Читать книгу Orígenes y desarrollo del fútbol en el Uruguay - Juan Carlos Luzuriaga - Страница 21
III EL SURGIMIENTO DE LOS CLUBES:
LA MATRIZ BRITÁNICA Los primeros clubes: críquet y remo, 1860-1890
ОглавлениеLa práctica de los deportes modernos partió de la colectividad británica. Su difusión en la sociedad uruguaya siguió la misma lógica que en Gran Bretaña y en otros países: desde las elites, en cascada, hacia el resto de la población.
En tiempos de la Guerra Grande se registraron los primeros intentos de actividad deportiva a través de residentes ingleses en Montevideo, pero se debió esperar hasta la década del sesenta para ver el surgimiento de las primeras entidades estables.
El Monte Video Cricket Club (MVCC), fundado el 18 de julio de 1861, tuvo un papel clave en el desarrollo de los deportes en el país. Formado por sportsmen británicos, se dedicó al críquet, aunque no desdeñó la práctica del rugby y del fútbol. Fueron sus colores amarillo y azul a franjas horizontales en críquet, fútbol y rugby, con la variante de camisa amarilla con mangas azules. En los años ochenta adquirió para sus actividades un campo al que sus propietarios denominaron The English Ground, ubicado donde hoy está el Hospital Militar, zona conocida como La Blanqueada. Ese campo —una hectárea rodeada de cercos— fue mejorado con un rancho y un pequeño palco. En los alrededores había numerosas quintas y chacras.
El 8 de mayo de 1874 surgió una nueva institución deportiva de residentes británicos, un club de remeros: el Monte Video Rowing Club. Algunos de sus fundadores estaban relacionados con las actividades del mar y del puerto, y otros eran ya socios del Cricket Club. Este último había importado, por la época de la aparición del Rowing, elementos para la práctica de rugby y fútbol. Como muchos recordarían décadas después, el primer partido entre estas instituciones se jugó en 1878.
En diciembre de 1880 una publicación interna del Rowing Club informó que el 14 de ese mes se disputarían en La Blanqueada unos Juegos Atléticos. Incluían carreras de 120 y 130 yardas, cinchadas de cuatro contra cuatro y finalmente se llamaba a patear el football (dropkicking the foot ball), lo que sugiere que jugarían rugby. En junio del año siguiente se anunció en el Eco del Rowing un partido para las tres de la tarde del jueves 16, entre los socios del Rowing y del Cricket. El clima de camaradería y el propósito social son claros en toda la nota.
La revancha de este match fue disputada dos semanas después, el 29 de junio. Las noticias señalan la presencia de numerosa concurrencia femenina pese al mal tiempo, así como la jerarquía de los árbitros, «el honorable ministro de S. M. Británica y el simpático caballero Mr. Chevallier Boutell». (En todas las citas se ha actualizado la acentuación.)
El MVCC venció al Rowing por 1 a 0 en el primer cotejo y por 2 a 0 en el segundo. El score corresponde a un partido de fútbol actual y también al que se estilaba en el rugby de esos años, distinto al de nuestros días, tal como lo señaló oportunamente Ceibal Regules, historiador de ese deporte en nuestro país.
La agenda se adecuaba al clima y la comodidad de los players. El críquet se jugaba de diciembre a marzo, y el fútbol, de febrero a octubre. Estas actividades estaban circunscritas a los británicos, fueran residentes o visitantes.