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SALMO 12

PENSAMIENTOS BUENOS EN TIEMPOS MALOS

Título y tema: Este Salmo lleva por título: “Al músico principal; sobre Seminit. 1 Salmo de David”, un título idéntico al del Salmo 6, con la excepción de que aquí se omite el término “Neginot”. Por tanto, no tenemos mucho que añadir, salvo referir al lector a lo que ya hemos comentado respecto al título del Salmo 6. Puesto que “Seminit” significa «el ocho», la versión arábiga concluye que este salmo tiene que ver con fin del mundo, que tendrá lugar en el octavo día y que, por tanto, tiene que ver con la venida del Mesías.2 Sin dar por válida una interpretación tan extravagante, es cierto que podemos leer este cántico de fe y lamento a la luz de la segunda venida de Aquel que quebrantará al opresor. Pienso, por tanto, que el tema de este salmo se esclarecerá a los ojos de la mente si lo titulamos: PENSAMIENTOS BUENOS EN TIEMPOS MALOS.3 Se cree que David lo escribió mientras él y sus partidarios eran perseguidos por Saúl.

C. H. SPURGEON

Estructura: En los versículos uno y dos (12:1-2), David se lamenta delante del Señor por la deslealtad reinante en su época; en los versículos tres y cuatro (12:3-4), anuncia el juicio divino sobre los traidores soberbios; en el versículo cinco (12:5), es Jehová mismo quien hace tronar su ira contra los opresores. Y al escuchar esto, el Músico Principal canta dulcemente en los versículos seis y siete (12:6-7), la fidelidad de Dios y el cuidado que Él tiene de su pueblo; concluyendo el cántico en el lamento de nuevo en el versículo ocho (12:8), al contemplar la abundante maldad que le rodea.4 Aquellas almas santas que moran en Mesec y acampan en las tiendas de Cedar,5 podrán leer y entonar estas estrofas sagradas con sus corazones en completa armonía con su melodía dual que combina el lúgubre lamento con la sublime confianza.6

C. H. SPURGEON

Versión poética:

SALVUM ME FAC DOMINE, QUONIAM DEFECIT SANCTUS

Sálvame ya, Señor, porque en la tierra

de santidad no queda el menor rastro,

y hasta la buena fe de las palabras,

se ha desterrado del comercio humano.

Trabajan con ardor para engañarse

unos a otros con discursos falsos,

su boca como sierpe venenosa

a su prójimo muerde sin reparo.

Otras veces los dardos de sus puntas

salen por labios dulces y enmielados,

y por fin con sus dobles corazones

meditan negro cuando dicen blanco.

Que el Señor los confunda y extermine,

que disipe y destruya a estos falsarios,

que orgullosos están, porque en el arte

de la impostura se imaginan sabios.

Se dicen a sí mismos: la elocuencia

nos acarrea honor, produce aplauso,

nuestra lengua combate por nosotros,

¿y quién podrá contra ella dominarnos?

Pero dice el Señor: seré yo mismo

quien la dominará; ya me levanto,

porque no sean el pobre ni el humilde

víctimas tristes de su infiel engaño.

Yo los libertaré de sus perfidias,

no obstante su saber los pondré a salvo

de su lengua infernal, yo lo aseguro,

pues nadie a mi poder puede estorbarlo.

Las palabras de Dios son verdaderas,

sus discursos más puros y más santos

que la plata que pasa siete veces

por el crisol, y se ha purificado.

Así espero, Señor, que nos defiendas

de sus agudos y punzantes labios,

y ojalá que nos libres para siempre

de esta pérfida raza de malvados.

Pero ¡ay de mí! que veo en todas partes

que estos inicuos nos están rodeando:

adoro tus secretos, pues permites,

que en este mundo se multipliquen tanto.

DEL “SALTERIO POÉTICO ESPAÑOL”, SIGLO XVIII

Vers. 1. Salva, oh Jehová, porque se acabaron los piadosos; porque han desaparecido los fieles de entre los hijos de los hombres. [Salva, oh Jehová, porque se acabaron los compasivos; porque han desaparecido los leales de entre los hijos de los hombres. RVR] [Salva, Señor, porque el piadoso deja de ser; porque los fieles desaparecen de entre los hijos de los hombres. LBLA] [¡Salva, oh YHVH, porque se han acabado los piadosos! Porque han desaparecido los leales entre los hijos del hombre. BTX] [Sálvanos, Señor, que ya no hay gente fiel; ya no queda gente sincera en este mundo. NVI] [Sálvanos, Señor, que ha desaparecido el fiel, no queda lealtad entre los seres humanos. BLP] [¡Auxilio, oh Señor, porque los justos desaparecen con rapidez! ¡Los fieles se han esfumado de la tierra! NTV]

Salva, oh Jehová.7 Una oración corta pero dulce, sugerente, adecuada y eficaz; válida para todas las ocasiones y tan útil en las contiendas como la espada de un ángel. Ainsworth8 nos dice que la expresión “Salva”9 tiene un sentido muy amplio en el hebreo y significa también “ayúdame, líbrame, presérvame”, etc. Es por tanto una oración muy completa e instructiva. El salmista ve el peligro extremo en que se encuentra, porque más le vale a un hombre estar rodeado de leones que de mentirosos; se da cuenta de su propia incapacidad para tratar con semejantes hijos de Belial,10 porque “el que quiera tocarlos debe armarse de hierro y de hasta de lanza”;11 y, por tanto, se vuelve hacia el Ayudador todopoderoso, el Señor, que nunca niega la ayuda a sus siervos, y cuyo auxilio suple todas las necesidades. “Salva, oh Jehová”, es un recurso muy útil, una bengala de socorro que podemos lanzar al cielo en todas las situaciones de emergencia, bien sea en el trabajo, en el estudio, ante el dolor y el sufrimiento, en la lucha cotidiana, en la vida o en la muerte. Así como los navíos pequeños pueden navegar en puertos vedados a barcos más grandes que tienen un mayor calado; así también nuestras oraciones breves y peticiones cortas pueden navegar mejor cuando nuestra alma, amarrada por los vientos de la vida y los negocios cotidianos no puede ofrecer devociones más largas, y el arroyo de la gracia parece demasiado bajo en su cauce como para que flote en él una súplica más elaborada.

Porque se acabaron los compasivos.12 La muerte, la partida o la mengua de personas piadosas debería ser en la Iglesia un clarín de aviso que llame a más oración. Dicen que lo primero que hiede del pescado es la cabeza; de igual forma, cuando los fieles piadosos decaen, la comunidad entera se corrompe con rapidez. Aunque debemos ser cautos y no hacer juicios precipitados, pues Elías se equivocó al suponer que él era el único siervo de Dios que quedaba con vida, cuando Dios tenía miles en reserva.13 Los tiempos que vivimos siempre nos parecen los peores y más peligrosos, porque su proximidad nos permite ver fácilmente la maldad en todo su alcance, mientras que los problemas de siglos pasados, al estar más lejos, nos pasan desapercibidos. Y sabemos que en los últimos días “por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará”;14 por tanto debemos, cada vez más, olvidarnos de los hombres y dirigirnos al Señor de la Iglesia, por cuya promesa y con cuya ayuda las puertas del infierno no prevalecerán contra nosotros.15

Porque han desaparecido los fieles de entre los hijos de los hombres.16 Cuando la piedad desaparece, la fidelidad no tarda en seguir el mismo camino; sin el temor de Dios, los hombres no aman la verdad. La honestidad común deja de ser común cuando el agnosticismo y el ateísmo conducen a la impiedad. Cuando David escribía este versículo, tenía los ojos puestos en Doeg,17 y en los hombres de Zif y Keila;18 quizás recordaba el asesinato de sacerdotes en Nob;19 y los proscritos que se juntaron con él en la cueva de Adulam;20 y se preguntaba hacia dónde iba Israel, qué sería del pueblo sin el ancla de sus hombres piadosos y fieles.21 Pero aún en medio del desgobierno David no se avino a complots ni toleró conspiraciones sediciosas, sino que presentó súplicas solemnes; no se sumó a la multitud de los que hacían lo malo,22 sino que empuñó las armas de la oración para mantenerse firme y repeler los ataques impíos contra la virtud.

C. H. SPURGEON

Salva, oh Jehová. ¡Ya era hora de pedir ayuda al cielo! Saúl había ordenado a su guardia: “Volveos y matad a los sacerdotes de Jehová”,23 pecando así contra el Espíritu Santo24 (en la opinión de grandes teólogos). David, después de sentir una profunda tristeza por la matanza y sus causas: la información maliciosa de Doeg el edomita,25 junto con la pasividad de sus escasos amigos y la multitud de sus enemigos en la corte, todos conjurados contra él; se dirige a Dios pidiendo ayuda y abre abruptamente su oración con esas palabras: “Salva, oh Jehová”. La versión Arábiga26 traduce: “Líbrame con el grueso de tus fuerzas”, es decir, con todas tus tropas y tus mejores armas de guerra, porque: “El Señor es fuerte guerrero”.27

JOHN TRAPP [1601-1669]

“A commentary or exposition upon the books of Ezra, Nehemiah, Esther, Job and Psalms”, 1657

Salva, oh Jehová. De igual manera que una madre cuidadosa, al cruzar una calle por la que circulan carruajes a toda velocidad, agarra a su hijo de la mano o lo toma en sus brazos cobijándolo en su seno; o que la gallina, viendo al azor voraz sobre su cabeza, cloquea y junta a todos sus polluelos bajo sus alas; así también Dios, cuando tiene intención de azotar con calamidades una tierra, tiene por costumbre llamar antes a su presencia a sus amados, sacándolos del lugar de peligro. El Señor aparta del mal que está por venir a sus siervos escogidos. Así fue con Agustín, que fue llamado a la presencia de su Señor poco antes de que la ciudad de Hipona cayera en poder de los Vándalos28; así fue con Pareus29 llamado a su Patria celestial antes de que Heidelburg30 fuera saqueada; y así fue con Lutero, llamado a la casa del Padre antes de que Alemania se viera devastada por una sangrienta guerra.31

EDWARD DUNSTERVILLE

en un sermón predicado el 31 de Marzo de 1642 en el funeral de SIR SIMON HARCOURT [1603-1642]

Porque han desaparecido los fieles de entre los hijos de los hombres.32 Un hombre fiel, como un padre, íntegro, consejero, “sin ardid”: “¿quién lo hallará?”.33 Miremos de cerca. Mirémonos a nosotros mismos a la luz de estas palabras. ¿Creen nuestros amigos o prójimos que somos fieles? ¿Qué testimonio da nuestro trato diario? Por hacernos simpáticos y agradables, ¿no ocultamos a menudo lo que pensamos, no hablamos a expensas de la verdad? Muchos de nuestros halagos y parabienes a los demás ¿no son opuestos a nuestros verdaderos sentimientos? En la vida real se penalizan los delitos graves, pero se pasan por alto miles de ofensas menores,34 que rompen la pared entre el pecado y el deber, y que, juzgados desde la perspectiva divina, son en realidad pasos culpables en un terreno prohibido.35

CHARLES BRIDGES [1794-1869]

“A Commentary on Proverbs”, 1850

Porque han desaparecido los fieles de entre los hijos de los hombres. Para que pueda ser considerado “fiel”, un hombre debe ser ante todo fiel a sí mismo; fiel a Dios y fiel a los demás, particularmente a la Iglesia de Dios. Y esto es de suma importancia en los ministros del evangelio.

JOSEPH IRONS [1786-1852]

“The Song of Solomon, in Blank Verse”, 1840

Salva, oh Jehová, porque se acabaron los compasivos; porque han desaparecido los leales de entre los hijos de los hombres.

Reflexiona, pesimista, deja de odiar la vida,

y de querer marcharte a una playa desierta;

las rocas cercanas te ocultan la perspectiva general.

Pues en el Israel caído, hay corazones y ojos,

que día tras día piensan y oran lo mismo que tú;

no les conoces, pero su Creador sí les conoce.

Regresa, pues, al mundo, y no sientas miedo

de echar tu pan sobre las aguas,36 en la certeza

de que finalmente, con gozo lo recogerás. 37

JOHN KEBLE [1792-1866]

“The Christian year”, 1827

Vers. 1, 2 y 4. Echad un vistazo a nuestros mercados, nuestras ferias, nuestros negocios, nuestros tratos y contratos comerciales; nuestras bodegas, nuestras medidas, nuestras promesas, nuestras protestas; los trucos de la política y sus engaños maquiavélicos; las subidas de precios en todas las materias primas. Y decidme, luego, si el Salmo 12 no encaja al detalle con la situación político-social que se da en nuestros días, igual que encajaba en la época del hombre de Dios que lo escribió. Nuestra sociedad desborda el mismo fingimiento, las mismas artimañas, mentiras, engaños, astucias y sutilezas que llevaron al salmista a tener que gritar hastiado: “Salva, oh Jehová, porque se acabaron los piadosos; porque han desaparecido los fieles de entre los hijos de los hombres. Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón; hablan jactanciosamente y han dicho: Nuestros labios son nuestros; ¿quién es señor de nosotros?” 38

ROBERT WOLCOMBE39

A Glass for the Godly; containing many confortable Treatises to persuade Men from the love of this World, to the Love of the World to come”, 1612

Vers. 2. Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. [Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. RVR] [Falsedad habla cada uno a su prójimo; hablan con labios lisonjeros y con doblez de corazón. LBLA] [Hablan falsedades, cada uno a su prójimo, hablan con labios lisonjeros y doblez de corazón. BTX] [No hacen sino mentirse unos a otros; sus labios lisonjeros hablan con doblez. NVI] [Se mienten unos a otros, conversan con lengua aduladora y corazón doble. BLP] [Los vecinos se mienten unos a otros: se halagan con la lengua y se engañan con el corazón. NTV]

Hablan vanidad cada uno con su prójimo.40 Por su necedad, frivolidad y ausencia de valía, dicen cosas que no merece la pena escuchar; que en las que no se puede creer, porque son falsas y mienten; tampoco confiar, porque son aduladoras y partidistas; ni siquiera considerar, porque encandilan la vanidad del oyente hinchándolo de orgullo de sí mismo. Es triste cuando la adulación se pone de moda. «Habla bien de mí y hablaré bien de ti»41 reza un viejo proverbio escocés; ponme por las nubes, y te pondré por las nubes. A las personas honestas los cumplidos y halagos les resultan odiosos, porque saben que si los aceptan tendrán que devolverlos, y desdeñan tanto una cosa como la otra. Pero aquellos cuyo carácter está en bancarrota, semejantes transacciones les fascinan. Malos tiempos corren cuando todo el mundo siente la necesidad de adular y embaucar a su vecino.

