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IX
Оглавление21 de noviembre
Señor tío:
Insisto en que Ud. no debería albergar desconfianza acerca de mis sentimientos por Dorinda. Como ya le he dicho, le reitero hoy que tales sentimientos son verdaderamente sencillos y limpios. Ella se me antoja de lo poco sano que se halla en Lobosandaus. Y, si se me permite la sinceridad que es debida a persona que, como Ud., tan bien conoce la flaqueza y las aberraciones de los humanos, tanto a causa de una experimentada administración del sacramento de la penitencia cuanto en razón del estudio riguroso de la Moral, le aclararé que tampoco hay peligro de que yo sea o llegue a ser objeto del deseo pecaminoso de Dorinda, hoy por hoy. No hay duda de que la hermosa casadita se encuentra bajo el dominio diabólico de Obdulia, quien, desde que salió de su enfermizo retiro, muestra un decidido control varonil sobre su cuñada. La ama, sin duda, con amor nefando, con furia ciega de pasión invertida. Dorinda, femenil, cohibida, se deja conducir a un vicio que tal vez ocupe el sitio del legítimo amor del cónyuge ausente en Portugal. Ya no tiene ojos para mí, Dorinda. El escándalo ha estallado en todo el concejo de Nigueiroá, llegando la noticia incluso a Bande, desde que el viejo Hixinio las encontró, una a caballo de la otra, como vacas toriondas, en un rincón del pajar donde ellas (supongo que Obdulia) habían hecho su nido en la avena, y las ahuyentó a escobazos gritando como un endemoniado y llamándolas marimachos y cerdas.
Creo tranquilizar, con el repugnante relato que acabo de hacerle, su preocupación por mi conducta. Sin embargo, intuyo que en este asunto debe de haber algo más de lo que se ve y se oye. Un silencio de hielo ha tomado cuerpo en Lobosandaus después de los primeros comentarios, y en casa Aparecida todos se muestran indiferentes, aunque pensativos y serios. Tengo la impresión de que andan preocupados por cosas más hondas y más misteriosas que un simple, aunque sórdido, arrebato lésbico, si Ud. me permite la referencia humanística y la reiteración esdrújula.
A la espera de sus atentas noticias, lo saluda muy respetuosamente su sobrino.