Читать книгу Introducción a la historia económica mundial (2ª ed.) - Carles Sudrià Triay - Страница 62
5.1 El factor trabajo
ОглавлениеEl trabajo era un factor abundante a principios de la Revolución Industrial. El «ejército de parados» que, según Marx, formaban los campesinos expulsados del campo a consecuencia del proceso de enclosure y que abastecería la mano de obra para el proceso de industrialización, nunca existió: la población agraria inglesa siguió creciendo durante la Revolución Industrial (cuadro 3.4). Aun así, la baja proporción de población dedicada a la agricultura y el fortísimo incremento de población que experimentó Gran Bretaña desde mediados del siglo XVIII ofrecían una fuerza de trabajo suficiente para satisfacer la demanda de las nuevas empresas.
CUADRO 3.4
Población y población agraria en Gran Bretaña (millones de personas)
Fuente: Guía práctica..., p. 37, a partir de maddison (1991).
Así pues, la mano de obra no era escasa, pero más que la cantidad lo que interesa es su capacidad de adaptación a la actividad industrial, la formación de la clase obrera. En este sentido, la amplia proporción de población ocupada anteriormente en los sectores textil y siderúrgico ofrecía el personal y la experiencia necesarios: los mismos trabajadores pasaban de trabajar a mano a operar con las máquinas y, así, las fábricas podían aprovechar también a los especialistas (capataces, herreros, tintoreros). Asimismo, una parte del nuevo empresariado procedía también, como veremos, de los mismos sectores. La prueba más clara de la suficiencia de mano de obra es el mantenimiento de salarios bajos. El coste de oportunidad del trabajo venía determinado por la productividad del sector tradicional, que era todavía el predominante durante toda la etapa de la Revolución Industrial. Por lo tanto, para atraer mano de obra las industrias nuevas solo tenían que ofrecer salarios ligeramente superiores o simplemente más seguridad en el trabajo, cosas muy compatibles con las tasas de beneficio y de reinversión necesarias para la continuidad del proceso.