Hablan con labios lisonjeros,42 y con doblez de corazón.43 Quien se afana en hinchar el corazón de otros, es porque en el suyo no alberga más que viento. Cuando alguien se esfuerza halagarme cara a cara, tan solo me está mostrando una parte de su corazón; la otra está renegrida en desprecio por mí, o ensuciada por el deseo de engañarme. La adulación es comportamiento habitual de una taberna donde la doblez es la anfitriona. Los chinos consideran que la persona con doblez de corazón es una persona abyecta y despreciable; y para ir seguros, mejor haríamos valorando así todas las adulaciones.

C. H. SPURGEON

Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. El celo fingido es igual que el barquero que fija la mirada en una orilla y rema hacia la otra: pretende que hace una cosa y tiene intención de hacer otra. Como el pretendido celo de Jehú por la gloria de Dios, cuando su verdadero objetivo era hacerse con el reino de su señor; y su celo al servicio de Dios no buscaba otra cosa que apoderarse del cetro.44 Así también el orfebre Demetrio alegaba profesar una gran devoción por la diosa Diana, pero su verdadero objetivo era garantizar sus ingresos y defender el gremio de su profesión.45 Tenemos en las filas cristianas muchos, demasiados, que alardean de santidad cuando en realidad sus corazones apuntan a otros fines;46 mas pueden estar seguros de que a pesar que logren engañar al mundo, y se destruyan a sí mismos, a Dios no le pueden engañar, porque Dios conoce los secretos de cada corazón.47

GRIFFITH WILLIAMS [1587-1673]

“Right Way to the Best Religion”, 1636

Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón.

¡Sin fe anda la Tierra, y sin fe los cielos

la justicia ha volado, y la verdad no existe!

VIRGILIO [70-19 a.C.]

“Eneida, Liber IV” 48

Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. El hombre, pues, no es más que simulación, mentira e hipocresía, tanto respecto a sí mismo como respecto de los demás. No quiere que se le diga la verdad; evita decirla a los demás, y estas disposiciones suyas, tan lejanas de la justicia y de la razón, tienen una raíz natural en su corazón.

BLAISE PASCAL [1623-1662]

“Pensées sur la religion et autres sujets”, 1669

Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. Nada como la religión y la fe para fabricarse un manto que siempre esté de moda, que sea provechoso: la librea49 perfecta con la cual el astuto puede servir a dos señores, a Dios y al mundo, y salir ganando. Le permite afirmar: «Sirvo a los dos, y de paso, a mí mismo prevaricando con ambos. Ante los ojos de los hombres, sirvo a Dios con mayor devoción que cualquier otro; lo cual me permite estar entre los mejores para perseguir y alcanzar mis objetivos, y con ello, me sirvo a mí mismo. Y en privado, sirvo al mundo; no con una devoción tan estricta, pero sí con mayor deleite; y satisfaciendo los deseos de sus siervos, busco también mis propios objetivos, y con ello, me sirvo también a mí mismo. ¿Quién frecuenta la casa de oración más que yo? ¿Quién cumple con los deberes cristianos antes que yo? Ayuno con los que ayunan, como con los que comen, y me entristezco con los que están de luto. No hay mano más generosa y abierta a la causa que la mía; y en las asambleas, nadie ora más largamente ni con más energía que yo. Así doy imagen de vida santa, se habla de mí como ejemplo y se proclama mi integridad; y así, atraigo parroquianos a mi negocio: mi mercancía está a buen precio, mis palabras merecen todo el crédito pues soy persona de fiar y mis recomendaciones se tienen en cuenta. Si soy avaro, se interpreta como austeridad; si soy mezquino, como prudencia; si me invade la melancolía, como piedad y devoción; si amo la diversión y el jolgorio, se entiende como regocijo y alegría espiritual; si soy rico, es por las bendiciones fruto de una vida piadosa; si pobre, se supone que por mi fidelidad y conciencia íntegra en los negocios; si hablan bien de mí, lo merezco por mi conducta santa; si mal, es fruto de la malicia de envidiosos. De modo que navego con todos los vientos, y consigo mis fines en todas las condiciones. El manto de la religión me mantiene fresco en verano, caliente en invierno, y esconde el zurrón de todos mis secretos y deseos carnales. Cubierto con él camino en público rodeado de aplausos; y en privado, puedo pecar sin temor a ofensa; procedo astutamente sin que nadie me descubra. Recorro mar y tierra para hacer un prosélito;50 y una vez lo hago, este me emula. En el ayuno defiendo a Ginebra, en las fiestas, a Roma51. Si soy pobre, finjo que tengo abundancia para salvaguardar mi crédito; si soy rico, aparento pobreza para evitar peticiones y evadir impuestos. Las ideas cismáticas son para mí las más provechosas, pues de ellas aprendo a divulgar nuevas doctrinas; y así me invitan a cenar tres veces por semana. Recurro a la mentira como estratagema para defender el evangelio; y justifico la opresión identificándola con los juicios de Dios ejecutados sobre los malos. Tengo la caridad por un deber extraordinario; por tanto, no la ejercito con frecuencia. Aquello que repruebo ante el público, para propio provecho, lo hago secretamente en casa para mi propio placer. Y, sin embargo, veo un escrito en mi corazón que hace desfallecer mi alma. Estas tristes palabras: “¡Ay de vosotros, hipócritas!”52».

FRANCIS QUARLES [1592-1664]

“Hypocrite’s Soliloquy” en “Judgement and Mercy for Afflicted Souls, or Meditations, Soliloquies, and Prayers”, 1646

Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. El mundo sostiene que la sociedad sería inviable si hubiera entre los seres humanos una sinceridad y franqueza perfectas; y que la convivencia se haría imposible si cada uno dijera abiertamente lo que bien le pareciera, como sucedió por un tiempo en Israel.53 El mundo es sin duda el mejor juez de su propia condición y forma de gobierno, por tanto, no debatiré la injuria de semejante afirmación. Pero, ¡qué imagen tan lamentable presenta nuestro edificio social, con sus paredes cubiertas únicamente por la argamasa de la adulación y la falsedad!

BARTON BOUCHIER [1794–1865]

“Manna in the heart or daily comments on the book of Psalms”, 1855

Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. Cuando preguntaron al filósofo Bion,54 qué animal consideraba el más dañino, respondió: «De todas las criaturas salvajes: el hombre tirano; y entre las domesticadas: el hombre halagador». Un amigo adulador es el enemigo más peligroso que podamos tener. Raleigh,55 que se había criado como cortesano, y era por tanto iniciado en el arte de la adulación, descubrió en carne propia el peligro y el poder de esta sutil forma de engaño, y afirmó: «Se dice que el adulador es en único animal que muerde mientras sonríe. ¡Pero distinguirlo entre los amigos es difícil, pues todos se muestran tan corteses y obsequiosos! Así como un perro se parece a un lobo, así se parecen un adulador y un amigo».

“The Book of Symbols”, 1844

Hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. El original hebreo dice literalmente: “con un corazón y un corazón”,56 es decir, con dos corazones: uno para la iglesia y otro para lo demás; uno para los domingos y otro para los días de entre semana; uno para el Rey y otro para el Papa. Un hombre que pudiera seguir viviendo sin el corazón sería una maravilla de la naturaleza, pero un hombre con dos corazones es un monstruo. Se dice de Judas que era un perfecto doble cara: «Un hombre con muchos corazones»;57 y leemos, en cambio, de los santos que habían creído que: “eran de un solo corazón”.58 Dabo illis cor unum.59 ¡Una bendición muy especial!

THOMAS ADAMS [1583-1653]

“The Holy Choice”, 1625

Habla mentira cada uno con su prójimo; hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón. Cuando los hombres cesan de ser fieles a su Dios, decepcionado quedará quien espere que permanezcan fieles los unos a los otros. La sinceridad primigenia acompaña siempre a la piedad primigenia en su huida de la tierra; y entonces, lo que regula la conducta humana son los intereses personales de cada uno, hasta el punto que un hombre no puede confiar en otro más allá de lo que alcancen sus intereses mutuos. Y, dicho sea de paso, a pesar de que muchos hombres no creen, pocos eligen administradores, sirvientes y tutores no creyentes; pues juzgan, y con razón, que los verdaderos cristianos son las únicas personas fiables a las que puedan confiar el cuidado e instrucción de aquello que más estiman: sus familias y sus bienes.

GEORGE HORNE [1730-1792]

“A Commentary on the Psalms in which Their Literal Or Historical Sense, as They Relate to King David, is Illustrated”, 1825

Vers. 3. Jehová destruirá todos los labios lisonjeros, y la lengua que habla jactanciosamente. [Arranque Jehová todos los labios lisonjeros, y la lengua que habla jactanciosamente RVR] [Corte el Señor todo labio lisonjero, la lengua que habla con exageración. LBLA] [¡Corte YHVH todo labio lisonjero, y la lengua que habla altanerías! BTX] [El Señor cortará todo labio lisonjero y toda lengua jactanciosa. NVI] [Que el Señor extirpe la palabra aduladora, la lengua que habla con arrogancia. BLP] [Que el Señor les corte esos labios aduladores y silencie sus lenguas jactanciosas. NTV]

Jehová destruirá todos los labios lisonjeros, y la lengua que habla jactanciosamente.60 ¿No será este versículo una alusión a los terribles castigos que los monarcas orientales solían infligir a los delincuentes? A los condenados por mentir o por traición les cortaban los labios o les arrancaban la lengua. Igual e infinitamente más terribles son los castigos del pecado.

C. H. SPURGEON

Jehová destruirá todos los labios lisonjeros, y la lengua que habla jactanciosamente. Cuando el Sol de la verdad descubra y disipe con el resplandor de su aurora toda sombra de hipocresía, aquellos que se deleitan engañando a los demás, serán finalmente defraudados.

GEORGE HORNE [1730-1792]

“A Commentary on the Psalms in which Their Literal Or Historical Sense, as They Relate to King David, is Illustrated”, 1825

Vers. 3, 4. Los orgullosos y aduladores serán finalmente destruidos por completo, pero entre tanto, ¡cómo se enojan! Bien los llamó el apóstol “olas furiosas del mar, que arrojan como espuma su propia vergüenza”.61 Los libre-pensadores suelen ser libre-charlatanes, y nunca se sienten más cómodos que criticando el Reino de Dios, otorgándose a sí mismos licencias ilimitadas. Es extraño ver cómo el yugo fácil del Señor62 hiere tan gravosamente los hombros de los soberbios, mientras se atan gustosamente las cadenas Satanás cual si fueran cadenas de honor. Gritan a Dios con jactancia: “¿Quién es señor de nosotros?”; mientras pasan por alto el aullido del maligno que desde el lago infernal les vocifera: «Soy tu señor y dueño, y me servirás fielmente». ¡Ay, pobres necios, su orgullo y gloria serán cortados cual flor marchita!63 Quiera Dios que nuestra alma no se junte con ellos.

También merece la pena observar que el salmista juzga conjuntamente los labios lisonjeros y las lenguas jactanciosas. La razón es clara, comparten un mismo vicio: mientras unos halagan a los demás, la otra se adula a sí misma; pero su mano derecha, en ambos casos, es la mentira. Por regla general cabría pensar que los aduladores son parásitos, tan serviles y mezquinos, que no pueden sentirse orgullosos; pero el sabio te dirá que, si bien todo orgullo es ciertamente mezquindad, en lo más mezquino se da el orgullo más altivo. El caballo del César está más ufano de llevar a César, que el César de montar en él. El felpudo en el que el emperador restriega sus zapatos, se vanagloria diciendo: «Yo limpiaba los zapatos imperiales». Nadie tan déspota con los demás que los segundones, criaturas miserables que se encaraman a cargos de importancia relativa, aferrados a la levita de los grandes. Ciertamente vivimos tiempos malos en los que estos seres nefastos son numerosos como una plaga. No es de extrañar que la justicia de Dios cortando de raíz a seres tan ominosos sea tema de un salmo; pues tanto la tierra como el cielo están hastiados de semejantes provocadores, cuya existencia es un azote para todos los que están a su alrededor. Los hombres no consiguen dominar las lenguas de estos aduladores arrogantes, pero el remedio aplicado por el Señor es tan afilado como seguro, la respuesta incontestable a sus palabras henchidas de vanidad.

