Читать книгу ¡Aquí los jóvenes! Frente a las crisis - Gerardo Gutiérrez Cham - Страница 13
Pacto por la vida
ОглавлениеEsta fue una acción destinada a crear un mandato popular y un compromiso comunitario por la vida que se desarrolló como una “votación simbólica” en la localidad de Ciudad Bolívar. La Red Juvenil e Infantil de Promotores de DDHH, una organización social que promovió activamente la formación de gestores de derechos humanos y la formación de redes de organizaciones, fue una de las protagonistas de esta acción. La Red Juvenil e Infantil de Promotores de DDHH desarrolló un trabajo, principalmente, en los centros educativos de la localidad cuyos principales objetivos eran el promover la cultura del respeto de los derechos humanos y construir liderazgos de jóvenes, niñas y niños (La Red Juvenil e Infantil de Promotores de DDHH 2005).
El evento que motivó la acción fue el asesinato, en el 2005 en Ciudad Bolívar, de una escandalosa cifra de jóvenes, unos 500 de acuerdo con las organizaciones de derechos humanos. A través de la recolección de firmas apoyada por la Registraduría Nacional, 117,284 personas (de las 700,000 que viven en Ciudad Bolívar) votaron por un mandato para hacer de Ciudad Bolívar un territorio de paz que decía lo siguiente:
Los jóvenes ¡nos declaramos desertores! y enemigos de la muerte, de la muerte a mano armada, de la muerte entrenada, de las balas disparadas, de la violencia organizada y no organizada. ¡Nos declaramos prófugos! De los cerebros bien lavados, de la paz con muerto sin nombre, de las armas por encima del hambre. ¡Nos declaramos amantes de la vida! Nos declaramos defensores de los derechos humanos, y del desarme, constructores de la cultura de no violencia (Peña 2008).
En los años siguientes, las cifras de homicidios bajaron, pero siguieron siendo muy elevadas. En el 2006 se registraron 126 homicidios. Esta acción le permitió a la Red Juvenil e Infantil de Promotores de DDHH participar en múltiples reuniones con autoridades y, además, convocar a más jóvenes a la red. En 2007, el alcalde Luis Eduardo Garzón se acercó a esta organización y creó una alianza con otros 12 alcaldes del país para reglamentar el porte de armas.
Así, los integrantes de la Red Juvenil e Infantil de Promotores de DDHH de Ciudad Bolívar se convirtieron en ejes de una política de desarme en las demás localidades de la ciudad que les permitió promover otras acciones de éxito, tales como: el Toque de tambores por la vida y el desarme, la Cadena humana por la vida y el desarme, Nosotros también tenemos derecho a la Educación Superior (Nieto 2014).