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«de un área libre de coronavirus»
ОглавлениеYa casi de noche, llegué al peaje antes del ingreso al partido de General Pueyrredón. Pagué los ochenta mangos y crucé las cabinas. Del otro lado estaba el operativo policial. Había varios autos estacionados oblicuamente en la banquina y subidos al césped de la rotonda con el cartel grande que dice «Mar del Plata».
—Buenas noches, caballero. ¿De dónde viene? —me preguntó un hombre vestido de civil junto a un policía uniformado.
—Vengo desde Merlo, provincia de San Luis.
—¿Tiene el permiso de circulación nacional?
—Sí, ya se lo doy.
—No me lo dé, solo muéstremelo. Bien. Bueno, caballero, va a tener que cumplir una cuarentena de catorce días antes de poder circular por la ciudad. Desde esta mañana Mar del Plata retrocedió a fase 3 de la cuarentena. Estacione la camioneta por allá —me señaló un espacio entre autos, que estaban siendo atendidos por varios uniformados más.
—No, pero yo no tengo catorce días…
—Estaciónese allá, por favor. Estamos cortando la circulación acá.
Moví la camioneta hasta donde me indicó el hombre, conteniéndome la angustia. Una mujer policía se acercó a la ventanilla y me hizo señas de que bajara el vidrio. Tenía una carpeta en la mano en la que hacía anotaciones. Venía de hablar con el hombre que me había dicho de la cuarentena y que ahora atendía a otros vehículos.
—Señor, dígame la dirección en la que va a cumplir el aislamiento. ¿Qué le pasa? ¿Se siente bien? ¡No, señor, no se ponga así! Son tiempos difíciles para todos… ¿Qué le pasa? ¡Tranquilo! ¡Vamos! Tranquilícese, señor. Cuénteme. ¿Qué pasa?
—Mi papá está muy grave. Vengo desde lejos para verlo… —y la parte superior del barbijo ya tenía la aureola de las lágrimas que, sin que pudiera hacer nada al respecto, brotaban de mis ojos.
—Ay… lo lamento mucho… —la mujer policía también empezó a llorar—. No se preocupe. Mire, la verdad es que usted viene de un área libre de coronavirus. Porque en San Luis no hay, o hay muy poco, ¿cierto? Yo creo que con eso sería suficiente. Si usted viniera de un área infestada… bueno. Pero no. Mire. Vamos a hacer así. Vaya, nomás. No se preocupe. Vaya, vaya. Y dele un fuerte abrazo a su papá.