C. H. SPURGEON

Vers. 3, 4. El Señor es dueño de nuestros cuerpos, es tanto lo que le pertenece que en realidad son más suyos que nuestros. El apóstol nos dice: “Glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”.64 Nuestros cuerpos y cada uno de sus miembros: pues si todo el ser le pertenece, ninguna parte queda exenta. Por tanto, los que hablaron jactanciosamente y dijeron con presunción: “nuestros labios son nuestros” (12:4) usurparon lo que pertenecía a Dios; hablaron como sus labios fueran de su propiedad, en lugar de pertenecer al Señor y dueño de todas las cosas, actuaron como si fueran ellos los dueños y pudieran utilizarlos a su antojo.65 Esta actitud provocó a Dios, quién para mostrar el derecho que tenía a disponer de sus labios y lenguas, decidió cortarles los unos y arrancarles las otras.

DAVID CLARKSON [1621-1686]

Vers. 4. A los que han dicho: Por nuestra lengua prevaleceremos; nuestros labios son nuestros; ¿quién es señor de nosotros? [A los que han dicho: Por nuestra lengua prevaleceremos; nuestros labios por nosotros; ¿quién va a ser amo nuestro? RVR] [A los que han dicho: Con nuestra lengua prevaleceremos, nuestros labios nos defienden; ¿quién es señor sobre nosotros? LBLA] [A los que dicen: Haremos poderosa a nuestra lengua, nuestros labios están con nosotros, ¿quién es señor sobre nosotros? BTX] [Que dice: «Venceremos con la lengua; en nuestros labios confiamos. ¿Quién puede dominarnos a nosotros?» NVI] [Que aniquile a quienes dicen: “Con nuestra lengua nos hacemos fuertes, en nuestras palabras confiamos, ¿quién podrá dominarnos?”. BLP] [«Mintamos todo lo que queramos —dicen—. Son nuestros los labios; ¿quién puede detenernos?». NTV]66

A los que han dicho: Por nuestra lengua prevaleceremos; nuestros labios son nuestros; ¿quién es señor de nosotros?67 Así fue: A un lado, doce hombres toscos e ignorantes; en el otro, toda la elocuencia de Grecia y Roma. Desde la época de Tertuliano68 a la de Juliano el Apóstata69 se utilizaron contra la Iglesia de Dios toda clase de argumentos, todo tipo de oratoria, conocimientos e ingenio. Y el resultado, ha sido el mismo que el de la conocida disputa entre el campesino cristiano y el filósofo pagano: El filósofo, que había desafiado a los grandes teólogos reunidos en un sínodo, a que rebatieran sus argumentos y le callaran, fue finalmente avergonzado por la fe sencilla de un campesino, que le dijo: «En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, te ordeno que te calles», y al instante quedó mudo.70 “¿Quién es señor de nosotros?”. “¿Quién es Jehová, para que yo oiga su voz y deje ir a Israel?” exclamó Faraón.71.” ¿Quién es el Todopoderoso, para que le sirvamos?.72 “¿Y qué dios será aquel que os libre de mis manos?”.73

MICHAEL AYGUAN [1340-1416]

citado por JOHN MASON NEALE [1818-1866] y RICHARD FREDERICK LITTLEDALE [1833-1890]

en “Commentary on the Psalms from Primitive and Mediæval Writers”, 1869

Nuestros labios son nuestros; ¿quién es señor de nosotros? Si queremos mantener una relación con Dios, debemos dejar de afirmar que nos pertenecemos a nosotros mismos74 y considerar a Dios como nuestro Señor y dueño. Pero el orgullo y la autosuficiencia están arraigados en el corazón de todos los seres humanos, que afirman “somos nuestros”, y cuando Dios les reclama su derecho de propiedad responden: “Nuestros labios son nuestros”. De hecho, los impíos, lo mismo pueden afirmar de todo su ser: su cuerpo, sus energías, su tiempo, etc., pueden decir, todo ello es nuestro, nos pertenece: “¿Quién es señor de nosotros?”.

JOHN HOWE [1630-1705]

“The Living Temple or, A designed improvement of that notion, that a good man is the temple of God”, 1702

Nuestros labios son nuestros; ¿quién es señor de nosotros? De la conducta de los malos debemos aprender tres lecciones, a saber:

1 Que nada de lo que poseemos es realmente nuestro.

2 Que todo lo que Dios nos ha dado debemos emplearlo en su servicio.

3 Que de todo lo que hagamos o digamos tendremos un día que rendir cuentas ante Dios, cuando él nos llame a su presencia.

DAVID DICKSON [1583-1663]

“Explanation of the First Fifty Psalms”, 1653

Vers. 5. Por la opresión de los pobres, por el gemido de los menesterosos, ahora me levantaré, dice Jehová; pondré en salvo al que por ello suspira. [Por la opresión de los humildes; por el gemido de los menesterosos, ahora me levantaré, dice Jehová; traigo auxilio a quien por él suspira. RVR] [Por la desolación del afligido, por los gemidos del menesteroso, me levantaré ahora, dice el Señor; lo pondré en la seguridad que anhela. LBLA] [Por la opresión de los pobres, por el gemido del menesteroso, ahora me levantaré, dice YHVH. Pondré en seguridad a los que son escarnecidos. BTX] [Dice el Señor: «Voy ahora a levantarme, y pondré a salvo a los oprimidos, pues al pobre se le oprime, y el necesitado se queja.» NVI] [Por la opresión de los humildes, por los gritos de los desvalidos estoy decidido a actuar —dice el Señor— y daré la salvación a quien suspira por ella. BLP] [El Señor responde: «He visto violencia contra los indefensos y he oído el gemir de los pobres. Ahora me levantaré para rescatarlos como ellos anhelaron que hiciera». NTV]

Por la opresión de los humildes;75 por el gemido de los menesterosos, ahora me levantaré, dice Jehová;76 traigo auxilio a quien por él suspira.77 A su debido tiempo, el Señor escuchará a sus escogidos que claman a él día y noche,78 y aunque haya sido paciente con sus opresores, los vengara presto. Observemos que la mera opresión de santos, aunque la soporten en silencio, es por sí misma un grito ante Dios: Moisés fue oído en el Mar Rojo, aunque no dijera palabra;79 y la aflicción de Agar fue escuchada, a pesar de su silencio.80 Jesús siente con su pueblo, sus pensamientos le son oradores poderosos. Y cuando, poco a poco, los santos empiezan a suspirar y expresar su aflicción, el auxilio viene raudo. Nada mueve más a un padre que el llanto de sus hijos; y cuando esto sucede, el Señor se levanta, despierta su furor, derrota al enemigo, y sitúa sus amados en lugar seguro. Un simple soplo basta para derribar al niño, y el enemigo es tan soberbio y poderoso, que se ríe de él con desprecio; pero cuando viene el Padre, y descarga sobre el torturador toda su ira, entonces es el niño quién ríe. ¡Qué virtud tan maravillosa hay en los suspiros de pobre, que son capaces de hacer levantar al Dios Altísimo de su trono! Los necesitados no se atrevían a pronunciar palabra, tan solo a suspirar en secreto; pero el Señor escuchó esos suspiros, y no pudo seguir reposando, ciñó su espada y se dispuso para la batalla. Día feliz aquel en que nuestra alma consiga involucrar a Dios en la pelea, porque en cuanto vea su santo brazo desnudo,81 Filistea, lo lamentará. En la noche de la Iglesia, las horas más oscuras son aquellas que preceden el romper del día. Los límites del hombre son la oportunidad de Dios para intervenir. Jesús vendrá para liberar a los justos cuando escuche sus suspiros de necesidad apremiante, cuando crean que para ellos se ha desvanecido definitivamente toda esperanza. Oh Señor, declara de una vez tu ahora, y levántate raudo en nuestra ayuda. Todo lector afligido que sea capaz de asirse con fuerza a la promesa de este versículo, sacará de él plenitud de consuelo. Dice al respecto Gurnall:82 «De igual modo que con un simple grifo se puede extraer todo el vino de un tonel, así también puede un alma angustiada hacer suyo todo el consuelo que emana del Pacto, a través de una simple promesa, si es capaz de hacerla suya». El que ha prometido ponernos a salvo, implica en su promesa protección y preservación en la tierra, a la vez que salvación eterna en el cielo.

C. H. SPURGEON

Por la opresión de los humildes; por el gemido de los menesterosos, ahora me levantaré, dice Jehová. Cuando opresores y perseguidores se alían contra el pueblo de Dios, lo desprecian y desafían, creyendo poder derribarlo con un simple soplo; entonces, Dios se levantará para ejecutar juicio, como lo expresa la versión caldea. En ese instante, cuando todo parece estar perdido, cuando a los pobres, oprimidos y afligidos, no les queda ya más que suspirar y llorar, entonces, el Señor se levantará para aliviarlos de sus opresiones, bridándoles una extraordinaria oportunidad para proclamar su gloria y bondad a favor de su pueblo: “Y otros, echando mano a los siervos, los maltrataron y los mataron. Al oírlo el rey, se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos homicidas, y quemó su ciudad”.83

THOMAS BROOKS [1608-1680]

“London’s lamentations: or, A serious discourse concerning that late fiery dispensation that turned our once renown City into a ruinous Heap”, 1670

Por la opresión de los humildes; por el gemido de los menesterosos, ahora me levantaré, dice Jehová. Dios se deleita en tomar nota de todo acto de obediencia y toda inclinación hacia la gracia, incluso de las más pequeñas. Temer su nombre, no es gran cosa y, sin embargo, cuenta ya con una promesa: “a los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia”.84 Pensar en su nombre, es aún menos, y no obstante se escribe en “un libro de memoria”.85 El Señor registra cuantos pensamientos de bien salgan de un alma pura. Igual que tiene en cuenta los pensamientos perversos de los impíos, que son frutos naturales del corazón malvado;86 anota los pensamientos puros de los santos, pues son lo que mejor revela la bondad de un corazón regenerado.87 Un deseo es cosa pequeña, en especial el de un pobre, sin embargo Dios valora tanto el deseo de los pobres que lo califica como gran virtud: “lo que es deseable en un hombre es su bondad”.88 Una lágrima no hace ruido, pero tiene voz “El Señor ha escuchado la voz de mi llanto”;89 no es un líquido precioso, pero el Señor las recoge, embotella y atesora.90 Un gemido es algo pobre, y sin embargo a veces es la esencia de la oración: “pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles”.91 Un suspiro es menos que un gemido, pero suficiente para que el Señor se levante y traiga auxilio: “Traigo auxilio a quien por él suspira”.92 Una mirada menos aún, pero eficaz como último recurso: “sin embargo volveré a mirar hacia tu santo templo”.93 Respirar es menos que todo lo anterior, y sin embargo, Dios lo tiene controlado y lo toma en cuenta: “no escondas tu oído a mi respiro”.94 Y un jadeo es menos que respirar, jadeamos cuando nos quedamos sin aliento, y no obstante, es una de las cosas de las que más y mejor nos podemos jactar: “Como el ciervo busca jadeante las corrientes de las aguas, así te anhela a ti, oh Dios, el alma mía”.95 En el retrato del cristiano, lo más destacado son sus debilidades: Bienaventurados los pobres, los mansos, los que lloran, los que tienen hambre y sed.96 Cuando Ana oró con mayor eficacia, fue cuando llorando con desespero: “solamente se movían sus labios, y su voz no se oía”.97 Lo mismo cabe decir del publicano, que no hacía más que golpearse el pecho y clamar por sus adentros: “Dios, sé propicio a mí, pecador”.98 Y María Magdalena, cuando fue en busca de Jesús, se sentó y lloró, guardando silencio.99 ¡Qué dulce suena la música sobre las aguas!100 ¡Que fructíferos son los valles profundos! Los corazones dolientes son los más inspirados, pues lo profundo es más fecundo. El Buen Pastor tiene siempre mayor cuidado de sus ovejas más frágiles. Un buen padre se vuelca siempre en los vástagos que más le necesitan; y una madre se deshace por el hijo enfermo. Qué dulces y reconfortantes suenan las palabras de nuestro Salvador: “no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños”;101 y su afirmación de que en el cielo no entrará nadie que no se vuelva y se haga como un niño.102

JOHN SHEFFIELD [1654-1726]

“The rising sun, or, The sun of righteousnesse shining upon the sons of unrighteousnesse”, 1654

Por la opresión de los humildes; por el gemido de los menesterosos, ahora me levantaré, dice Jehová. La opresión insolente y cruel de los pobres es un pecado que acarrea desolación y destrucción sobre todo aquel que la practica. Dios envió diez plagas justicieras, una detrás de otra, contra Faraón, su pueblo y su tierra, para vengar la opresión cruel que ejercía sobre los israelitas.103 “No robes al pobre, porque es pobre, ni quebrantes en la puerta al afligido; porque Jehová defenderá la causa de ellos, y despojará el alma de aquellos que los despojaren”.104 Robar y oprimir a los ricos es un pecado; robar a los pobres, un pecado mucho mayor; pero robar a los pobres que carecen de dinero para comprar la justicia, es la cima de la inhumanidad y la impiedad. Oprimir a cualquiera es pecado; pero oprimir al oprimido es el colmo del pecado. La pobreza, la necesidad y la miseria deberían ser motivos para la compasión; pero los opresores hacen de ellas las piedras afiladoras de su crueldad y fiereza; por tanto, el Señor defenderá la causa de su pueblo oprimido contra sus opresores, sin medida y sin cobrar honorarios; la defenderá descargando contra los opresores pestilencia, sangre y fuego. Gog era un gran opresor de los pobres,105 y Dios cayó sobre él con pestilencia, sangre y fuego, hizo llover sobre él y sus tropas, y sobre los pueblos que estaban con él, impetuosa lluvia, y piedras de granizo, fuego y azufre: “Y yo litigaré contra él con peste y con sangre; y haré llover sobre él, sobre sus tropas y sobre los muchos pueblos que están con él, impetuosa lluvia, y piedras de granizo, fuego y azufre. Así manifestaré mi grandeza y mi santidad, y me daré a conocer ante los ojos de muchas naciones; y sabrán que yo soy Jehová”.106

