Читать книгу Más patatas y menos prozac - Kathleen DesMaisons - Страница 21
Como muchos dulces
ОглавлениеEs probable que las personas sensibles al azúcar coman muchos dulces. Aunque pienses que no deberías hacerlo, puede ser que comas dulces, galletas o helados. Tal vez el postre sea la parte más importante de tu comida. Puede ser que prescindas de los alimentos dulces durante el día y que te des atracones de ellos por la noche.
O puede ser que te encanten los alimentos dulces pero elijas no comerlos. Lindsay, una paciente mía alta y esbelta, era sensible al azúcar. Puesto que estaba preocupada por las calorías y las grasas, había dejado de comer helados con chocolate caliente, barras de caramelo y los otros dulces que solía ansiar. Pero a pesar de haber erradicado el azúcar obvio de su alimentación, los alimentos dulces siguieron encontrando la manera de llegar a su boca. Comía barritas energéticas para desayunar. Dejó de beber Coca-Cola y se pasó a los zumos de fruta. También descubrió que le encantaba el zumo de zanahoria. Y tomaba un vaso de vino con la cena como premio para compensar lo mucho que echaba de menos sus alimentos llenos de calorías.
Pero todos los alimentos sustitutorios mencionados contienen altas cantidades de azúcar. La constitución bioquímica sensible al azúcar de Lindsay ansiaba esta sustancia y la llevaba a ingerirla incluso sin que supiera lo que estaba haciendo. Sus barritas energéticas y muchos de los otros alimentos «saludables» bajos en grasas que comía tenían un contenido muy alto en lo que en las etiquetas se denominaba «carbohidratos». El azúcar está presente bajo muchas formas, y las personas sensibles al azúcar las encuentran. En el capítulo diez, en el apartado «Azúcares simples», examino con cierto detalle la cuestión de los distintos tipos de azúcares presentes en los alimentos.