Читать книгу Las políticas sociales que vendrán - Monica Campos Carrau - Страница 9

I. Introducción

Оглавление

Este capítulo desarrolla la idea según la cual la subjetividad y la institucionalidad son cualidades inherentes e inevitables de las políticas, en particular de las PS por su doble papel: acometer la organización de la respuesta a los problemas sociales y contribuir a la construcción de la sociedad. Se parte de un acontecimiento global que presenta las PS con dificultades y a los Estados fuertes con capacidad de Universalizar la Renta Básica. Estos dos elementos confluyen en la idea programática de una gobernanza con identidad y sostenibilidad que refleje un modo propio y singular de resolver problemas y generar instituciones que los atiendan frecuentemente.

Con diferentes tonos, los enunciados de los expertos en políticas sociales (PS), servicios sociales (SS) y asistencia social (AS) coinciden –globalmente hablando– en que arrastran décadas de incapacidad institucional para afrontarlas y a ello suman las trasformaciones estructurales de las necesidades sociales y los cambios drásticos en su gobernanza especializada y generalista (CEPAL, 2020; DE SENA, 2020; IGLESIAS, 2020; JENSEN 2021; LEISERING, 2021; VANHERCKE, 2021). Una continuidad que domina, al menos, los últimos 25 años y que desde febrero de 2020 se está reforzando más (LORENTE, 2011). La preocupación por la subjetividad y la institucionalización surge de consultorías e investigaciones en México, Colombia y España comprometidas con la modernización de las PS (contra la pobreza, reconocimiento de la diversidad cultural, mejoramiento de la justicia, control de la gestión estatal, protección a la infancia, prevención bioética sociosanitaria y vivienda), agenciada por estancias globales desde la década del 80 del siglo XX hasta la fecha. El estudio, inédito hasta ahora, forma parte de una obra más amplia en curso.

La subjetividad y la institucionalidad son descartadas de los asuntos públicos que definen las PS por abstractas y no agendables y, al inquietar la sensibilidad de quienes tratan de solucionar problemas, ayudan a ello; pese a esas razones una y otra son importantes para las PS (ELLISON & HAUX, 2020). Si las crisis redefinen entidades, sectores, políticas, usuarios, relaciones, servicios e instrumentos, también lo harán con la subjetividad y la institucionalidad y se necesita saber cómo. Los trabajadores sociales, sanitarios y económicos demandan un cambio de lentillas y de utensilios que es preciso ofrecer. Esta es una tentativa cultural (BLOM, 2021). El cambio es complejo de por sí, y difícil mientras no se aborden los juegos sutiles pero implacables de la hegemonía cultural, los códigos interpretativos y la eficacia simbólica del sistema que permitan afrontar los llamados “espíritus de Estado” que se tienen conjurar en cada actuación social1. Esta es una tentativa política (en sentido no partidista). (ANTON, 2021; BOURDIEU, 1995; HOFFMANN, 2021).

La cultura política para las PS no es una consigna, es una asignatura pendiente para garantizar mejor destreza política en su gestión y materialización. Es infrecuente encontrar un programa o un libro sobre ese asunto, y con ese indicio basta para intentar proveer un marco que ayude a comprender, para responder qué cosas impiden a los DDHH, los estados sociales de derecho, las estrategias de sostenibilidad, la digitalización humana y la cooperación internacional que se realicen eficazmente generando mejores condiciones de vida para todos (ELLISON & HUAX, 2020).

El método de exposición sigue una línea lógica: las políticas sociales (PS) son artefactos complejos articuladores de campos de posibilidades políticoculturales para intentar satisfacer necesidades sociales mediante la organización pública de respuestas basadas en principios ético-políticos propiciando subjetividades e institucionalidades y demandando una pluralidad de gobernanzas para coadyuvar en la construcción de la sociedad, que se entiende diversa. Se entiende entonces que la interacción conocimiento-acción en la vida cotidiana es sustantiva en las PS porque crea realidades concretas de los seres humanos (anhelos, relaciones, lenguajes, modos de comunicar y hábitos sociales); revisa la capacidad de los Estados y de las naciones para alcanzar los propósitos humanistas de sus culturas; y, tiene en mente todas las generaciones de derechos humanos y sus adecuaciones constitucionales, culturales y cosmovisionales.

Las políticas sociales que vendrán

Подняться наверх