THOMAS BROOKS [1608-1680]

“London’s lamentations: or, A serious discourse concerning that late fiery dispensation that turned our once renown City into a ruinous Heap”, 1670

Pondré a salvo al que suspira. Temblad todos aquellos que hacéis daño a los pobres, quien quiera que seáis; pues quizás tengáis poder y riquezas, y contéis con el favor de los jueces; pero los pobres tienen las armas más poderosas de todas: suspiros y gemidos, que llegan hasta el cielo clamando ayuda en su favor. Y estas armas derrocan dinastías, socavan fundamentos y derriban naciones enteras.107

JUAN CRISÓSTOMO [347-407]

Vers. 6. Las palabras de Jehová son palabras limpias, como plata refinada en horno de tierra, purificada siete veces. [Las palabras de Jehová son palabras sinceras, como plata refinada en horno de tierra, purificada siete veces. RVR] [Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. LBLA] [Las palabras de YHVH son palabras puras, como plata refinada en un crisol en la tierra, purificada siete veces. BTX] [Las palabras del Señor son puras, son como la plata refinada, siete veces purificada en el crisol. NVI] [Las palabras del Señor son palabras puras, plata aquilatada en un crisol de barro, que ha sido refinada siete veces. BLP] [Las promesas del Señor son puras como la plata refinada en el horno, purificada siete veces. NTV]

Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. Qué gran contraste entre las palabras vanas de los hombres, y las palabras puras del Señor. Las palabras de los hombres son sí y no, las promesas del Señor son sí y amén. En el original hay una alusión directa al proceso purificador de metales más estricto conocido por los antiguos, por el que la plata adquiría la mayor pureza posible: la escoria era consumida totalmente, y solo quedaba el metal precioso. Así de limpio y libre de toda aleación de error o infidelidad es el Libro de las palabras del Señor. La Biblia ha pasado por el horno de la persecución, de la crítica literaria, de la duda filosófica, de los descubrimientos científicos; y no ha perdido en el proceso nada, salvo las interpretaciones humanas que a veces se adhieren a ella como la escoria al mineral precioso. La experiencia de los santos ha probado su fidelidad en todas las maneras imaginables a lo largo de los siglos, pero ni una sola doctrina o promesa de la Palabra ha sido consumida ni en el calor más excesivo. Y así, tal como son las palabras del Señor, han de ser también las palabras de sus hijos. Si queremos ser semejantes a Dios en nuestra conversación, debemos cuidar nuestro lenguaje, y mantener la más estricta pureza de integridad y santidad en todas nuestras comunicaciones.

C. H. SPURGEON

Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. ¡Qué hermoso suena este versículo, en contraste con todo lo dicho antes sobre los aduladores, jactanciosos y embusteros! ¿Hablan los pecadores de vanidad y lisonjas? ¡Que hablen los santos de Jesús y su Evangelio! ¿Hablan palabras impuras? Que utilicen los fieles las palabras puras de Dios, que son como la plata: cuanto más usadas, más fundidas en el fuego, más preciosas serán. Ciertamente, los impíos despreciaran tanto a Dios como su Palabra, considerándola como algo insignificante; más oh, las promesas que contiene, la relación del pacto con Jesús y las cosas divinas, son un tesoro desconocido. “Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; y dulces más que miel, y que la que destila del panal”.108

ROBERT HAWKER [1753-1827]

“Poor Man’s Commentary on the Old and New Testaments”, 1831

Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. Antiguamente para purificar la plata, la introducían en el fuego una y otra vez, hasta que quedaba totalmente probada. Así es también con la verdad divina; poco hay de verdad en aquello que no se ha purificado una y otra vez, y si algo de escoria permanece mezclada con ella, entonces, Dios mismo la purifica otra vez. Toda afirmación doctrinal del pasado cuya veracidad no haya sido debidamente probada con las Escrituras, sometedla al fuego otra vez, para que toda la escoria que pueda haber en ella sea consumida; pues el Espíritu Santo es tan pulcro, tan delicado, tan exacto, que no soporta que la falsedad se mezcle con las verdades del Evangelio. Por ello Dios, época tras época, cuestiona las afirmaciones del pasado, porque aún hay algo de escoria mezclada en ellas; bien en las mismas opiniones, o en la interpretación de los textos de la Escritura que se han utilizado para defenderlas: no han pasado su filtro y, por tanto, no cejará hasta que las haya purificado. La doctrina de la gracia gratuita de Dios ha sido puesta a prueba una y otra vez, y otra más. Pelagio109 comenzó a mezclar con ella su propia escoria, afirmando que la gracia no es nada más que la naturaleza del hombre. Pues bien, su doctrina fue purificada y gran parte de la escoria de sus afirmaciones, purgada. Luego vinieron los semi-pelagianos,110 que reconocen que la naturaleza no puede hacer nada sin la gracia, pero dicen que la naturaleza concurre con la gracia, e influencia lo mismo que la gracia; y esta escoria también fue quemada. Los papistas111 abordaron la misma cuestión, y no son ni pelagianos ni semipelagianos, pero mezclan todavía escoria con la gracia. Y después los arminianos,112 que refinan las doctrinas del papismo; y con ello, siguen mezclando escoria. Dios hará que su verdad sea probada en el fuego siete veces, hasta que pueda presentarse pura, como debe ser. Y digo esto porque esta verdad, ciertamente es preciosa.

THOMAS GOODWIN [1600-1679]

Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. La Escritura es el sol; la iglesia el reloj. Sabemos que el sol es fiable, y constante en sus movimientos; el reloj puede caerse, adelantarse o atrasarse. Por ello trataríamos de necio al que confiara más en el horario del reloj que en el sol; y por similitud, criticamos la credulidad de quienes prefieren confiar más en la tradición de la Iglesia que en la Escritura.

JOSEPH HALL [1574-1656]

“Select Thoughts or Choice Help for a Pious Spirits”, 1617

Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. Podemos rebuscar en pasajes sueltos de la Biblia y quedarnos con aquello que, a primera vista, apoye nuestros criterios. Pero leámosla entera y completa; analicemos el carácter de las diferentes personas a las que cada parte, en principio, va dirigida; la época y el contexto histórico en que se escribieron; investiguemos el propósito de cada pasaje, incluidos aquellos que a las mentes incrédulas les resultan más cuestionables; y nos convenceremos que en lugar de haberse fraguado en la mente de un impostor, deben su origen a hombres que escribieron: “siendo inspirados por el Espíritu Santo”.113 Escrutemos la Palabra con tanta severidad como queramos, para que este escrutinio esté documentado, sabiamente dirigido por una mente justa y abierta, y os aseguro que no hemos de temer nada. Hay porciones de la misma a las que la ignorancia y la necedad hacen decir, a veces, cosas que no dice, forzadas y poco naturales, y que mentes impuras ven y juzgan bajo la sombra de su propia impureza. Montesquieu114 dijo de Voltaire: “Lorsque Voltaire lit un livre, il le fait, puis il ècrit contre ce qu’il a fait” «Cuando Voltaire115 lee un libro, saca de él lo que quiere, y luego, escribe contra él todo lo que se ha imaginado». No es difícil mancillar la Escritura y luego imputar a su Autor inmaculado los borrones que han causado en sus páginas hombres con mentes corruptas y faltos de entendimiento. Pero si contemplamos la Biblia con honestidad, tal y como es, descubriremos que es inmaculada y sin mancha, lo mismo que su Autor.

GARDINER SPRING [1785-1873]

“The Bible not of man : or, The argument for the divine origin of the Sacred Scriptures, drawn from the Scriptures themselves”, 1847

Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. La frase puede implicar dos cosas: en primer lugar, la veracidad infalible de la Palabra; y, en segundo lugar, su incomparable pureza.116

En primer lugar, la certeza infalible de la Palabra, que es como oro refinado en el fuego cuando se consume la escoria. En tiempos de angustia, las vanas arrogancias de este mundo no nos aportan consuelo: pero cuanto más sometemos la Palabra de Dios a prueba, más demostrada queda su excelencia; cuanto más honda es la aflicción, mayor es la prueba a la que sometemos la promesa, y más se demuestra su pureza. “Probada es toda palabra de Dios; él es escudo para los que en Él se refugian”.117 Así como el oro no sufre pérdida alguna al ser sometido al fuego, tampoco las promesas de la Palabra cuando son puestas a prueba, al contrario, en medio de nuestras mayores tribulaciones es cuando más relucen.

Y, en segundo lugar, expresa su perfección y pureza: en la plata o el oro que han sido probados y refinados numerosas veces no queda ni sombra de escoria; y así es también con la Palabra de Dios, no hay en ella defecto.

THOMAS MANTON [1620-1677]

“God’s Word in Our Hearts”, 1681

Las palabras del Señor son palabras puras, plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada. Aunque la expresión verbal מְ֝זֻקָּ֗ק məzuqqāq de זָקַק zaqaq se aplica a veces para hablar de la pureza de la plata, es más estrictamente un epíteto del oro, del método peculiar utilizado para separarlo de la tierra mediante repetidos lavados y decantaciones. Partiendo de esta idea, una posible traducción alternativa sería esta:

Las palabras de Jehová son palabras puras:

plata refinada en el crisol

oro, siete veces lavado de la tierra.118

JOHN FRY [1792-1822]

“A Translation and Exposition of the Psalms on the principles adopted in the posthumous work of Bishop Horsley”, 1842

Siete veces refinada. No quiero pasar por alto la posibilidad de que la expresión “siete veces” encierre un significado místico:119 una alusión a los siete períodos en la historia de la Iglesia;120 o, simplemente al simbolismo de perfección ligada al número siete, y que encontramos de manera especial en el libro de la Revelación de Jesucristo: el Apocalipsis. Algo que, obviamente, resultará mucho más fácil de aceptar por parte de aquellos que admiten la interpretación profética de las siete iglesias de Apocalipsis.121

WILLIAM WILSON [1783-1873]

“The Book of Psalms: With an Exposition, Evangelical, Typical, and Prophetical, of the Christian Dispensation”, 1860

Vers. 7. Tú, Jehová, los guardarás; de esta generación los preservarás para siempre. [Tú, Jehová, nos guardarás; de esta generación nos preservarás para siempre. RVR] [Tú, Señor, los guardarás; de esta generación los preservarás para siempre. LBLA] [Tú los guardarás, oh YHVH, nos preservarás de esta generación para siempre. BTX] [Tú, Señor, nos protegerás; tú siempre nos defenderás de esta gente, NVI] [Tú, Señor, nos protegerás, nos librarás de esta generación por siempre. BLP] [Por lo tanto, Señor, sabemos que protegerás a los oprimidos; los guardarás para siempre de esta generación mentirosa. NTV]

Tú, Jehová, nos guardarás; de esta generación nos preservarás para siempre.122 Caer en manos de una generación malvada, hasta el punto de ser atormentado por su crueldad o contaminado por su influencia, es un mal digno de ser temido por encima de todas las cosas; y, sin embargo, es un mal previsible y anticipado en este versículo. Ha habido en el mundo santos que vivieron cien años avanzados a su propio tiempo, como si hubieran proyectado su alma hacia un futuro más brillante, escapando de la ofuscación y las brumas devastadoras de su época: pero se fueron a la tumba incomprendidos. Sin embargo, con el ir venir de las generaciones, son desenterrados en calidad de héroes y reviven en la admiración y el aprecio de los más excelentes de la tierra; preservados para siempre de la generación que les estigmatizó como sembradores de sedición, o que los quemó en calidad de herejes. Nuestra oración diaria debe ser que Dios nos conceda el privilegio de elevarnos por encima de nuestra propia época como los picos de las montañas se elevan por encima de las nubes, permaneciendo firmes y erguidos cual pináculos que señalan al cielo, por encima de las nieblas de la ignorancia y el pecado que giran a nuestro alrededor. ¡O Espíritu Eterno, haz que se cumplan en nosotros las palabras fieles de este versículo! Nuestra fe cree firmemente en ellas, y nos garantizan que nos guardarás y nos preservarás; por lo cual clamamos convencidos: Has dicho que lo harías, y “lo harás”.123

C. H. SPURGEON

Vers. 8. Cercando andan los malos, cuando la vileza es exaltada entre los hijos de los hombres. [De los malvados que nos cercan, porque la vileza es exaltada entre los hijos de los hombres. RVR] [En torno se pasean los impíos, cuando la vileza es exaltada entre los hijos de los hombres. LBLA] [Por todos lados deambulan los malvados, cuando la vileza es exaltada entre los hijos del hombre. BTX] [Aun cuando los malvados sigan merodeando, y la maldad sea exaltada en este mundo. NVI] [Los malvados vagan errantes por todas partes, la vileza humana llega al colmo. BLP] [Aunque los malvados anden pavoneándose y se alabe el mal por toda la tierra. NTV]124

Los impíos andan por todas partes, cuando los hombres más viles son exaltados.125 El salmista regresa aquí a la fuente de su amargura, la que de entrada le hizo comenzar el salmo acudiendo a los pozos de salvación y exclamando: “Sálvanos, Señor”. ¿Y cuál es? “Los impíos andan por todas partes”. Básicamente, la continuidad y predominio de la maldad en el mundo. Y ¿por qué? Porque “los hombres más viles son exaltados”. Cuando aquellos que están en el poder son viles, sus subordinados no serán mejores; pues así como un sol caluroso trae moscas nocivas, así también un pecador, puesto en lugares de honra, estimula la maldad y el vicio, esparciéndolo por todas partes. Nuestro césped patrio no estaría tan plagado de abominables si aquellos tenidos por honorables fueran menos proclives a la corrupción. Quiera Dios que la gloria y el triunfo de nuestro Señor Jesús nos anime a andar en rectitud y trabajar en este sentido en todos los frentes; puesto que si bien un pecador exaltado y puesto en lugar de honra, alienta a muchos hacia el pecado; mucho más nuestro Redentor, exaltado sobre todas las cosas,126 tiene que alentar, incitar y estimular a sus santos. Por tanto, fortalecidos por la visión de su reino de poder, afrontaremos los males de nuestro tiempo con santa determinación, confortados por la oración más esperanzadora: “Sálvanos, Señor”.

