Читать книгу Estudios jurídicos sobre la eliminación de la violencia ejercida contra la infancia y la adolescencia - Mª Aranzazu Calzadilla Medina - Страница 10

Marciano D. 48,9,5: “La patria potestad debe consistir en la piedad, no en la atrocidad”. La justificación de este fragmento viene dada por la falta de humanidad en determinados comportamientos del paterfamilias que tuvo reconocidos desde tiempos remotos. Estos poderes afectaban tanto a la decisión de la vida o la muerte del hijo como a castigos corporales o el abandono de hijos considerados como “monstruosos” por padecer algún tipo de imposibilidad.

Prestigiosos romanistas han hablado de la patria potestad como un poder unitario, férreo, que no dejará de ejercer el paterfamilias hasta su muerte o, en su caso, por una capitis deminutio máxima19. Este poder férreo era a su vez el que le concedía todos los derechos sobre los alieni iuris, sin reparar en sus consecuencias. Fernández de Buján sostiene que la patria potestad “en la práctica, su ejercicio se venía limitando por las costumbres de los antepasados, mores maiorum, contrarias a todo abuso en la conducta paterna, y por la ritual consulta al tribunal denominado ‘iudicium domesticum’, así como por otros elementos disuasorios del ejercicio de la patria potestad como fueron la nota censoria y la legislación imperial”20.

Es por ello por lo que tenemos que mencionar los derechos consustanciales a la patria potestad y cómo fue su evolución a lo largo del tiempo debido a los cambios sociales, morales, políticos e incluso religiosos no solo en la propia sociedad romana, sino también en los propios jurisconsultos, emperadores o incluso en la literatura jurídica. El intervencionismo del poder público en el ámbito familiar se intensificó por las reformas que se asumieron en el ámbito familiar. Sobre todo, al pasar de la familia agnaticia a la cognaticia lo que supuso que se configurara como un grupo de personas vinculadas entre sí por lazos de sangre que se consolidaría con la llegada del cristianismo21.