Читать книгу Tratado de contratación de Derecho Bancario - Javier Arana Navarro - Страница 16

Por tanto, debemos comenzar a estudiar el sistema de fuentes por las que pertenecen al ámbito local. Este ámbito, además, es muy importante, porque regula infinidad de aspectos prácticos de la vida cotidiana. Es una normativa de proximidad, y a pesar de que está basada en normas de rango inferior, como son las Ordenanzas municipales, están en condiciones de incorporar restricciones importantes, tanto respecto de la posibilidad de ejercer el comercio, hay regulaciones que imponen condiciones muy restrictivas en cuanto la posibilidad de realizar ventas dentro del término municipal, como en relación con el Derecho de la Competencia. En estos casos, la posibilidad de obtener una respuesta del ordenamiento jurídico es muy limitada, y la ejecución de los principios liberales en materia económica es complicada, ya que las Ordenanzas se recrean en los pequeños detalles, que son conocidos por los residentes, y no lo son por los que vienen de fuera. Es lo que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea denominó teoría de la bagatela en la Sentencia Epoux Janssens v. Brasseries de Haecht, en oposición a la teoría contraria, que es la conocida con el nombre de teoría de la gota de agua, que sí da solución a estos casos, obviando la normativa local o gremial innecesariamente restrictiva.

Además de crear sus normativas propias, los entes locales tienen el poder de investigar el cumplimiento de la normativa, mediante la creación de órganos inspectores y de la imposición de sanciones. El ámbito local, que se anuda con suma facilidad al ámbito sectorial, es importante a la hora de determinar las condiciones reales en las que los ciudadanos pueden ejercer sus derechos en las relaciones jurídicas, que por separado puede parecer que tienen poca importancia, pero que si se suman unas a otras, nos encontramos con que el resultado es francamente considerable.

También tienen la potestad de crear Tribunales Arbitrales, que en muchas ocasiones son gratuitos, pero que en otras no lo son gratuitos. En general, esta labor debe considerarse como positiva en conjunto, ya que las Juntas arbitrales ponen un freno a las prácticas desmedidas de las empresas que fabrican productos en serie, y que tienen una potencia económica desproporcionada en relación con la del consumidor de a pie.

Y tienen todavía más importancia cuando se aplica a los proveedores de servicios, como son los de las telecomunicaciones y los bancarios. En última instancia, las normativas locales tienen una gran incidencia en el Consumo, y a tal fin es de resaltar la relevancia de la venta en mercados públicos y en la vía pública, estando estas circunstancias reguladas por la Ley del Comercio Minorista.