C. H. SPURGEON

Los impíos andan por todas partes, cuando los hombres más viles son exaltados. El término utilizado en el texto hebreo es זֻ֝לּ֗וּת zullūṯ, que significa “fœces, fœculences”, “posos” o “sedimentos”; y כְּרֻ֥ם kərum es un adverbio que, más que “exaltado”, significa “hacia arriba”, o “en la superficie”. Por tanto, sugiero la siguiente traducción: “Avanzarán los impíos en todos los frentes? ¿Subirán a la superficie los posos de la tierra?”

JOHN MASON GOOD, [1764-1827]

“An Historical Outline of the Book of Psalms”, 1837

Cuando los hombres más viles son exaltados. “Los más viles”, en hebreo זֻ֝לּ֗וּת zullūṯ, un término que solo aparece en este pasaje; algo despreciable, οὐτίδανοι, entendiendo lo abstracto por lo concreto, la cáscara o quisquiliæ. Los recipientes vacíos son los primeros en salir a flote; los postes carcomidos suelen recubrirse de oro adulterado; y las malas hierbas que brotan con mayor fuerza las son las peores. La cascará queda siempre por encima, mientras el buen trigo cae hacia abajo y va a parar a los pies del aventador. La razón por la cual los impíos se “pavonean” por todas partes, muestran tanta energía, van siempre tan atareados (¡y quién sino ellos!) la expresa claramente aquí el salmista: los viles, los necios y alborotadores, siempre son exaltados: “Cuando los justos se alegran, grande es la gloria; mas cuando se levantan los impíos, tienen que esconderse los hombres”;127 “El que camina en integridad será salvo; mas el de perversos caminos caerá en alguno de ellos”;128 “Cuando los justos dominan, el pueblo se alegra; mas cuando domina el impío, el pueblo gime”.129 Como los resfriados y catarros que bajan de la cabeza a los pulmones por la garganta y acaban causando malestar a todo el organismo, así sucede también con el organismo que forma la sociedad. Como el pescado comienza a pudrirse por la cabeza, luego el cuerpo, así es también en este caso. Algunos traducen este versículo de la siguiente manera: “Cuando ellos (los viles o malvados) son exaltados, acarrean vergüenza a los hijos de los hombres”, es decir, se convierten en un oprobio para otras personas honradas, que no tan solo se sienten defraudadas, sino que son literalmente esquilmadas por las ambiciones de estos viles corruptos, que, como los monos, cuanto más alto suben, más evidencian su vileza y deformidad.

JOHN TRAPP [1601-1669]

“A commentary or exposition upon the books of Ezra, Nehemiah, Esther, Job and Psalms”, 1657


1 Sobre el termino “Seminit”, en hebreo הַשְּׁמִינִ֗ית haššəmînîṯ, “en la octava” o “para la octava” ver los comentarios al título del Salmo 6 en este mismo tomo. En la versión griega de los LXX o Septuaginta el título es: σώζω ἐγώ κύριος ὅτι ἐκλείπω ὅσιος ὅτι ὀλιγόω ὁ que la Vulgata traduce al latín como: “in finen, pro octava, Psalmus David”, “Para el fin, para la octava, Salmo de David”.

2 Los Padres de la Iglesia comentaron:

–AGUSTÍN DE HIPONA [354-430]: «Ya indicamos al exponer el Salmo 6 que el “octavo día” se aplica al día del juicio, y por tanto “para el octavo”, como leemos en la cabecera de este Salmo, tiene que ver con la eternidad, puesto que transcurrido el actual período de tiempo, el “día octavo” será entregado como herencia a los santos».

–CASIODORO [485-583]: «Como ya hemos explicado al comentar el Salmo 6, el número “ocho” se refiere a nuestro reposo eterno, puesto que en este mundo no existe un octavo día; después del séptimo volvemos al primero (…) y es en este sentido: el de nuestro descanso eterno, que es preciso entender estas palabras: el salmista suplica que la maldad sea erradicada en este mundo para que alcancemos finalmente la herencia futura que tenemos prometida».

3 En este sentido algunos comentaristas consideran que el Salmo 12 guarda un paralelismo con los primeros versículos del capítulo 1 del libro de Habacuc: “Destrucción y violencia hay delante de mí, y se levantan pleitos y contiendas. Por lo cual la ley es debilitada, y el juicio no sale según la verdad; por cuanto el impío asedia al justo, por eso sale torcida la justicia” (Habacuc 1:3-4). Uno de los himnos más famosos escritos por MARTÍN LUTERO [1483-1501] escrito en 1523 se basa en las palabras de este Salmo: “Ach Gott, vom Himmel sieh darein”. Fue traducido al inglés en 1863 por CATHERINE WINKWORTH [1827-1878]: “O God, from heaven look down and see / A sight which well may move Thee: / Of godly men how few there be, / Forsaken we who love Thee!”. “Señor, mira desde el cielo y contemplarás una escena que te sobrecogerá. Porque ya no quedan piadosos, no olvides pues a los que te amamos”.

4 ATANASIO DE ALEJANDRÍA [296-373] en su carta a su discípulo Marcelino sobre la naturaleza y valor de los salmos le dice refiriéndose a este salmo: «Si ves que la soberbia de los hombres va en aumento, la maldad progresa y las cosas en este mundo van de mal en peor, hasta el punto que ya no quedan personas piadosas entre los hombres ni en el mundo acciones santas, no te amilanes, ten confianza en el Señor y entona el Salmo 12». El Tomo I de “El Tesoro de David” incluye una traducción completa de la Carta de Atanasio a Marcelino. [Tomo I - pp. 49-50].

5 Salmo 120:5.

6 FRANCISCO LACUEVA [1911-2005] hace en su versión del “Comentario de Matthew Henry” este interesante resumen del Salmo 12: «El salmo nos provee de buenos pensamientos para malos tiempos.

I. ¿Qué son “tiempos malos”? La escasez de dinero, el fracaso del negocio, las desolaciones de la guerra, etc., hacen que los tiempos sean malos. Pero la Escritura achaca la maldad de los tiempos a causas de otra naturaleza (2 Timoteo 3:1): “...en los últimos días vendrán tiempos difíciles”. ¿Por escasez de dinero, quiebra del negocio o desolación de una guerra? ¡No! El Apóstol lo atribuye a la maldad de los hombres en un grado no conocido anteriormente. De esta maldad se queja David y afirma que los tiempos son malos cuando: [Versículo 1] Cuando hay una general decadencia de la piedad y de la honestidad entre los hombres “...se acabaron los compasivos; ...han desaparecido los leales de entre los hijos de los hombres”. Obsérvese cómo se colocan juntas estas dos cualidades: la compasión (hebreo חָסִ֑יד ḥāsîḏ, el piadoso para con Dios y los hombres) y la lealtad (hebreo אֱ֝מוּנִ֗ים ’ĕmūnîm, los fieles). Donde no hay piedad sincera, no se puede esperar lealtad. Se dice aquí de estas personas que han cesado y que han caído, es decir: Los verdaderamente buenos han sido quitados de en medio, y los que solo lo parecían han degenerado hasta dejar de ser lo que parecían. [Versículos 2 y 3] Cuando los hombres son tan desvergonzados como para planear contra sus prójimos los peores males y, no obstante, son tan viles como para cubrir sus designios con plausibles profesiones de amistad. Pueden llegar a besar para matar (Lucas 22:48). Es la imagen perfecta del diablo, mentiroso y homicida (Juan. 8:44) ¡Ciertamente son pésimos los tiempos cuando ha desaparecido del todo la sinceridad! [Versículo 4] Cuando los pecadores arrogantes han llegado a tal nivel de impiedad como para decir: “Por nuestra lengua prevaleceremos contra toda causa virtuosa; nuestros labios por nosotros (literal: son nuestros) y podemos decir lo que nos venga en gana; ¿quién va a ser amo nuestro?” Injustas y jactanciosas pretensiones, porque ¿quién nos hizo la boca, en cuya mano está nuestro aliento y el aire que respiramos? ¿Y quién sino Él es el que tiene plena autoridad, señorío y dominio sobre nosotros, para mandarnos y para juzgarnos? (Comparar con Éxodo. 5:2). [Versículo 5] Cuando los pobres y necesitados se hallan bajo opresión y abuso. Esta maldad se insinúa en el v. 5, donde Dios mismo toma nota de la opresión de los pobres y del suspiro de los menesterosos. [Versículo 8] Cuando abunda la maldad hasta tal punto que cunde descaradamente bajo la protección o la vista gorda de los que están en autoridad “Porque la vileza es exaltada entre los hijos de los hombres”.

II. En tiempos malos, sirve de consuelo pensar: [Versículo 1] Que tenemos un Dios a quien acudir para pedirle que salga a favor nuestro y nos compense de los males que nos afligen. Con esto comienza David el Salmo “Salva oh Jehová...”. [Versículo 3] Que Dios pedirá cuentas de seguro a los orgullosos y desleales; que castigará y refrenará su insolencia. Los hombres no pueden descubrir a menudo la falsedad de los aduladores, ni humillar la altivez de los que hablan con arrogancia; pero el Dios justo “arrancará los labios lisonjeros y las lenguas que hablan jactanciosamente”. Así lo pide el salmista y así lo espera con toda confianza. [Versículos 4 y 5] Que Dios llevará a cabo, a su debido tiempo, la liberación de sus hijos oprimidos y les resguardará de los malignos designios de quienes les persiguen: “Ahora me levantaré, dice Jehová”. Cuando los opresores se hallen en el pináculo de su orgullo e insolencia, cuando digan: “¿quién va a ser amo nuestro?”, entonces es la hora de Dios para hacerles saber, a costa de ellos, que está por encima de ellos. Y cuando los oprimidos están en el fondo de su aflicción y desespero entonces es también la hora de Dios para salir a favor de ellos, como salió a favor de Israel cuando los israelitas se sentían más abatidos, y el faraón se sentía más exaltado. “Ahora me levantaré, dice Jehová”. Y añade literal: אָשִׁ֥ית בְּ֝יֵ֗שַׁע יָפִ֥יחַֽ לֹֽו ’āšîṯ bəyêša‘ yāp̄îaḥ lōw “(le) pondré a seguro” es decir, le protegeré, le salvaré, le restauraré de forma que no pierda nada por lo que haya sufrido, le cumpliré lo que él anhela. [Versículo 6] Que, aun cuando los hombres sean desleales, Dios es fiel: “Las palabras de Jehová son palabras sinceras” טְהֹ֫ר֥וֹת ṭəhōrōwṯ de טָהוֹר tahor “limpias, puras”, como plata refinada, es decir, acrisolada siete veces, esto es, perfectamente. [Versículo 7] Que Dios se reservará de seguro un remanente suyo, por malos que sean los tiempos “Tú, Jehová, nos guardarás; de esta generación nos preservarás para siempre”. En tiempos de general apostasía, el Señor conoce a los que son suyos y les concederá gracia para que preserven su integridad.

7 El nombre del Señor: יְ֭הוָה Yahweh, aparece cinco veces en el Salmo ligado a cinco acciones concretas: En el versículo 1 para pedir ayuda: הֹושִׁ֣יעָה יְ֭הוָה hōwōšî‘āh Yahweh; en el versículo 3 para pedirle que acabe con los labios lisonjeros: יַכְרֵ֣ת יְ֭הוָה כָּל־שִׂפְתֵ֣י yaḵrêṯ Yahweh kāl-śip̄ṯê; en el versículo 5 para anunciar que se levantará: עַתָּ֣ה אָ֭קוּם יֹאמַ֣ר יְהוָ֑ה ‘attāh ’āqūm yōmar Yahweh; en el versículo 6 para afirmar que sus palabras son puras: אִֽמֲרֹ֣ות יְהוָה֮ אֲמָרֹ֪ות טְהֹ֫רֹ֥ות ’imărōwṯ Yahweh ’ămārōwṯ ṭəhōrōwṯ; y en el versículo 7 para asegurar que nos protegerá de los impíos: אַתָּֽה־יְהוָ֥ה תִּשְׁמְרֵ֑ם תִּצְּרֶ֓נּוּ ’attāh-Yahweh tišmərêm tiṣṣərennū.

