Читать книгу El gobierno de la función legal en las organizaciones - Miguel González Inés - Страница 28

El Consejo de Administración es, en último término, el órgano responsable de aprobar la estrategia de la empresa y velar porque esta refleje adecuadamente, tanto en su contenido como en su ejecución, los valores que integran la cultura corporativa. El Director de Asesoría Jurídica, habida cuenta del alcance de su función, y las expectativas de integridad, independencia y valores éticos que giran en torno a él, es un aliado natural del Consejo de Administración a estos efectos.

Muy pocos Directores de Asesoría Jurídica reportan directamente al Consejo de Administración, si bien un número significativo acude asiduamente a sus reuniones, algunos en calidad de Secretario del Consejo. Independientemente de la fórmula que se adopte, es necesario que el Director de la Asesoría Jurídica tenga acceso directo al Consejo de Administración, sin necesidad de contar con la autorización previa del Consejero Delegado en caso de desacuerdo. Ello permite preservar su independencia dentro de la organización y refuerza su función como asesor no del Consejero Delegado o del comité de dirección, si no, a fin de cuentas, de la compañía en su conjunto. Con ello, además, se contribuye a eliminar posibles atisbos de conflicto de interés resultantes del reporte al Consejero Delegado y la pertenencia al Comité de Dirección.

Es más, la existencia de una relación entre el Director de la Asesoría Jurídica y el Consejo normalmente será una herramienta muy poderosa para reforzar el nivel de influencia del Director, y su Asesoría Jurídica, en las decisiones de negocio y, en última instancia, en la estrategia de la empresa. Cuando el negocio es consciente de que el Director de la Asesoría Jurídica puede escalar cuestiones controvertidas o de alto riesgo al Consejo de Administración, de manera independiente, es más, que ello está entre las expectativas del Consejo respecto de la función del Director de Asesoría Jurídica, se refuerza de manera natural los incentivos para que el negocio lo involucren desde el inicio en dichas cuestiones y sea más proclive al consenso en la búsqueda de eventuales soluciones.