente tu camino hacia el rendimiento óptimo, que te ayuda a generar energía y mejorar tu salud y tu bienestar, en vez de agotarte. Despiertas tu creatividad, experimentas más placer en tus relaciones y te sientes más realizada.
Reconocer lo valioso que es tu segundo reloj y lo que ha supuesto tu desconocimiento de él para tu salud física, emocional e incluso espiritual puede ser descorazonador. O bien puede suscitar tu entusiasmo y tu esperanza, al saber que hay una respuesta clara a tu pregunta silenciosa: «¿No hay una forma mejor?». Tal vez tengas una reacción visceral –positiva o negativa– a esta información. Te aconsejo que intentes canalizar estos sentimientos en una nueva forma de vivir, basada en los hechos científicos que envuelven a tu biología. No has de esperar a que se produzca un gran cambio a nivel social para beneficiarte de tus ritmos, ventajas y talentos naturales. Puedes empezar hoy mismo a dirigir tu brújula hacia tu verdadero norte y sincronizar tu ciclo mensual con tus ritmos naturales. Sé que puede parecer una montaña hacer los cambios tú sola; para ello he creado herramientas gratuitas donde puedes entrar en el FLO con toda la ayuda que necesites en www.IntheFLObook.com/bonus.
Recuerda que encontrar tu camino hacia hacer menos, conseguir más y ser más feliz no te afecta solo a ti. Cada vez que te tomas el espacio que necesitas en tu vida, por ejemplo, permitirte tachar algo de la lista, darte permiso para descansar y recuperarte después de una temporada ajetreada, o planificar tu día de acuerdo con tu energía, no con tu tiempo, sana tu alma y elimina los condicionamientos sociales. Además supone un ejemplo para otras mujeres, hermanas, amigas e hijas. Al compartir nuestros conocimientos sobre nuestro cuerpo, podemos construir una comunidad global de mujeres que viven en armonía con su bioquímica. Y esta reivindicación femenina seguirá creciendo hasta que la revolución sea innegable.
ENTRAR EN EL FLO
¿Quieres empezar a practicar el arte de hacer menos y conseguir más y administrar tu energía para sintonizar el FLO? Prueba estos sencillos consejos cíclicos:
1 Revisa cómo te ha ido el día antes de acostarte: ¿cómo estás de energía? ¿Estás agotada, exhausta o sin vitalidad, como si hubieras hecho una sesión de ejercicio intenso?
2 Revisa cuántas veces has dicho sí cuando en realidad querías decir no. Saber cuáles son tus límites es un problema cuando tú no tienes cabida en tu propia agenda.
3 Elimina algo de tu lista sin caer en la tentación de sustituirlo por otra cosa.
4 Atrévete a no hacer nada durante media hora o permítete algún pequeño placer: sal a dar un paseo, haz una llamada o ponte al día con una amiga.
5 Enumera tres cosas que puedes hacer además del trabajo.
6 Cuándo alguien te pregunte «¿cómo estás?», intenta responder con algo que refleje tus emociones: «Hoy me siento de maravilla» o «Me siento con las pilas cargadas», no la respuesta típica de: «Estoy muy ocupada».
* La etapa de sueño REM, denominada así debido al movimiento constante de los globos oculares bajo los párpados (rapid eye movement), se caracteriza por tener una alta actividad cerebral, muy similar a la que tenemos en el estado de vigilia.
** ¡Eh!, ¿a quién estoy engañando? Marca todas las casillas. (N. de la A.)