8 Se refiere a HENRY AINSWORTH [1571-1622], teólogo inglés no conformista, nacido en Swanton Morley, Norfolk, educado en el Caius College de Cambridge y posteriormente exilado y afincado en Ámsterdam. Erudito y reconocido especialista en hebreo bíblico, fue autor de numerosas obras, entre las que destacan sus traducciones anotadas o comentarios a Génesis (1616); Éxodo (1617); Levitíco (1618); Números (1619); Deuteronomio (1619) Salmos (incluyendo una versión métrica, 1612); y el Cantar de los Cantares de Salomón (1623). Su obra Psalms, The Book of Psalms: Englished both in Prose and Metre with Annotations [Ámsterdam, 1612], que incluye en una separata treinta y nueve melodías monofónicas de salmos, es conocida como el Ainsworth Psalter, “El Salterio de Ainsworth”, único libro de música que los peregrinos puritanos llevaron a Nueva Inglaterra en 1620, posteriormente revisado y convertido en el Bay Psalm Book, y que tuvo una influencia fundamental en la primitiva salmodia norteamericana

9 En hebreo הוֹשִִׁ֣יעָה hōwōšî‘āh de יָשַׁע yasha, “ayuda, libra, ejecuta venganza”. Una expresión utilizada para pedir justicia o ayuda tanto al rey como a Dios (2 Samuel 14:4; 2 Reyes 6:26; Salmo 12:1; 20;9; 28:9; 60:5; 98:1; 108:6; 118:25).

10 En hebreo בְּלִיַּ֫עַל bəlîya‘al, sinónimo de perversidad o apelativo de Satanás (1 Samuel 25:17,25; Nahúm 1:11; 2 Corintios 6:15, RVR). En el AT se utiliza mayoritariamente para identificar a personas impías o perversas (Jueces 19:22; 20:13; 1 Samuel 1:16; 2:12; 10:27; 1 Reyes 21:10; 2 Crónicas 13:7) o bien la idea de “destructor” (Nahúm 2:1). En el NT y los manuscritos del Mar Muerto se usa el término como nombre propio de Satanás príncipe de demonios y las tinieblas (2 Corintios 6:15, RVR).

11 2 Samuel 23:7.

12 La versión griega de los LXX o Septuaginta lee: ὁ ἄνθρωπος que la Vulgata traduce como “defecit sanctus”, “falto santo”. En hebreo חָסִ֑יד ḥāsîḏ de חָסִיד chasid. SCHÖKEL indica que en este caso no tiene el sentido religioso o espiritual que adquiere en otros contextos, como: “Jehová ha escogido al piadoso para sí” (Salmo 4:3); sino más bien un sentido general de integridad o veracidad: “se acabaron los veraces”; que va en paralelo con אֱ֝מוּנִ֗ים ’ĕmūnîm, “fidelidad, lealtad”. Por ello traduce el versículo como: “¡Sálvanos, Señor!, que se acaba la lealtad, que desaparece la sinceridad entre los hombres”. «Se trata de actitudes profundas, actitudes habituales, de las cuales proceden los actos. Si no domina el sentido de lealtad, no valdrán leyes, triunfarán engaño y arrogancia» (Ver: Salmo 116:11; Proverbios 20:6; Jeremías 7:28; 9:3-4; Miqueas 7:2).

13 1 Reyes 19:14-18; Romanos 11:2-5.

14 Mateo 24:12.

15 Mateo 16:18.

16 La versión griega de los LXX o Septuaginta lee: μάταιος λαλέω ἕκαστος πρός ὁ πλησίον y la Vulgata traduce: “quoniam diminutae sunt veritates a filis hominum”, “han venido a menos las verdades entre los hijos de los hombres”. Sobre esta traducción AGUSTÍN DE HIPONA [354-430] hace este peculiar comentario: «La verdad que ilumina a las almas es una sola; pero las almas iluminadas son muchas. Por lo que cabe afirmar con propiedad que las verdades reflejadas por ellas son también muchas, de la misma forma que la imagen de un mismo rostro puede verse reflejada simultáneamente por multitud de espejos».

17 1 Samuel 22:9-22.

18 1 Samuel 23:1-29.

19 1 Samuel 22:17-19.

20 1 Samuel 22:1-2.

21 Sobre esto dice EVAGRIO DEL PONTO [345-399] en sus “Scholia in Psalmos”: «Si la verdad comienza a flaquear entre los santos, disminuye la integridad en general. Pues la actitud de los santos lleva a que otras personas íntegras y honestas se cuestionen su proceder. Cuando los santos aflojan la verdad flaquea; y probablemente esta sea la razón de que hayan surgido y prosperado tantas herejías».

22 Éxodo 23:2.

23 1 Samuel 22:17.

24 Mateo 12:32; Marcos 3:29; Lucas 12:10.

25 1 Samuel 22:9-10.

26 Existen varias versiones arábigas de porciones del Antiguo Testamento. Una de las más conocidas es la del obispo Juan de Sevilla, hecha en el 724 para los árabes cristianos, otras datan del siglo X.

27 Éxodo 15:3, LBLA.

28 Durante los últimos años de su vida, SAN AGUSTÍN [354-430] vivió el cataclismo de la invasión vándala del norte de África. A finales del mes de mayo del año 430 los vándalos liderados por Genserico se presentaron delante de Hipona, la ciudad más fortificada de la región, y establecieron un sitio que duró 14 meses. Durante el sitio, Agustín cayó enfermo de fiebres y supo que aquella enfermedad sería fatal, aunque su mente se mantuvo lúcida hasta su muerte y el 28 de agosto del año 430, a la edad de 76 años. Pocos meses después Hipona cayó en poder de los Vándalos y quedó totalmente arrasada.

29 Se refiere a DAVID PAREUS [1584-1622], teólogo reformado alemán nacido en la ciudad de Frankenstein (actualmente conocida como Ząbkowice Śląskie, en Polonia); cursó sus estudios en el Collegium Sapientiae en Heidelberg, bajo la tutoría de Zacharias Ursinusque. Fue pastor en Niederschlettenbach, cerca de Bergzabern, pero después de largas disputas con la población católica de la ciudad regresó a Heidelberg como profesor. Tras ejercer de pastor en diversas poblaciones fue investido Doctor en Teología en 1593 y posteriormente fue Profesor de Antiguo Testamento (1596) y Nuevo Testamento (1602). Su principal aportación fue la primera versión reformada de la Biblia en alemán, llamada Neustädter Bible.

30 Se refiere a la ciudad alemana de HEIDELBURG, actualmente conocida como Heidelberg, situada en el valle del río Neckar en el noroeste de Baden-Wurtemberg. En plena la Guerra de los Treinta años, en 1622, y tras un asedio de dos meses, fue devastada por los ejércitos de la Liga Católica, comandada por el Conde de Tilly, que tomaron la ciudad y el castillo, entregando al Papa como regalo la Bibliotheca Palatina que había en la Iglesia del Espíritu Santo.

31 Se refiere a lo que se conoce como GUERRA DE ESMALCALDA entre 1546 y 1547, que enfrentó al ejército del emperador Carlos V, comandado por Fernando Álvarez de Toledo, Duque de Alba, contra el ejército de la Liga de Esmalcalda, formada por los Estados luteranos y dirigida por Juan Federico I de Sajonia y Felipe I de Hesse. Lutero murió el 18 de febrero de 1546; la guerra comenzó el 9 de Julio de ese mismo año 1546.

32 “Entre los hijos de los hombres”, literal: “los hijos de Adán”. Una expresión peculiar. En hebreo מִבְּנֵ֥י אָדָֽם mibbənê ’āḏām. SCHÖKEL hace notar que esta expresión confiere al salmo un carácter universal que trasciende los límites de Israel, el pueblo escogido, para abarcar a toda la humanidad.

33 Proverbios 20:6.

34 La tradición Católica Apostólica Romana tiene un dicho para definir esta suerte de faltas: “Peccata minuta”, “pecados pequeños” y que acabó convirtiéndose en una locución latina de uso cotidiano utilizada para identificar lo que se considera un error o falta leve o relativizar la gravedad de algunos hechos por comparación a otros.

35 El filósofo, poeta, economista y reformador social inglés JOHN RUSKIN [1819-1900] considerado como uno de los padres del socialismo cristiano, en su famoso libro para jóvenes “Our Fathers Have Told Us: sketches on the History of Christiendom”, publicado en 1880, incluye en Salmo 12, junto con los Salmos 1, 8, 13, 14, 15, 19, 23, 24, 48, 72 y 75 como salmos clave para la guía personal y el desarrollo social.

36 Eclesiastés 11:1.

37 Sobre este mismo tema incluimos el hermoso poema en catalán de BENJAMÍN VILA CAMPDERRÓS [1918-1994]:

És aviat per recollir-te encara

tot i que veig que ja t’estàs glatint

per deixar el món i llançar-te a la volada

que per fi et porti al recer de mon niu.

Ja creus a ser a la fi de la jornada

perquè, per un moment, cansat et sents?

El sol és alt, torna a agafar l’arada

abans no es pongui et resta molt que fer.

No veus un desvalgut per ajudar-lo?

Llàgrimes no n’hi ha per eixugar?

No veus un peregrí per orientar-lo?

Ni un cor orfe d’amor per estimar?

Si no per a tu, no vols pels altres viure?

Ja sé que és ple d’espines ton camí;

paga cada punxada amb un somriure

posa-ho al compte que has de saldar amb mi.

En español, la traducción viene a ser: «Es aún temprano para recogerte / aunque veo que ya estás anhelando / dejar el mundo y lanzarte al vuelo / que por fin te lleve al cobijo de mi nido. // ¿Crees estar ya al fin de la jornada / porque, por un momento, te sientes cansado? / El sol está alto, vuelve a recoger el arado / antes que se ponga te queda mucho por hacer. // ¿No ves un desvalido para ayudarlo? / ¿No hay lágrimas por enjugar? / ¿No ves un peregrino para orientarlo? / ¿Ni un corazón huérfano de amor para amar? // ¿Si no por ti, no quieres vivir por los demás? / Ya sé que tu camino está lleno de espinas; / paga cada punzada con una sonrisa / ponla en la cuenta que conmigo has de saldar».

38 WOLCOMBE escribió este párrafo en el año 1612, a principios del siglo XVII. Y, sin embargo, podría pensarse que está sacado de un periódico publicado en cualquier país del mundo en pleno siglo XXI.

39 También conocido como ROBERT WOLLOCOMBE.

40 En hebreo שָׁ֤וְא יְֽדַבְּרוּ֮ אִ֤ישׁ אֶת־רֵ֫עֵ֥הוּ šāw yəḏabbərū ’îš ’eṯ-rê‘êhū. El término hebreo שָׁ֤וְא šāw que nuestras versiones traducen por “mentira” o “falsedad” lo encontramos en Éxodo 23:1 y Deuteronomio 5:20: “No dirás falso testimonio contra tu prójimo”, por lo cual el sentido es claro. La KJV traduce: “They speak vanity every one with his neighbour”, “Hablan vanidad cada uno con su prójimo”, pero no parece que sea este el sentido. Schökel traduce: “No hacen más que mentirse unos a otros”.

41 En el original: “Ca’me, and I’ll ca’thee”, “Llámame y te llamaré” [“Scottish Proverbs” Collected and Arranged by Andrew Henderson, With Explanatory Notes and Glossary by James Donald, 1876»]. Tiene el sentido de “adular”: Adúlame y te adularé.

42 En hebreo כָּל־שִׂפְתֵ֣י חֲלָקֹ֑ות kāl-śip̄ṯê ḥălāqōwṯ. El tema de la lisonja y la calumnia es muy habitual en los libros poéticos: Salmo 5:9; 109:2; 120:2; Proverbios 6:17,19; 12:5,17; 14:5; 19:5; 26:23,28; 29:5.

43 En hebreo בְּלֵ֖ב וָלֵ֣ב bəlêḇ wālêḇ, una expresión que en literalmente es: “con corazón y corazón”, es decir que tienen dos corazones. El rabino DAVID KIMCHI [1157-1236], uno de los más prestigiosos eruditos en hebreo bíblico de la Edad media lo explica como: «un corazón para el bien y otro para el mal».

44 2 Reyes 9:1-37; 10:18-27.

45 Hechos 19:23-41.

46 JUAN CRISÓSTOMO [347-407] señala que el salmista describe aquí la mentira en su peor vertiente, la de la hipocresía: “labios lisonjeros y doblez de corazón”. No es de extrañar que amoneste a los Colosenses diciéndoles: “no os mintáis los unos a los otros” (Colosenses 3:9); y que hable a los Gálatas en términos tan duros: “toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Pero si os mordéis y os devoráis unos a otros, mirad no sea que os destruyáis unos a otros” (Gálatas 5:14,15).

47 Salmo 44:21; Jeremías 17:10; Romanos 8:27.

48 Hemos adaptado al español la traducción poética de La Eneida al inglés hecha por JOHN DRYDEN [1631-1700], que se aparta un tanto del texto original latino, pero que es la que utiliza Spurgeon. La traducción del texto latino original viene a ser: «¡Si ya ni la gran Juno / ni el padre Saturnio contemplan esto con ojos justos! / No hay lugar seguro para la lealtad».

49 Traje que los príncipes, señores y algunas otras personas o entidades dan a sus criados para llevar a cabo sus tareas; por lo común, un uniforme con distintivos.

