Читать книгу Cómo vencer los temores y fortalecer la salud emocional - Enrique Chaij - Страница 8
Bajo el signo del temor
Оглавление“No hay en el mundo mayor necesidad que la de la liberación del temor” (Ernesto Jones).
Durante los días de la Segunda Guerra Mundial, el soldado ucraniano Grisha Sikalenko desapareció de las filas de su ejército. Sus compañeros lo dieron por perdido en el frente de batalla. Pero en realidad había desertado y regresado a su hogar. Solamente sus padres conocían el secreto, quienes excavaron para su hijo una cueva debajo de un montón de estiércol. Y allí Grisha permaneció escondido ¡durante 18 años!, temiendo ser descubierto.
Dos veces al día la madre le llevaba alimento, y durante la oscuridad de la noche salía afuera para respirar aire puro. En invierno debía sufrir mucho frío; y en verano el escondite se hacía casi insoportable. Pero finalmente, en 1958 Grisha se animó a salir de su refugio, dispuesto a recibir la pena que le impusieran como desertor. Sin embargo, habían pasado tantos años, que se libró del castigo.
Este caso extremo muestra cuán alienante puede llegar a ser el temor cuando se vuelve tan exagerado y dominante. No deja pensar racionalmente, y produce una triste cobardía.
¡Cuántos seres sufren este efecto paralizante y viven sin libertad de acción! Se sienten impedidos para cristalizar sus sueños. Quieren, pero no se animan. Y así matan sus sanas ambiciones, porque el temor los inhibe y los oprime. ¡Cuántos talentos y aptitudes se pierden en el mundo por este lamentable motivo!... ¡Y cuántos hombres y mujeres viven desdichados por esta misma razón!...