50 Mateo 23:15.

51 Se trata de una frase irónica. Ginebra se identifica en este caso con la severidad y austeridad del calvinismo, mientras que Roma con el lujo, la pompa y mayor permisividad del catolicismo del siglo XVI. El sentido de la frase es reforzar la ironía que impregna todo el texto diciendo: “Estoy con quien más me conviene y donde más me conviene, cuando más me conviene”

52 Mateo 23:13.

53 Jueces 21:25.

54 Se refiere a BIÓN DE BORÍSTENES, [325-246 a.C.] filósofo griego nacido en la colonia griega de Olbia en Escitia, cuya línea de pensamiento se aproximaba a la de los cínicos. Pasó la mayor parte de su vida yendo de una ciudad a otra, dando conferencias y enseñando por dinero. Popularizó lo que se conoce como “diatriba griega”, una forma de discurso cuyo objeto es censurar, criticar, ridiculizar, y a veces incluso injuriar a otros; muy común entre los políticos y a ocasionalmente entre los académicos. Influenció la sátira latina de Lucilio y Horacio. Se conservan bastantes fragmentos de sus obras.

55 Se refiere en este caso a WALTER RALEIGH [1552-1618], marinero, escritor, cortesano y político inglés aliado de la reina Isabel I.

56 En hebreo בְּלֵ֖ב וָלֵ֣ב bəlêḇ wā-lêḇ de לֵב leb, “corazón”.

57 Lucas 22:1-6; Juan 13:21-30.

58 Hechos 4:32.

59 Versión latina de la Vulgata del texto de Ezequiel 11:19: “et dabo eis cor unum”, “y les daré un solo corazón”. Así traducen este texto de Ezequiel LBLA y la RVR1977.

60 JUAN CRISÓSTOMO [347-407] considera que el salmista no pide aquí para ellos un castigo físico sino más bien un beneficio moral y espiritual, no una mutilación de su cuerpo sino la extirpación del vicio. No clama a Dios para que literalmente arranque o desgaje su lengua, sino que ampute su soberbia, que doblegue su arrogancia, que corte de un tajo su orgullo desde las mismas raíces ridiculizando todas sus pretensiones, para que haya pública constancia de su necedad.

61 Judas 1:3.

62 Mateo 11:30.

63 Salmo 90:6; 103:15; Job 14:2.

64 1 Corintios 6:20.

65 En este mismo sentido dice JUAN CRISÓSTOMO [347-407]: «Tus labios no te pertenecen, no son tuyos sino del Dios soberano que los diseñó y los creó. (…) por tanto, los tienes en régimen de alquiler; no para que den espinas y abrojos de mentira y arrogancia, sino para que germinen en ellos semillas de humildad que se transformen en frutos provechosos de alabanza, bendición y amor».

66 SCHÖKEL considera este versículo como clave puesto que el tema específico del Salmo es la palabra: (1) la de los malvados (2) la de los pobres; y (3) la de Dios. La palabra de los malvados es engaño y lisonja (12:2); la de los pobres son gemidos y oraciones (12:5); la palabra de Dios es pura y perfecta como la plata refinada (12:6). «El Salmo comienza con el uso que hacen de la palabra los malvados, especialmente como instrumento de poder. El engaño שָׁ֤וְא šāw es cosa habitual y conocida, como también la lisonja malintencionada y la doblez (12:2). Todo ello se ordena y culmina en el grito desafiante: “Nuestra lengua es nuestra fuerza, ¿quién será dueño nuestro?” (12:4). El poder de la palabra entre los hombres es terrible. (…) El orante dirige su súplica a Dios con una frase que aquí recobra todo su realismo, “que les corte los labios”, es decir, que los deje sin palabra (…) Pienso en el uso y poder que confiere la palabra en la publicidad, en la política interna e internacional. Quien controla la palabra, los medios de comunicación, detenta un poder inmenso. ¿Cuánto de la propaganda y la política está basado en el engaño, en el halago abierto o la seducción subliminar, en el gritar grandezas? El poder de la palabra se consolida en “grupos” que intentan “hacerse los amos” y en parte lo consiguen. Los hombres pueden sentirse envueltos por ese pulular de palabras, aplastados por el poder de la falsedad e injusticia. El salmo suena terriblemente actual». Salmos, Tomo I, 1-72, Editorial Verbo Divino, Estella, Navarra, 1992.

67 Es decir, en la lengua tenemos nuestro poder, con las palabras podemos dominarlo todo, la mentira y la lisonja nos bastan para dominar a nuestros semejantes sin necesidad de recurrir a la violencia, de modo que contra nosotros no hay quien pueda; y nuestra fuerza es nuestro dios (Habacuc 1:11). O como lo expresa el salmista en otro pasaje: “Ponen su boca contra el cielo, y su lengua recorre la tierra” (Salmo 73:9). ORÍGENES [185-254] en su exposición de este versículo echa en cara a los paganos de pretender dominarlo todo con la retórica, hasta el punto que: «Sus filósofos, poetas e historiadores no se preocupan de otra cosa que del lenguaje».

68 Se refiere a QUINTO SEPTIMIO FLORENTE TERTULIANO, más comúnmente conocido como TERTULIANO [160- 220], escritor y apologista cristiano cuya obra, escrita en latín, destaca por su vigor, suave sarcasmo, expresión epigramática y espíritu aguerrido. Escribió numerosas obras de apologética (la mayoría publicadas por CLIE) y son suyas diversas frases famosas como la conocida: “La sangre de los mártires es semilla de cristianos”.

69 Se refiere al emperador romano FLAVIO CLAUDIO JULIANO [332-363 d.C.], emperador romano conocido como Juliano el Apóstata, por renegar del cristianismo y convertirse al paganismo. Fue hijo de Julio Constantino, hermanastro del emperador Constantino I, y su segunda esposa Basilina. Siendo niño, fue testigo del asesinato de su familia en un motín militar promovido por su primo y emperador Constancio II, hecho que, como él mismo afirmó, dio pie a su desconfianza hacia el cristianismo. Nada más conocer la muerte de Constancio y ser proclamado emperador, Juliano hizo pública ostentación de sus creencias paganas rindiendo culto a los dioses. Las convicciones religiosas de Juliano y su restauración del culto a los dioses paganos son motivo de considerables disputas entre los historiadores.

70 Una leyenda no verificada históricamente y de la que circulan distintas versiones. La tradición ortodoxa y católica romana la atribuyen no a un campesino sino a ALEJANDRO, Patriarca de Costantinopla del 314-337, en el marco del Concilio Ecuménico de Nicea en el año 325, en el cual Alejandro contendió con arrianos y paganos; estas tradiciones consideran que el filósofo pagano quedó mudo como un milagro obrado por Alejandro. Añaden que cuando el filósofo aceptó el evangelio y creyó, junto con muchos otros filósofos paganos que le acompañaban, recuperó el habla.

71 Éxodo 5:2.

72 Job 21:15.

73 Daniel 3:15.

74 Salmo 100:3.

75 En hebreo מִשֹּׁ֥ד עֲנִיִּים֮ miššōḏ ‘ănîyîm de שֹׁד shod, “devastación, destrucción”. Sin necesidad de recurrir a la violencia física, la lengua puede ser mucho más destructora aún: “Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. ¡Mirad qué gran bosque se incendia con un pequeño fuego!” (Santiago 3:1-12).

76 En hebreo אָ֭קוּם ’āqūm una expresión típica para expresar la acción divina de actuar impartiendo justicia, como en Isaías 33:10. Ver Salmo 76:9; 102:13.

77 En hebreo אָשִׁ֥ית בְּ֝יֵ֗שַׁע יָפִ֥יחַֽ לֹֽו ’āšîṯ bəyêša‘ yāp̄îaḥ lōw un texto difícil de entender que lleva de cabeza a los traductores. La versión griega de los LXX o Septuaginta lee τίθημι ἐν σωτηρία παρρησιάζομαι ἐν αὐτός que la Vulgata traduce al latín como: “Ponam in salutari fiducialiter agam in eo”, “Pondrélos en salvo, en esto yo obraré confiadamente”. El sentido del término hebreo יָפִ֥יחַֽ yāp̄îaḥ es “soplar” o dar bufidos. KRAUS aunque traduce “pondré en salvación a aquel a quien oprimen duramente” hace la siguiente aclaración: «Desde hace mucho tiempo se discute intensamente cuál pueda ser la traducción de יָפִ֥יחַֽ לֹֽו. De ordinario se traduce: “por la que él anhela”. Sería preferible: “contra quien resoplan” (“a quien oprimen duramente”); el Salmo 10:5: “A todos sus adversarios desprecia”, y Habacuc 2:3: “se apresura [ וְיָפֵ֥חַ ] hacia el fin y no defraudará” ayudan comprender el significado del verbo y su construcción con לֹֽ (…) debe entenderse del feroz y peligroso soplido de los perseguidores, que causan duras vejaciones al oprimido. Por eso traducimos “aquel a quien oprimen duramente”».

78 Lucas 18:7.

79 Génesis 14:9-15.

80 Génesis 21:14-17.

81 Isaías 52:10.

82 Se refiere a WILLIAM GURNALL [1616-1679] Nacido en Walpole, Norfolk fue educado en Cambridge en filosofía y letras, ordenado presbítero de la Iglesia Anglicana. Eminente teólogo y afamado escritor mantuvo criterios próximos a los puritanos aunque finalmente firmó la declaración exigida por el Acta de Uniformidad de 1662 conocida como “Clarendon Code”, por lo que fue duramente criticado. Pero su fama y su prestigio han perdurado hasta el día de hoy. Su obra más conocida es “Christian in Complete Armor”, publicada en tres volúmenes en 1655, 1658 y 1662 respectivamente, y sobre la que Spurgeon escribió: «Una obra extraordinaria y de valor incalculable, cada línea viene abarrotada de sabiduría, cada frase es sugestiva. Sobre el mismo se han predicado probablemente más sermones que sobre ningún otro volumen no inspirado. A menudo hemos recurrido a él cuando nuestro propio fuego ardía tenue, y pocas veces hemos dejado de encontrar en el brasero de Gurnall algún carbón encendido. A nuestro juicio, es la mejor cantera ideológica en toda nuestra biblioteca». Editorial Peregrino de Ciudad Real (España) ha traducido y publicado en español la edición resumida y abreviada hecha en 1988 por The Banner of Truth Trust con el título de “El Cristiano en toda la armadura de Dios”.

83 Mateo 22:6-7.

84 Malaquías 4:2.

85 Malaquías 3:16.

86 Mateo 15:19.

87 Filipenses 4:8.

88 Proverbios 19:22 LBLA. La KJV traduce “The desire of a man is his kindness: and a poor man is better than a liar”. El sentido de la comparación que hace el autor se pierde bastante en las traducciones españolas.

89 Salmo 6:9 KJV. Ver comentarios al Salmo 6:9.

90 Salmo 56:8. Sin duda se trata de una alusión a los conocidos lacrimatorios (del latín lacrima, ‘lágrima’) o pequeñas vasijas de terracota, alabastro o cristal encontrados en tumbas romanas y griegas tardías, en las que por muchos años se creía erróneamente que los deudos del difunto derramaban sus lágrimas. Esa interpretación incorrecta aparece recogida en diversos escritos y obras literarias como “Antonio y Cleopatra” de WILLIAM SHAKESPEARE [1564-1616]. Actualmente los arqueólogos han demostrado mediante pruebas de laboratorio de que el contenido de estos supuestos lacrimatorios no eran lágrimas, sino que se trataba de frascos para contener perfumes. La costumbre de los lacrimatorios floreció de nuevo durante la época victoriana en el siglo XIX, cuando quienes lloraban la pérdida de un ser querido guardaban sus lágrimas en pequeños recipientes con tapones especiales para evitar que se evaporaran fácilmente. Cuando finalmente las lágrimas se evaporaban, terminaba el periodo de luto. Pero Spurgeon no comparte esta opinión por lo que merece la pena que el lector vea las extensas exposiciones y comentarios sobre este tema al Salmo 56:8 en este mismo Tomo II.

91 Romanos 8:26.

92 Salmo 12:5.

93 Jonás 2:4.

94 Lamentaciones 3:56, RVA. En hebreo לְרַוְחָתִ֖י lərawḥāṯî de רְוָחָה revachah, “pausa, respiro”.

95 Salmo 42:1.

96 Mateo 5:3-12.

97 1 Samuel 1:13.

98 Mateo 18:13.

99 Juan 20:11.

100 En el original inglés: “How sweet is music upon the waters”. Resulta difícil esclarecer qué tenía el autor en mente con esta frase. Por el contexto debemos entender simplemente que el dolor y las lágrimas hacen que la música nos suene más dulce. Pero merece la pena tener en cuenta que en su época (siglo XVII/XVIII) comenzaron a realizarse los primeros experimentos con la velocidad el sonido y encontraron que viaja con mayor velocidad en el agua que en el aire (unos 1500 m/s en agua salada contra 343 m/s en el aire) de modo que un buzo en el mar escucharía un sonido producido en la orilla cuatro veces más rápido que una persona que se encontrara en la misma distancia tierra adentro. Y que fue en esta época que GEORGE FRIEDRICH HÄNDEL [11685-1759] estrenó (17 de julio de 1717) su famosa composición: “Water Music”, escrita para ser interpretada sobre el río Támesis por cincuenta músicos en una barcaza que navegaba cerca de la barcaza del rey JORGE I [1660-1727], que al parecer quedó tan impresionado que pidió que se interpretara tres veces. ¿Le habrían llegado a Sheffield noticias sobre éxito del concierto real? ¿Escribió estas palabras convencido de que realmente la música suena mejor sobre el agua que sobre la tierra? No lo sabemos. Pero NOEL THOMAS CARRINGTON [1777-1830] en su poema “On Seeing a Fine Frigate at Anchor in a Day of Mount Edgcumbe”, publicado en la sección dedicada al agua del “Young Gentleman’s Book: Containing a Series of Choice Readings in Popular Science an Natural History” (1832) una frase similar al iniciar la sexta y séptima estrofas: “Music upon waters! Far more suit!”. Y SAREPTA MYRENDA HENRY [1839-1900] emplea la misma frase en “Victoria: With Other Poems” (1865).

101 Mateo 18:14.

102 Mateo 18:3.

103 Éxodo 7:14 - 11:10.

104 Proverbios 22:22-23.

105 Ezequiel 38:11-14.

106 Ezequiel 38:22-23.

107 Dice al respecto JUAN CRISÓSTOMO [347-407]: « “Por la opresión de los humildes; por el gemido de los menesterosos, ahora me levantaré, dice el Señor”. Aprendamos de estas palabras hasta dónde alcanza el gemido de los menesterosos y lo gigantesco del poder de la humildad. No dice que sean las virtudes y méritos personales lo que impulsa a Dios a levantarse sino: “el gemido de los menesterosos”; no dice que sean los ruegos y sacrificios lo que lo incentiva a proceder de inmediato sino: “la opresión de los humildes”. Soportad por tanto el ultraje y la injusticia con paciencia y mansedumbre, puesto que tal proceder es el que con mayor celeridad pondrá a Dios de vuestro lado, convirtiendo vuestra pesadumbre en dicha. La fuerza del gemido de los menesterosos y del sufrimiento de los humildes es ilimitada, pues provoca una reacción inmediata de Dios. Temblad, pues, quienes actuáis injustamente con los pobres; porque vosotros contáis con poder terrenal, riquezas, y el favor de los jueces, pero ellos cuentan con el arma más poderosa que existe: sus gemidos, sus lamentos, el clamor de vuestras injurias hacia ellos, que despiertan las iras del cielo y atraen su ayuda. Y este arma invencible, el gemido de los humildes, abre rejas, socava cimientos, arrasa ciudades hundiendo linajes y dinastías, sepultándolas para siempre en la fosa del olvido. Cuando los pobres son oprimidos, y lo soportan con humildad y mansedumbre sin proferir palabra, tan solo gimen levantando la mirada al cielo, la respuesta del cielo jamás se hace esperar, y siempre es devastadora para los opresores».

108 Salmo 19:10-12.

109 Se refiere a PELAGIO [¿354-420?], un monje de origen británico que vivió entre los siglos IV y V d.C. afincado primero en Roma, aunque lo que sabemos sobre su vida es muy poco, fuera de alusiones en escritos de sus opositores. Como sucedería años después con Martín Lutero, en Roma Pelagio se encontró con una moral cristiana absolutamente degradada, y llegó a la conclusión de que la causa de tal degradación estaba en la teología (difundida mayormente por Agustín de Hipona) sobre la gracia santificante como don gratuito concedido por Dios a los seres humanos alegando que dejaba al hombre en el papel de un mero autómata y sin posibilidades ni incentivos para hacer nada a favor de su regeneración. Negó el pecado original heredado de Adán, afirmando que el hombre nace con la capacidad de no pecar y libre albedrío para decidir hacer el bien o el mal. Viajo al Norte de África junto con su amigo Celestio y entró en una dura polémica con Agustín. Fue sometido a varios Sínodos y finalmente declarado hereje.

110 El semi-pelagianismo defiende una depravación parcial en lugar de la depravación total establecida en el punto 1 de los 5 puntos del calvinismo. Admite que el hombre nace contaminado por el pecado, pero no al grado no poder cooperar con la gracia de Dios en su salvación.

111 En Inglaterra del siglo XVII, por su obediencia al Papa de Roma del que la Iglesia Anglicana se había separado, solían llamar “papistas” a los Católicos Romanos.

112 Reciben el nombre de ARMINIANOS los seguidores de los 5 postulados del profesor holandés JACOBO ARMINIO [1560-1609] opuestos a los 5 principios básicos del Calvinismo conocidos en inglés por el acróstico “TULIP” (Ver notas 9 en Salmo 36:1, y 52 en Salmo 44:3). Los 5 postulados del Arminianismo son: (1) El libre albedrío. Aunque afectado por la caída de Adán, el ser humano tiene capacidad espiritual elegir entre el bien y el mal y ejercitar la fe en Dios [Opuesto al punto 1 del Calvinismo “Depravación Total”]. (2) Elección condicional. Dios eligió a los que sabía que tomarían la decisión de ser salvos. [Opuesto al punto 2 del Calvinismo “Elección Incondicional”] (3) Redención universal o expiación general. Cristo murió para salvar a todos los hombres a condición únicamente de que crean. [Opuesto al punto 3 del Calvinismo “Redención Limitada o Particular”] (4) Regeneración limitada. La regeneración está limitada por la voluntad humana, el Espíritu Santo puede ser resistido y sus propósitos resultar frustrados. [Opuesto al punto 4 del Calvinismo “Llamamiento Eficaz o Irresistible”] (5) Caída de la gracia. A pesar de haber sido salvo el ser humano puede circunstancialmente perder la salvación de manera temporal o definitiva dependiendo de sus actitudes y decisiones. [Opuesto al punto 5 del Calvinismo “Perseverancia de los Santos”].

113 2 Pedro 1:21.

114 Se refiere a CHARLES LOUIS DE SECONDAT, señor de la Brède y barón de Montesquieu [1689-1755] filósofo, jurista y escritor francés considerado como de los más relevantes dentro de lo que se conoce como la Ilustración. Uno de los pensadores más influyentes en la historia de las doctrinas políticas, siendo su principal aportación lo que se conoce como el “principio de separación de poderes”, introducido primero en la Constitución de los Estados Unidos y actualmente en la mayor parte de constituciones de las democracias occidentales.

115 Se refiere a FRANÇOIS MARIE AROUET, [1694-1778] más conocido como VOLTAIRE. Fue un escritor y filósofo francés que figura como uno de los principales representantes de la Ilustración, un período que enfatizó el poder de la razón humana y de la ciencia. En 1746 Voltaire fue elegido miembro de la Academia francesa.

116 Dice al respecto EUSEBIO DE CESAREA [267-338]: «De igual manera que la plata es pura cuando ha sido sometida a la llama, no dos ni tres veces, sino purificada en el crisol una y otra vez hasta que ha sido extraída y separada de ella toda sustancia extraña; así es también con las palabras del Señor habladas en verdad, son verdad plena y absoluta, libres de falsedad alguna». AGUSTÍN DE HIPONA [354-430] entiende el ἁγνός de la Septuaginta que la mayoría de versiones traducen como “puras” por “sinceras” y comenta: «“Las palabras del Señor son sinceras”. Aquí se refiere el profeta a las palabras del Señor expresadas a través suyo como medio, y afirma que son “sinceras”, libres de toda falsedad y simulación. Porque muchos hay que predican la verdad adulterada, no de forma sincera, porque la utilizan en provecho propio vendiéndola al precio de las comodidades de este mundo; a estos se refiere el apóstol cuando dice que “anuncian a Cristo por rivalidad, no sinceramente” (Filipenses 1:17)».

117 Proverbios 30:5.

118 En hebreo כֶּ֣סֶף צָ֭רוּף בַּעֲלִ֣יל לָאָ֑רֶץ מְ֝זֻקָּ֗ק שִׁבְעָתָֽיִם kesep̄ ṣārūp̄ ba‘ălîl lā’āreṣ məzuqqāq šiḇ‘āṯāyim. La versión griega de los LXX o Septuaginta lee: ἀργύριον πυρόω δοκίμιον ὁ γῆ καθαρίζω ἑπταπλασίως que la Vulgata traduce al latín como: “argentum igne examinatum, probatum terrae, purgatum septuplum, “plata ensayada al fuego, purificada en la tierra, y refinada siete veces”. KRAUS observa al respecto: «La expresión בַּעֲלִ֣יל לָאָ֑רֶץ “en un horno en la tierra” (añadida quizá como explicación) plantea grandes dificultades. El griego dice δοκίμιον ὁ γῆ. Según el TM habría que leer “en el crisol” o “en el taller”. ¿Se incorporaron aquí al texto algunas lecciones marginales completamente ininteligibles? (Gunkel). Podría ser que בַּעֲלִ֣יל לָאָ֑רֶץ significara uno de los momentos del proceso de fundición: quizás la “inmersión” (Job 16:15 עָלַל “hundido en el polvo”) de la masa derretida en el molde de arcilla». Ver Salmo 18:30; 119:140; así como Salmo 66:10; Proverbios 17:3; 15:4; 30:5; Isaías 1:25; Malaquías 3:3; Zacarías 13:9.

119 AGUSTÍN DE HIPONA [354-430] hace también una interpretación espiritual es estas palabras: «Refinada siete veces mediante: “espíritu de sabiduría, de inteligencia, de consejo, de poder, de conocimiento, de santidad (…) y de temor del Señor” (Isaías 11:2-3, Vulgata). Y siete son, ciertamente, los niveles de bienaventuranza a los que el Señor hace referencia en su sermón del Monte que hallamos en Mateo 5: la de los pobres en el espíritu (5:3), los que lloran (5:4) los mansos (5:5), los que tienen hambre y sed de justicia (5:6), los misericordiosos (5:7), los limpios de corazón (5:8), y los pacificadores (5:9). Porque la octava: bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia (5:10), simboliza el fuego donde la plata es refinada siete veces».

120 La teoría de las siete etapas o períodos en la historia de la Iglesia comenzó a desarrollarse a finales del siglo XVIII y parte de la interpretación de los capítulos 2 y 3 del Apocalipsis. Uno de sus principales promotores e impulsores fue C. I. SCOFIELD [1843-1921]. Se distribuyen más o menos del siguiente modo:

–ÉFESO, años 30-100: la Iglesia Apostólica primitiva.

–ESMIRNA, años 100-312: las grandes persecuciones bajo el Imperio Romano;

–PÉRGAMO, años 312-606: la Iglesia contaminada con elementos mundanos después de la conversión de Constantino.

–TIATIRA, años 606-1520: auge del Papado.

–SARDIS, años 1520-1750: la Reforma protestante.

–FILADELFIA, años 1750-1900: la reforma se va purificando y evoluciona hacia un testimonio más claro del evangelio.

–LAODICEA, años 1900 –: la Iglesia actual que se siente libre y rica y no tiene necesidad de nada.

121 Apocalipsis, de 2:1 a 3:22.

122 Dice al respecto TEODORETO DE CIRO [393-458]: «Preservados por la gracia no solo logramos escapar de los ardides y peligros de esta generación perversa sino que alcanzaremos la salvación eterna». Y CASIODORO [485-583]: «La gracia nos consuela en las pruebas y tribulaciones mientras estamos aquí en la tierra y nos preserva para que finalmente alcancemos el reposo eterno»

123 La versión inglesa KJV traduce este versículo de la siguiente forma: “Thou shalt keep them, O Lord, thou shalt preserve them from this generation for ever”, y Spurgeon juega con los verbos para concluir su exposición: «Our faith believes those two assuring words, and cries, “Thou shalt”, “thou shalt.”». Hemos ampliado y adaptado la traducción para hacerla más comprensible al lector hispano.

124 Un versículo complejo. En hebreo סָבִ֗יב רְשָׁעִ֥ים יִתְהַלָּכ֑וּן כְּרֻ֥ם זֻ֝לּ֗וּת לִבְנֵ֥י אָדָֽם sāḇîḇ rəšā‘îm yiṯhallāḵūn kərum zullūṯ liḇnê ’āḏām. En la versión griega de los LXX o Septuaginta: κύκλος ὁ ἀσεβής περιπατέω κατά ὁ ὕψος σύ πολυωρέω ὁ υἱός ὁ ἄνθρωπος. La Vulgata: “in circuitu impii ambulant secundum altitudinem tuam multiplicasti filios hominum”, “los impíos deambulan en círculos; según tu altitud has multiplicaste los hijos de los hombres”. AGUSTÍN DE HIPONA [354-430] ve en estos que “deambulan en círculos” a los herejes, que giran constantemente dando vueltas de error en error, y se multiplican en gran manera, pero que jamás logran llegar al centro porque rehúyen el camino de la verdad, por lo cual «no tienen acceso al reposo eterno, al día octavo, que da título de este Salmo (…) por ello, como recomienda Salomón: “El rey sabio avienta como trigo a los malvados, y los desmenuza con rueda de molino” (Proverbios 20:26 NVI)». Y CASIODORO [485-583] repite la misma idea: «Jamás alcanzarán el reposo eterno del día octavo, porque no van hacia ninguna parte, pues giran sobre sí mismos como las ruedas».

125 La versión inglesa KJV hace de este versículo la siguiente traducción: “The wicked walk on every side, when the vilest men are exalted”, “Los impíos andan por todas partes, cuando los hombres más viles son exaltados”. Hemos utilizado una traducción literal para encajarla con las exposiciones.

126 Efesios 1:19-23; Filipenses 2:9-11.

127 Proverbios 28:12.

128 Proverbios 28:18.

129 Proverbios 29:2.

El Tesoro de David: la revelación Escritural a la luz de los Salmos

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